TILCARA (corresponsal) Ya sea con las marcadas y las señaladas del ganado, ya sea con los Jueves de Ahijaditos, Compadres y Comadres, que se van sucediendo hasta el Desentierro del Carnaval, y con las fiestas que suceden al Entierro, como las de las Flores y el Remache, la celebración de las cosechas, en agradecimiento de todo aquello que nos da la tierra florecida, ocupa la larga extensión del verano.
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TILCARA (corresponsal) Ya sea con las marcadas y las señaladas del ganado, ya sea con los Jueves de Ahijaditos, Compadres y Comadres, que se van sucediendo hasta el Desentierro del Carnaval, y con las fiestas que suceden al Entierro, como las de las Flores y el Remache, la celebración de las cosechas, en agradecimiento de todo aquello que nos da la tierra florecida, ocupa la larga extensión del verano.
Ahijaditos es la primera, cuando se enfloran los mojones y empiezan a escucharse por las calles las bandas de metales con su son alegre. Sin diablitos aún, que saldrán el Sábado de Carnaval Grande, sin los disfrazados que incitan al baile, se comienza a pedir permiso a la Pachamama para que acompañe los festejos, nacen las invitaciones y empieza a sentirse el perfume de la albahaca.
Aquí, los padrinos invitan a sus ahijados, cuando en los próximos jueves los agasajados serán los compadres y las comadres, pero la esencia es que la tierra, ya regada por las lluvias, dio su fruto, y por ello las chacras son la bandera que simboliza la fertilidad entre las piedras del mojón. Si hay algo que agradecer en esta tierra, es justamente la gentileza con que el suelo nos alimenta, y es algo de lo que nuestra cultura entiende bien.