Una agente de la policía fue atropellada en un control policial que se llevaba a cabo en la intersección de las calles Juana Manuela Gorriti y avenida Párroco Marshke el pasado domingo por un automovilista que se dio a la fuga en virtud de encontrarse en estado de ebriedad.
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Una agente de la policía fue atropellada en un control policial que se llevaba a cabo en la intersección de las calles Juana Manuela Gorriti y avenida Párroco Marshke el pasado domingo por un automovilista que se dio a la fuga en virtud de encontrarse en estado de ebriedad.
El hecho se habría concretado alrededor de las 5.30 de la mañana y el protagonista de 34 años conducía un automóvil Ford Focus por la calle Juana M. Gorriti en estado de ebriedad, razón por la cual en un momento dado y sin que nada previera la reacción del automovilista, este aceleró su rodado golpeando con el paragolpes la pierna izquierda de la agente perteneciente a Seguridad Vial que se encontraban en el lugar realizando el correspondiente control vehicular, tendiente a erradicar la presencia de conductores ebrios que ponen en riesgo la vida de automovilistas, peatones y la propia.
El hombre que atropelló a la policía tiró algunos de los conos de señalización y se fugó por calle Gorriti en dirección al sur hasta su domicilio en 25 de Mayo al 100 donde descendió de automóvil con intención de ingresar al inmueble, oportunidad que los uniformados aprovecharon para reducirlo y en un móvil trasladarlo a la seccional 6º.
Ataque a policías
En momentos en que el personal policial procedía al secuestro del rodado, del interior de la vivienda salieron los familiares del conductor quienes agredieron a pedradas a los efectivos y un hombre mayor de edad tomaba a golpe de puño a los hombres de la fuerza, razón por la cual también debió ser reducido.
Trasladado a la sede policial donde ya se encontraba el hijo, que al realizarle el control de alcohotest el mismo arrojó 2,04 g/l, razón por la cual se le realizó la correspondiente acta de alcoholemia, quedando demorado a disposición del ayudante de fiscal como consecuencia de las otras infracciones cometidas, entre ellas desacato y agresión a la autoridad.
En la mencionada seccional se estableció que el violento agresor detenido en la puerta del inmueble se trataba de una persona de 63 años y padre del conductor ebrio, quien también fue demorado por averiguación de antecedentes habiendo dando el control de alcoholemia realizado en el lugar 0/00 g/l.
Por disposición de la Justicia la policía procedió al secuestro del rodado.