Esta noche a las 20 vuelve "El Nombre" a las tablas de manera presencial. Es el unipersonal que lleva adelante la actriz Patricia Lubel desde hace más de veinte años, y que en esta oportunidad se abre camino en la sala "Raúl Galán" del Teatro Mitre (en los altos del coliseo).
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Esta noche a las 20 vuelve "El Nombre" a las tablas de manera presencial. Es el unipersonal que lleva adelante la actriz Patricia Lubel desde hace más de veinte años, y que en esta oportunidad se abre camino en la sala "Raúl Galán" del Teatro Mitre (en los altos del coliseo).
La obra es de Griselda Gambaro, y es un clásico en la carrera de Lubel.
El espectáculo unipersonal conmueve a través de los relatos y vivencias de una mujer sentada en una silla, con la dura realidad vivida por cientos de mujeres quienes padecen el desprecio y la invisibilización.
Las entradas son gratuitas y limitadas por las recomendaciones de bioseguridad y los protocolos vigentes para los espectáculos presenciales. Pueden ingresar hasta 31 personas que deben adquirir sus entradas en el sitio web de la Secretaría de Cultura de Jujuy, www.cultura.gob.jujuy.ar.
"El regreso a las tablas después de este confinamiento es una emoción muy grande. Surgió a partir de la convocatoria que hizo el teatro. Quería actuar de nuevo. La última obra que hice antes del confinamiento fue "El Nombre" y es la joyita en la que me siento más cómoda, y que incluso el público me sigue pidiendo", dice la actriz consultada por El Tribuno de Jujuy por este regreso.
Le preguntamos por la evolución de la obra a lo largo de todo el tiempo que lleva desde que la estrenó, y la evolución en ella como actriz. "Este año particularmente uno de los temas que trata el Nombre se ha desarrollado de otra manera en mí, entonces el espectáculo ha cobrado otro sentido. Es un espectáculo que está vivo, que siempre tiene cosas nuevas para decirme a mí y al público", asegura.
"En este tiempo de pandemia, las personas que nos cuidan como "María" (personaje de la obra de Gambaro), que siempre cuida a los demás, han cobrado una importancia diferente. Entonces en esta "María", que nadie sabía su nombre, es también como un homenaje a todo ese personal de salud que no conocemos, que nos cuida en medio de esta pandemia, y que a veces la sociedad maltrata mucho", expresa. "Este año se han hecho homenajes, pero todos sabemos que ellos siguen reclamando y exigiendo lo que les corresponde, hablando de condiciones de trabajo, sueldos, y de seguridad. Y este es mi pequeño homenaje a ese personal", asegura. "Ha sido un año muy difícil para todos. Volver a pisar el escenario es una pequeña luz de esperanza para los que hacemos teatro y para el público. Van a poder disfrutar de nuevo un espectáculo en vivo", comenta.
Sobre su relación con el personaje, dice que "este año "María" está mucho más madura, y las cosas que me pasan a mí también le pasan a mis personajes. En los ensayos ya lo veo, pero en la función lo voy a palpar con mayor nitidez. Estas vivencias no pasan en vano, se anidan en la piel, en las sensaciones, en las emociones. Así que yo también me voy a dejar sorprender con lo que vaya pasando con la función", aseguró.
"Es una obra que es inmensa, por todo lo que guarda", concluye muy emocionada, y cuenta que en la asistencia técnica de esta puesta se encuentran Federico y Casandra Balderacchi.