Un hecho, que despertó indignación entre los vecinos de una reconocida como querida familia del barrio Coronel Arias, se produjo el pasado fin de semana cuando un adolescente de 17 años le provocó varias heridas en las piernas a su pareja de la misma edad y se retiró del domicilio con el bebé de ambos de solo un año y dos meses.
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Un hecho, que despertó indignación entre los vecinos de una reconocida como querida familia del barrio Coronel Arias, se produjo el pasado fin de semana cuando un adolescente de 17 años le provocó varias heridas en las piernas a su pareja de la misma edad y se retiró del domicilio con el bebé de ambos de solo un año y dos meses.
Fuentes cercanas a la investigación dan cuenta que el agresor se habría ausentado de la ciudad de San Salvador de Jujuy.
Al cierre de la presente edición se desconoce el paradero del violento agresor quien consciente de la gravedad de lo sucedido se habría dirigido al interior de la provincia en busca de refugio en la casa de algún pariente
Esta situación provocó la angustia de la joven quien con sus piernas sangrando pidió ayuda a los vecinos que concurrieron en su auxilio en virtud de que la víctima al momento del ataque se encontraba sola en el inmueble donde vive con los padres.
Esta situación de violencia de género provocó una gran conmoción entre los habitantes del lugar, quienes al ser entrevistados por El Tribuno de Jujuy afirmaron que ellos vieron crecer a la adolescente y que se trata de una excelente persona, que se dedica de lleno a su pequeña criatura, quien además cuenta con todo el apoyo y contención de sus padres, que están pendientes de la pareja y del nieto.
Pedido de ayuda
Los solidarios vecinos dieron parte a la policía y solicitaron una ambulancia del Same que se hizo cargo de la adolescente herida, a quien trasladó a un centro asistencial a los efectos de que sea atendida de las lesiones que le provocó su pareja. Familiares y amigos se abocaron a ubicar a los progenitores de la víctima mientras que la desconsolada madre clamaba por recuperar a su hijo.
La denuncia fue radicada en la Brigada de Investigaciones del mismo barrio una vez que la víctima recibió las curaciones en las heridas y de inmediato se activó el protocolo correspondiente, tendiendo a dar con el paradero de joven y el bebé ya que se temía lo peor en virtud de haberse ausentado del inmueble "en un estado de furia", de acuerdo a los dichos de la joven.
En su exposición la víctima habría brindado a los investigadores algunas señales y datos de donde podía encontrarse el agresor, pero un llamado telefónico trajo tranquilidad a la familia y a los vecinos, ya que el mismo refería que el bebé se encontraba en la casa de la abuela paterna, quien habría referido que el mismo se encontraba en buen estado de salud y que sería reintegrado de inmediato, desconociendo lo que había sucedido entre su hijo y su pareja.
La mujer entregó el pequeño a su madre y manifestó que su hijo había llegado a la casa diciendo que dejaría por unos minutos al bebé y luego pasaría a buscarlo.
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