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26 de Abril,  Jujuy, Argentina
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"Mi Desentierro es un ciclo de mi vida"

El poeta presentará su primer libro, "Mi desentierro", con un profundo sentido de la espiritualidad que comparte y admira de los pueblos andinos. Será mañana a las 21 en el Centro Cultural "Héctor Tizón".
Viernes, 15 de febrero de 2019 01:04

¿Escribís sólo poesía o también otros géneros?

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¿Escribís sólo poesía o también otros géneros?

Ahora escribo poesía, primero escribía coplas. En medio de mis viajes (por toda la provincia por su trabajo), escuchaba las coplas y me enamoraban.

¿Cómo comienza todo?

El tema de la copla a mí me llega a través de mi abuela. Ella tenía una piernita mal porque había tenido poliomielitis. Se casó a los 16, cuando la entregaron a mi abuelo que tenía 41, por lo tanto era una nena que tuvo que madurar demasiado rápido y sobre todo en esa época. Un día la vi salir de una habitación de su casa, donde había hecho una picanteada con mucha gente, con su caja. Comenzó a cantar y empezó a "torear" a todos los hombres de la ronda. Eso me quedó grabado, y todo se alimenta luego con mi cercanía con (José María) el "Kollita" Mercado. Yo lo conocí a los 12 años, cuando mi mamá (la cantora Adela Guerrero) lo lleva a la casa, él no cantaba las coplas, pero las recitaba.

¿Cómo llegas a este libro, teniendo en cuenta no sólo que sos un amante del arte, la cultura y las tradiciones, sino también un profesional de la política y la gestión cultural? O sea teniendo la mirada de ser parte, y la mirada del académico...

Después de conocer la copla, empecé a dar vueltas por la puna con amigos, trabajando, y a conocer gente. La parte académica me servía para tener esa mirada de la cultura, pero la parte artística me llevaba a ser parte. Yo quería participar, necesitaba vivirlo para poder escribirlo.

La relación con la música viene a través de mi mamá, yo sentí música por todos lados, y un día, ya en mi adultez, caminando por ahí, comencé a decir algo y me salió una copla, y seguí escribiendo.

En mi libro yo escribo en primera persona, como si fuera un coya, y yo no lo soy pero estoy metido ahí. Yo siento que formo parte porque los admiro, admiro cómo son, su idiosincrasia, el sistema de relaciones que tienen, su mirada de lo espiritual sin que lo sepan. Cuando me metí, y después de admirarlos, empecé a formar parte.

Llegué a comprarme mi caja, y como tenía un temita con la coordinación para tocar y cantar, cuando lo logré pude subir a una escenario y coplear. Pero a pesar de haber tenido esa experiencia, yo siento que no soy para cantar, me atrae más escribir, o ponerla en música aunque no toco ningún instrumento.

Por eso comencé a escribir en estrofas que riman. Uso esa métrica porque es como me siento cómodo. Se fueron uniendo coplas y quedó una poesía, se sumaron un par de coplas más y quedó un bailecito.

Tu relación con el arte es como observador, bohemio, desde afuera, pe ro no tanto, ¿cómo lograste llegar a transmitirlo en versos?

La otra parte de mi experiencia en los viajes, fue meterme y bailar, yo escribí un bailecito y una zamba y sabía cómo tenía que ser porque la bailaba. De golpe tenía la idea de la letra y del baile, y mi relación con el arte comenzó así. José Simón (folclorista humahuaqueño que grabó algunos de sus temas) empezó a componer sobre una letra que tenía suelta, y me insta a que siga escribiendo yo. La gente que la leía, me decía "está fantástico, seguí", y durante un tiempo largo, yo seguí y comencé a tener un volumen importante de poesías, de letras, que todo el mundo empezó a decirme que ya había que publicar. Comencé a hablar con Adrián Témer (poeta, escritor, compositor) y Pachi Alderete (compositor), que me animaron a hacerlo.

Yo no me la creía, y tampoco me la creo, pero sé qué es lo que quiero decir y lo que digo.

¿Te quedan cosas pendientes para publicar?

