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Elevan a juicio el crimen de un niño de once años

Hernán Anchorena Panique fue asesinado de un disparo mientras jugaba y quedó en medio de una balacera.Los hermanos "Pastel" y "Bebo" Álvarez y Alan Segundo llegan a estas instancias como los supuestos autores.
Domingo, 02 de diciembre de 2018 01:02

En la sala de audiencias del tercer piso del Palacio de Tribunales ingresó el expediente que investiga el crimen de un niño de 11 años, por el que llegan a estas instancias judiciales tres personas, en un hecho ocurrido el 19 de octubre de 2016 en el barrio 18 de Noviembre de Libertador General San Martín.

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En la sala de audiencias del tercer piso del Palacio de Tribunales ingresó el expediente que investiga el crimen de un niño de 11 años, por el que llegan a estas instancias judiciales tres personas, en un hecho ocurrido el 19 de octubre de 2016 en el barrio 18 de Noviembre de Libertador General San Martín.

Si bien esta causa, que conmocionó a toda la comunidad ledesmense, ingresó hace días, las audiencias preliminares y fijación de fecha de las audiencias del debate oral serán recién para el año que viene, según las fuentes judiciales que fueron consultadas por nuestro medio.

Por el crimen de Hernán Alejandro Anchorena Panique (11), llegan a juicio oral y público Juan Marcelo "Pastel" Álvarez, su hermano Matías Orlando "Bebo" Álvarez y Alan Elian Segundo, quien en ese entonces era menor de edad.

El Tribuno de Jujuy tuvo acceso al requerimiento de la elevación de la causa a juicio y según se detalla en la investigación preparatoria, el asesinato del niño ocurrió entre las 21.30 y las 23 de ese 19 de octubre, en la intersección de las calles Domingo Pérez y Doctor Araoz del barrio 18 de Noviembre de Libertador, cuando los hermanos Álvarez "Pastel" y "Bebo" se desplazaban por el lugar y se encontraron con Alan Segundo, donde se produjo una acalorada discusión y luego se produjeron disparos de armas de fuego.

En esa balacera, uno de los proyectiles impactó en la parte posterior de la cabeza de Hernán Anchorena Panique, quien jugaba en la calle a la pelota junto a sus amigos y primos, mientras los protagonistas, todos conocidos del barrio, huyeron del lugar.

El niño de 11 años fue trasladado de urgencia por personal del Same al hospital "Oscar Orías" de Libertador y luego derivado al Hospital de Niños "Héctor Quintana" de la capital jujeña para ser intervenido quirúrgicamente, y al otro día, alrededor de las 14 murió producto del impacto que le ocasionó un traumatismo encéfalo craneal grave.

Lo que se pudo establecer es que la balacera se inició por integrantes de antagónicas bandas de ese sector barrial, que aparentemente se disputaban territorio para la venta de drogas. Los Álvarez se identifican con una banda denominada "grupo de apoyo" y Segundo pertenecería a la banda "los mongos", quienes ya habían protagonizado distintos hechos vandálicos y enfrentamientos con anterioridad al fatal desenlace.

Una balacera que podría haber sido “una masacre”

 

DOMINGO T. PÉREZ / CALLE DEL BARRIO 18 DE NOVIEMBRE DONDE OCURRIERON LOS HECHOS.

Hernán Alejandro Anchorena Panique era alumno de la Escuela Nº 265 de Libertador y además era integrante de una escuela de fútbol, a la que concurría todas las tardes. 
Tras el crimen del niño, toda la comunidad ledesmense se levantó para exigir justicia y a las multitudinarias marchas las protagonizaron niños compañeros y amigos del menor asesinado. 
Una docente del establecimiento recordó a Hernán como “un buen niño”, “conozco de sus sueños, vivencias y alegrías. Era un niño muy respetuoso, muy amable, muy querible”. 
Las personas que presenciaron el ataque de armas de fuego manifestaron estar seguras que “de milagro no fue una masacre. Estos delincuentes se disparaban sin importarles que habían más de 10 chicos jugando en la calle”, dijeron.
Los vecinos de ese sector barrial vivían aterrados por la inentendible disputa de estas bandas, que según hicieron referencia, días atrás hubo otro enfrentamiento en donde una de los Álvarez habría amenazado con un arma de fuego a Segundo. 
Al respecto, Ricardo Ceballos, representante legal de los hermanos Álvarez, le había dicho a nuestro diario en su oportunidad que antes de la elevación a juicio de esta causa, había solicitado la ampliación de declaración indagatoria de sus defendidos ante el fiscal de Investigación penal José Blanco, y luego se dio cumplimiento a la reconstrucción de los hechos ocurridos en el barrio 18 de Noviembre de la ciudad de Libertador.
El representante legal de dos de los tres imputados sostiene la inocencia de sus defendidos y dijo que lo probará en el debate oral.