Luego del temporal de lluvia que se abatió en la madrugada del miércoles sobre San Pedro de Jujuy y que provocó un verdadero caos en numerosos barrios, quedó en claro que otro de los sectores más afectados fue un tramo de la calle Gorriti que no tiene salida. Es por eso que cuando el gran caudal de agua precipitada baja por Walterio Leach y avenida Hipólito Yrigoyen termina impactando contra las casas, muchas de las cuales ya muestran las secuelas de los daños que dejó cada temporal.
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Luego del temporal de lluvia que se abatió en la madrugada del miércoles sobre San Pedro de Jujuy y que provocó un verdadero caos en numerosos barrios, quedó en claro que otro de los sectores más afectados fue un tramo de la calle Gorriti que no tiene salida. Es por eso que cuando el gran caudal de agua precipitada baja por Walterio Leach y avenida Hipólito Yrigoyen termina impactando contra las casas, muchas de las cuales ya muestran las secuelas de los daños que dejó cada temporal.
Las familias apelaron a todo, primero protegiendo sus viviendas para lo cual levantaron las veredas, construyeron pequeñas escaleras, levantaron muro sobre puertas y ventanas, pero cuando el agua baja con fuerza, no hay nada que la detenga.
Con lágrimas en los ojos, las familias fueron relatando lo que les tocó vivir el miércoles dejando al descubierto una sentida necesidad que lleva años sin que ninguna gestión de gobierno se percate de ello, una obra de desage para que se pueda encauzar el flujo del agua y no cause tantos estragos.
"Apelamos a todos los organismos, incluso al Defensor del Pueblo, pero nadie nos da una respuesta, nadie se hace responsable, estamos en completo abandono", dijo la gente.
Muchas fueron las familias que sufrieron la inundación a causa del último temporal que sorprendió en la madrugada.
Hubo sectores donde el gran caudal que arrastraba todo cuanto encontraba a su paso, comenzó a inundar las viviendas, superando el metro de altura.
En otros sectores
En uno de los casos, una madre y sus hijas empujaron juntas la puerta para que no sea arrancada de cuajo por la correntada, "junto a mis tres hijas empujábamos la puerta, pero el agua ingresó por la ventana y en medio de la oscuridad, alumbrándonos con lo que podíamos, veíamos flotar dentro de la misma casa, la heladera, los colchones, los muebles, la ropa, todo. Sólo podíamos rezar y pedirle a Dios que pare la lluvia. Llega un momento en que nada de lo material te importa, sólo miras a tus hijos y comienzas a rogar por sus vidas", dijo en su estremecedor relato.
Los vecinos se preguntan hasta cuándo van a soportar esta situación, "le pedimos al intendente Julio Bravo que venga y brinde una solución definitiva, él sabe bien lo que pasamos en cada temporal, esto a lo que llaman desage, sólo provoca desastres y daños, tienen que enviar el agua hacia las plantaciones por la avenida del Trabajo, no pueden dejarnos solos, son nuestras autoridades, deben hacer algo urgente", dijo una madre que sufrió las peores peripecias cuando el agua inundó su casa ubicada en la esquina de Marinero Sancho y avenida Zafrero de barrio Patricios, donde el agua bajó con furia arrasando todo, dejando las viviendas en medio de dos brazos provocando la entrada de agua a las mismas por ambas calles.