La Fiesta de los Estudiantes 2018 comenzó a vivirse a pleno. Es que los alumnos de distintos colegios de la provincia participaron ayer del primer Sábado Estudiantil, jornada en la que la alegría y el entusiasmo de los jóvenes coparon el estadio "23 de Agosto", haciendo de este tradicional evento una verdadera fiesta.
inicia sesión o regístrate.
La Fiesta de los Estudiantes 2018 comenzó a vivirse a pleno. Es que los alumnos de distintos colegios de la provincia participaron ayer del primer Sábado Estudiantil, jornada en la que la alegría y el entusiasmo de los jóvenes coparon el estadio "23 de Agosto", haciendo de este tradicional evento una verdadera fiesta.
Como cada año, los chicos se prepararon con varias semanas de anticipación para lucirse y "dejar todo en la cancha". Y es que cada vez los colegios se involucran más en esta sana competencia, en la que prima el trabajo coordinado y en equipo y con el que se comienza a palpitar la "Fiesta Linda".
Desde temprano, cada uno de los 33 colegios participantes dispuso todo para dar inicio al encuentro.
Con el cielo descubierto y el sol que comenzaba a entibiar la tarde inició el concurso de videoclip.
Con divertidos atuendos, peinados llamativos y hasta maquillados con vivos colores, los chicos presentaron las coreografías de baile ante el jurado que evaluó cada cuadro.
En cada pasaje, se vio la destreza y creatividad de los jóvenes, quienes disfrutaron junto a sus compañeros de la música, el ritmo y de cada una
de las instancias propuestas.
Fuerza en las hinchadas
Más tarde, se continuó con el concurso de hinchadas. Con cánticos, papel picado y banderas de colores, cada alumno alentó a su colegio, incluso algunos sumaron bombos, redoblantes y hasta trompetas, que le dieron más fuerza a la hinchada.
El gran atractivo de la tarde fueron las mascotas que representaron a cada colegio y las que finalmente animaron la jornada. Bailaron, corrieron por toda la cancha y fueron furor para dar el marco a las selfies.
Para el cierre, como cada año, se presentaron las enormes "napolitanas" que fueron despedazadas en medio de cada una de las hinchadas como una verdadera manifestación de euforia y alegría.