Con una incertidumbre desde el punto de vista macroeconómico pero con cifradas esperanzas en lo productivo, el Ingenio Río Grande de La Mendieta dejó inaugurada oficialmente ayer la zafra 2018. Un total de 700 familias dependen de esta fuente de trabajo, que en época de molienda moviliza a todo el departamento San Pedro y a la provincia toda. Son importantes las inversiones realizadas por la empresa, que una vez más apuesta a largo plazo, mirando siempre al futuro, mejorando su rendimiento y productividad.
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Con una incertidumbre desde el punto de vista macroeconómico pero con cifradas esperanzas en lo productivo, el Ingenio Río Grande de La Mendieta dejó inaugurada oficialmente ayer la zafra 2018. Un total de 700 familias dependen de esta fuente de trabajo, que en época de molienda moviliza a todo el departamento San Pedro y a la provincia toda. Son importantes las inversiones realizadas por la empresa, que una vez más apuesta a largo plazo, mirando siempre al futuro, mejorando su rendimiento y productividad.
El ingenio cuenta con 6 mil has, 5.400 aptas para caña de azúcar. Con las de cañeros independiente se llegan a las 10 mil has en total.
Como ya es tradicional, un oficio religioso a cargo del padre Abel Vitaluz marcó el inicio, participando de la ceremonia el gobernador Gerardo Morales, el presidente de la empresa Hugo Jorge y el administrador Ricardo Sánchez Riera, entre otras autoridades. Sánchez Riera destacó el carácter simbólico, económico y emocional que tiene para la localidad y la provincia esta nueva zafra, afirmando que la empresa lleva 129 zafras y que espera que tenga otras tantas por delante. "Este año hemos priorizado las inversiones en campo, en razón de asegurar la materia prima, un hecho fundamental en un ingenio, porque sin ella no hay zafra. Y el hecho de crecer en el abastecimiento de la materia prima, propia, nos da la seguridad de que vamos a seguir adelante en la producción. Logramos el aprovechamiento de otras tierras que necesitamos y las adaptamos para el cultivo de la caña. Otra proyección importante tiene que ver con la utilización del riego por goteo en áreas donde la productividad es menor de manera de poder crecer en la productividad por hectárea", expresó también.
Acotó que con las hectáreas propias, el aporte de los cañeros independientes y un clima benigno, se podrán alcanzar las 90.000 toneladas de azúcar".
Por su parte Jorge apuntó que la zafra "es un acto de fe" que emprenden para lograr los objetivos fijados. "Hay aspectos que dependen de condiciones mercados o de decisiones de gobierno. El sector se ve afectado por el cambio de la fórmula para la determinación del precio del bioetanol, que se mantiene desde noviembre. Hubo una pérdida de transferencia de ingresos desde el sector azucarero y alcoholero hacia el sector petrolero, de una cifra muy importante. El sector productor de combustible fósil se ve favorecido con un régimen de libertad y de creciente aumento de precio", afirmó.
TRABAJADORES. UNAS SETECIENTAS FAMILIAS DEPENDEN DEL INGENIO MENDIETEÑO, QUE ESPERA PRODUCIR 90 MIL TN DE AZUCAR.
En cuanto al tipo de cambio consideró que es mucho más favorable para el sector exportador en la medida que no se traslade a los costos. "ahora tenemos un precio de 18 pesos (por litro de bioetanol) que rige para junio, el que es considerado insuficiente por el sector si se tiene en cuenta el precio de las naftas", finalizó diciendo.
Asimismo, el gobernador Morales renovó su compromiso de seguir luchando por el precio del bioetanol, por las condiciones de productividad de las economías regionales. "Más allá de nuestras pertenencias partidarias, es una lucha que hay que dar para defender las economías regionales, gobierne quien gobierne. También sabiendo que los planteos que estamos haciendo son escuchados, pero esperamos concretar para cuidar nuestras producciones y así generar trabajo en Jujuy", concluyó