Un joven de 22 años murió ahogado en un pozo de agua que se formó a causa de las inclemencias climáticas en un tramo del río Los Alisos, cerca del sector de las 47 Hectáreas del barrio Alto Comedero.
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Un joven de 22 años murió ahogado en un pozo de agua que se formó a causa de las inclemencias climáticas en un tramo del río Los Alisos, cerca del sector de las 47 Hectáreas del barrio Alto Comedero.
Los efectivos de la Seccional 63º de las 18 Hectáreas fueron alertados el viernes pasado en horas de la tarde, por un grupo de jóvenes, que uno de sus amigos se había sumergido cerca del río y no podían hallarlo.
De inmediato los efectivos llegaron al lugar indicado, que era un profundo pozo de agua que se había formado en los últimos días a raíz de las intensas lluvias que azotan a nuestra provincia, donde los jóvenes jugaban y se bañaban.
Según las declaraciones de los testigos, el joven se lanzó y quedó sumergido en las turbias aguas y pese a los intentos de sus amigos en tratar de dar con él, fue en vano.
La víctima fatal fue identificada como Pablo Javier González (22), con domicilio en las 47 Hectáreas de Alto Comedero.
Minutos después los efectivos lograron rescatar el cuerpo del joven y le realizaron de inmediato tareas de reanimación, pero el joven carecía de signos vitales.
Luego llegaron los efectivos del Cuerpo de Bomberos y personal del Same, donde también intentaron tareas de reanimación para el joven que permaneció mucho tiempo sumergido.
El ayudante fiscal de la zona de Alto Comedero Leonardo Zazzali dispuso que el cuerpo fuera depositado en la morgue del Poder Judicial, ubicado en el mismo sector barrial, mientras que el médico del Same diagnosticó que las causas del deceso fueron por asfixia por sumersión.
Los vecinos del lugar se mostraron preocupados por el profundo pozo que se formó cerca de ese sector, teniendo en cuenta que hay muchos niños que juegan por las inmediaciones y reclamaron para que se tomen cartas en el asunto.
Las actuaciones sumarias quedaron a cargo de los efectivos de la Seccional 63º de las 18 Hectáreas y sus efectivos fueron los que intentaron por todos los medios salvar la vida del joven de 22 años.