No. Sigo escribiendo pero con este libro no me quedó nada pendiente. Es como lo que vos me decías recién, que yo soy un observador, que me fui metiendo, intrincándome en lo que es la cultura, la comencé a vivir, y la viví mucho, y a partir de ahí lo tomé como un ciclo de mi vida. Lo que yo hago con el libro es mostrarme. Ahora, yo me podía mostrar y ponerle otro título, pero decido ponerle "Mi desentierro" porque en realidad quería decir "este soy yo, esto es lo que yo pienso, y esta es mi perspectiva, no es la verdad, sino lo que yo creo". Le pongo este título porque hago un paralelismo de mi libro con las fiestas agro-festivas andinas, el ciclo. Entonces para mí, es mi desentierro porque coincide con la época de cosecha, que es lo que estoy haciendo ahora. Este fin es el principio de otro ciclo para mí. Ahora se desentierra este conjunto, yo me entrego directamente ahí. Y como siempre estuve de afuera, ahora me subo arriba de un escenario y me pongo a decir lo que escribo, a contarlo.

¿Cómo será la presentación?

Va a ser integral. Coloqué todas las cosas que yo viví y a partir de eso hice un guión para que todo sea una secuencia en tres actos, en los que van a ir sucediendo cosas, en base al libro. Es una puesta en escena, con actuación, música, coplas, etc.

Van a haber detalles de protocolo de Carnaval, aunque no es carnaval, porque esto es el desentierro y el tiempo de la abundancia del mundo andino. No quiero que sea Carnaval porque no es tiempo. Cada cosa en el mundo andino tiene su tiempo. Lo que sí siento es que es el tiempo de "mi" desentierro.

Quiero que la gente vaya entrando para ir haciéndoles vivir una experiencia, así como el viaje que yo hice, que lo voy a matizar con el arte.

El espíritu que queremos plantear en esta presentación es el que tiene una familia que ha decidido hacer una invitación de carnaval, con la idea de cobijar a los invitados, recibirlos. En medio de todo esto, cuando uno recibe a la gente, hace que se sientan cómodos como en su casa.

Decís que estás cerrando un ciclo con este libro y comenzando otro. ¿Qué supones que va a pasar con el próximo ciclo tuyo?

No lo sé. Ya comencé a transitarlo. Mi intención es volver a viajar.

Voy a retomar la idea de trabajar en proyectos culturales. Armé uno que se llama "Programa Choquevilca" que se va a dedicar a proyectos creativos e innovadores de alto impacto.

El autor

Raúl Salaverón es nacido en Capital Federal y criado en San Salvador de Jujuy. Hijo de la cantante Adela Guerrero de quien hereda el amor por la poesía y la música. 
Es diplomado en Políticas Culturales y Gestión Cultural, y se especializa en proyectos Artísticos y en Patrimonio Intangible, esto lo lleva a viajar y relacionarse a través de distintos proyectos, con personas de las 4 regiones Jujeñas, además de Bolivia y Perú, siendo Asesor de Instituto de Ciencia y Tecnología Regional (Icter). Y se enamora profundamente de la Puna Jujeña donde comienza a descubrir la Cosmovisión del Mundo Andino.
El prólogo del libro se lo hace el compositor Pachi Alderete, y la contratapa contiene un texto de otro gran creador jujeño, Adrián Témer, quienes lo describen y describen el sentido de sub obra, con total sentimiento y profundidad.

Sobre la presentación y el libro

La presentación está planteada de una forma muy especial, que contará con la participación del actor Rubén Fleita; dos copleros de Tilcara, Walter Apaza y Chacho Gallardo (presidente de la comparsa Los Caprichosos); la coplera Miriam Cabana; el folclorista José Simón que va a cantar dos canciones inéditas de autoría de Raúl Salaverón; y los músicos Javier Soria y Luis Escalera, entre otros. Será mañana a las 21, en el Centro Cultural “Héctor Tizón” (Hipólito Yrigoyen esquina Junín).
“Mi Desentierro” es un libro de poesías publicadas en orden cronológico, las poesías están reunidas de acuerdo a cada experiencia y las antecede una copla, idea o pensamiento. Página a página el lector va adentrándose en la vida del autor, quien muestra a través de sus escritos, un ciclo de su vida, siendo el libro la concreción de su propio desentierro, su abundancia, y su alegría. En este libro el autor vislumbra también su inclinación por la música.