Desde que la selección peruana consiguió la histórica clasificación para el Mundial, esta competición se convirtió casi en el único tema de charla entre los aficionados al fútbol del país. Volver a disputar una Copa del Mundo por primera vez después de 36 años bien justifica tanta expectativa.
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Desde que la selección peruana consiguió la histórica clasificación para el Mundial, esta competición se convirtió casi en el único tema de charla entre los aficionados al fútbol del país. Volver a disputar una Copa del Mundo por primera vez después de 36 años bien justifica tanta expectativa.
Sin embargo, en las últimas horas ha ocurrido un incidente que ha obligado a todos los aficionados peruanos a poner el foco en el torneo local. Se trata, según se han justificado sus protagonistas, de una broma pesada. Pero el repudio y la indignación de la afición puede terminar con tres futbolistas expulsados del club.
Y es que Ricardo Luna, utillero del Sport Boys, es toda una institución dentro del equipo que acaba de conseguir el ascenso a Primera. A los 82 años, Agüita (como se le apoda) lleva 67 como utillero del plantel profesional. Y su fanatismo por el club lo convirtió en un ícono para jugadores, dirigentes e hinchas.
Sin embargo, parece que algunos futbolistas no lo ven de esa manera. Y la prueba es la “broma” que le hicieron tres jugadores: Joazinho Arroé, Manuel Contreras y otro futbolista que todavía no ha sido identificado. Entre risas, como si se tratara de una travesura, los tres jugadores desnudaron y humillaron al anciano en pleno vestuario local.
Y eso no fue todo, ya que unas horas después, subieron las imágenes a la cuenta de Instagram de Arroé. El vídeo en cuestión, de apenas unos segundos, se viralizó rápidamente. Y aunque el mediocampista lo borró, ya era demasiado tarde: miles de personas ya habían visto a Agüita desnudo, llorando e implorando que lo dejaran en paz.
Richi Luna, el hijo de Agüita, fue uno de los primeros en estallar. Y también utilizó las redes sociales para hacer público su enojo. “Le faltaron el respeto a mi padre. Le tomaron fotos privadas. Lo mostraron llorando, tirado en el piso, rogándoles que no lo hicieran”, escribió. Y agregó: “Me la van a pagar”.
Horrorizados por la situación, miles de hinchas empezaron a pedir sanciones para los tres jugadores. Y los propios dirigentes de Sport Boys se hicieron cargo del asunto, han abierto un expediente y evalúan la posibilidad de expulsarlos del club.
Es tan grande el escándalo que el mismo Arroé borró todo y pidió disculpas a través de su cuenta de Facebook y argumentó que todo se trató de una “broma con la intención de que se conozca lo que apreciamos a Agüita, que es un símbolo del club”.
Y hasta el mismo utilero le quiso poner paños fríos a la situación. “Sobre la broma, ya está todo disculpado. Quedó atrás. Ahora lo único que importa es que todos ustedes apoyen al Sport Boys, que no haya amenazas”, pidió.