¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

26°
1 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Un terrible accidente le cambió la vida, pero no le impidió superarse y triunfar

Martín Facetti es un joven profesor en Educación Especial. A los 7 años se cayó de una altura de 15 metros y volvió a nacer. Actualmente brinda talleres sobre discapacidad intentando concientizar e informar a la población para promover la inclusión y eliminar la exclusión.
Jueves, 22 de marzo de 2018 20:37

A pesar de que el accidente que sufrió cuando era pequeño le dejó secuelas, Martín arribó a nuestro matutino muy gentilmente para desarrollar la entrevista. Él, al igual que todas las personas que poseen una discapacidad pretenden generar un cambio en la sociedad con respecto a la forma en que se los trata, por ello prefieren manejarse de forma independiente y no quedarse en sus casas. Prefieren derribar barreras y no dejar que una discapacidad se lo impida. Por esta razón, es importante que las personas que no poseen una discapacidad se informen, tomen conciencia y sean más solidarios con ellos a fin de que el caudal de la inclusión sea cada vez mayor.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

A pesar de que el accidente que sufrió cuando era pequeño le dejó secuelas, Martín arribó a nuestro matutino muy gentilmente para desarrollar la entrevista. Él, al igual que todas las personas que poseen una discapacidad pretenden generar un cambio en la sociedad con respecto a la forma en que se los trata, por ello prefieren manejarse de forma independiente y no quedarse en sus casas. Prefieren derribar barreras y no dejar que una discapacidad se lo impida. Por esta razón, es importante que las personas que no poseen una discapacidad se informen, tomen conciencia y sean más solidarios con ellos a fin de que el caudal de la inclusión sea cada vez mayor.

Martín Facetti tiene 29 años y siente que su vida se desarrolló en dos tiempos. El primero arrancó cuando nació y se desarrolló en algunos años de su infancia. De esos momentos lo que más recuerda es aquello que podía hacer todos los días como ver el pizarrón en la escuela, observar las letras de los libros que leía, moverse por una cancha cuando jugaba al fútbol con sus amigos, entre otras vivencias.

Esas cosas de la vida que solo Dios sabe porque las pone en el camino, hicieron que ese primer tiempo termine en diciembre del año 1995 cuando un accidente lo dejó en grave estado. Era un niño de 7 años en ese entonces y cayó desde el primer piso de su departamento, lugar donde sigue viviendo actualmente. El hecho ocurrió en la esquina de las calles Belgrano y Necochea, en pleno casco céntrico.

Desde ese momento su vida cambió y la recuperación fue muy larga pero gracias al empuje y amor propio que siempre tuvo logró salir adelante. Muy importante también fue el acompañamiento de su familia en todo momento que al igual que los especialistas que lo trataron nunca le soltaron la mano. Su rehabilitación fue en Appace durante mucho tiempo y para seguir cursando sus estudios primarios debió estar acompañado de docentes de apoyo pedagógico. 

"Hay muchas capacidades que no puedo desempeñar hoy en día por las secuelas que me quedaron de ese accidente. Del ojo derecho no puedo ver nada y en el izquierdo tengo una diminución visual. También tengo una parálisis cerebral del lado izquierdo de mi cuerpo, pero agradezco que estoy vivo, que logré recibirme y hoy puedo trabajar", mencionó el muchacho, en diálogo con El Tribuno de Jujuy.

Después de ese terrible episodio empezó a jugarse en su vida lo que él llama el segundo tiempo. Esta nueva oportunidad llegó con muchas dificultades que fue tratando de superar en todo momento. Lo que más le costó fue la parte visual, "me desesperaba no poder leer los libros ni las fotocopias que me daban en la escuela, fueron muchos años de lucha, no me podía adaptar a eso", remarcó. Pese a eso logró terminar sus estudios primarios y secundarios en el Colegio Sánta Bárbara.

En el año 2007 salió del secundario y de inmediato ingresó al Populorum a estudiar el profesorado de Educación Especial. 

Se recibió de Profesor en Educación Especial en febrero del 2014 y al poco tiempo ingresó a trabajar en el Ministerio de Desarrollo Humano. Primero se desempeño en la parte administrativa y luego pasó a lo suyo, es decir a la docencia. 

Al tiempo ingresó dentro del área de Inclusión Laboral de personas con discapacidad, un sector que tiene dos años de vigencia. Desde ahí, empezó a dictar talleres en toda la provincia.

Su vida tuvo una grata sorpresa cuando en el 2016  adquirió un aparato llamado "modificador de imagen portátil" cuya función es aumentar el tamaño de imágenes o letras. Artefacto que lo ayuda a la hora de leer y lo lleva a todas partes.

No son discapacitados, son personas con discapacidad

Dentro de los talleres que Martín brinda a la sociedad incluye el concepto de discapacidad, como fue evolucionando, como se clasifica, etc. El objetivo de los mismos que se desarrollan en diferentes localidades de Jujuy es sensibilizar, capacitar, concientizar e informar a su público sobre este tema.

"Ya no existe el termino discapacitado, ahora debe decirse personas con discapacidad. Ya que todos los que se encuentran en esa situación también son personas como cualquier otra que posee derechos", mencionó

Desde ese concepto, nos explicó cuál es la clasificación de las discapacidades: sensorial, física, mental, intelectual y visceral. Sensorial (aquellos que no escuchan o no ven, o lo hacen parcialmente); física es la que afecta al movimiento; mental tiene que ver con lo psicológico como la esquizofrenia por ejemplo; intelectual se relaciona la dificultad en el aprendizaje y visceral se refiere a los que recibieron un trasplante de órgano.

En sus talleres también suele hacer hincapié en la importancia que tiene la inclusión en las personas con discapacidad y alienta a todos los que poseen una a salir adelante y superarse. 

"Es feo ver que en el presente todavía sigue habiendo casos de personas que maltratan en sus hogares, hay situaciones que la familia no acepta una discapacidad y por eso los excluye. Hay que dejar de tener esa resistencia a las personas con discapacidad y todos tenemos que salir a pelearla. A mí un aparato me cambio la vida, hay muchas otras herramientas para cada tipo de discapacidad, cada familia puede salir y buscar esas herramientas para buscar mejorar la calidad de vida para uno mismo y del que la posee", comentó Martín Facetti.