Sin dudas que muchos de los afiliados partidarios siguen sorprendidos por la gran elección que realizó el Partido Justicialista el domingo, ya que se recuperó intendencias, diputados, concejales y comisiones municipales, demostrando que hubo organización puertas adentro.
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Sin dudas que muchos de los afiliados partidarios siguen sorprendidos por la gran elección que realizó el Partido Justicialista el domingo, ya que se recuperó intendencias, diputados, concejales y comisiones municipales, demostrando que hubo organización puertas adentro.
El trabajo fuerte deberá realizarse a partir de ahora, y con los resultados sobre la mesa, puesto que hubo muchos ganadores y perdedores dentro del espacio peronista en estas elecciones. Lo que se debe destacar es la gran renovación que hubo y la jugada de muchas figuras nuevas en importantes puestos.
El Partido Justicialista parece haber alejado definitivamente las grandes figuras que ocuparon los principales cargos hasta 2015, ya que en las listas hubo muy pocos nombres que se repetían y muchos otros desconocidos para la sociedad, siendo un punto clave para lograr reafirmar esta recuperación de votos.
La apuesta empieza a partir de ahora, puesto que es necesario que estos nombres nuevos que lograron grandes resultados empiecen a tener una participación más activa en la toma de decisiones y que sean influyentes en la denominada mesas chicas que tienen los diferentes partidos políticos.
Después de muchas derrotas y de repetir nombres y errores, el peronismo apostó a dejar atrás varios referentes históricos, que incluso significó el quiebre días antes del cierre de listas y la posterior derrota del espacio, obteniendo buenos resultados con los populares “segundas y terceras líneas”, siendo siempre los relegados por los apellidos tradicionales.
Hoy el PJ debe seguir este camino que arrancó antes del domingo pero que se ratificó en ese día, ya que la sangría, por el momento, se logró detener y muchos incognitos quedaron definitivamente instalados en el mapa político del partido y de la sociedad.
Por otro lado, muchos apellidos tradicionales y del pasado que siempre se ufanaron que eran los que arrastraban los votos, demostraron que el Partido Justicialista es invencible cuando no se está adentro y que los “olvidados y relegados” no necesitaron de ellos para, incluso, superarlos en casi toda la provincia en las diferentes categorías.
Las reuniones en el sector peronista ya empezaron, donde los nombres van y vienen, buscando lo mejor de cara a agosto y octubre, pero lo que sin dudas no se debe hacer es dejar este prometedor presente y volver atrás.