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Proteger la mente de los niños con anticipación

Domingo, 16 de febrero de 2020 01:01

Por RICARDO LUIS LORENZETTI JUEZ DE LA CORTE SUPREMA

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Por RICARDO LUIS LORENZETTI JUEZ DE LA CORTE SUPREMA

La letra de la canción "Inconsciente colectivo" de Charly García contrapone la libertad con el "transformador que se consume lo mejor que tenés". Lo que "consume lo mejor que tenés" es un mecanismo que hoy asume formas impensadas, que ponen en riesgo la capacidad del ser humano de decidir libremente.

Existen grandes temas que se discuten en nuestros tiempos, que, por ser extremadamente complejos, no se conocen, pero tienen una relevancia cotidiana que merece que se difundan entre los ciudadanos.

Hay mucha información que le llega al cerebro durante el día y la noche (páginas web, celular, Facebook, Instagram, etc.) y comienza a actuar automáticamente.

El exceso es más fácil de percibir con el cuerpo: si comiéramos sin parar todo el día, nos sentiríamos pesados y comenzaríamos una dieta; pero no hacemos lo mismo con la pesadez de la mente; seguimos consumiendo.

Miramos sin ver, actuamos sin sentir, y la mayoría de los actos son compulsivos, no conscientes.

La mente funciona automáticamente, va de un tema a otro de manera continua; es como los gorriones, que saltan de una rama a otra sin detenerse.

El resultado es que vivimos cansados. Descubrimos que estamos perdiendo interés en las cosas o que estamos estresados o deprimidos.

En ese momento decidimos que estamos agotados y tomamos pastillas, o cerveza sin parar para aturdirnos.

Cuerpo y mente están integrados y actúan mediante asociaciones de pensamientos, sentimientos, sensaciones corporales y comportamientos, todo lo cual es muy útil para la vida cotidiana.

El problema surge cuando comenzamos a encerrarnos en estos bucles asociativos, lo que nos limita, enferma o desestabiliza.

Por ejemplo: cuando decimos "doctor", se nos viene a la mente la palabra "enfermera", "hospital", y todo el contexto, pero, si alguna vez la pasamos mal en el sanatorio, la palabra doctor nos acarrea un dolor agudo de estómago.

El estado de ánimo también genera asociaciones. Es decir que, cuando estamos deprimidos vemos las cosas mal, aunque estén bien o no tengan realmente importancia.

La mente también examina alternativas de lo que puede suceder, lo cual es muy útil, pero, si nos encerramos en eso, lleva al agotamiento. Esto plantea un problema: si la mente funciona automáticamente, ¿quién soy yo? Si yo digo quiero dormir, y la mente sigue pensando, ¿por qué no la domino?, ¿es algo ajeno?

Es indiscutible el hecho de que los niños comienzan desde muy pequeños a recibir información, porque tienen celulares, almuerzan viendo videos, juegan en internet siete u ocho horas al día. La transmisión de la sabiduría de la escuela o de los padres, comienza a tener dificultades.

Esas mentes se acostumbran a actuar de manera automática y homogénea, de acuerdo a las pautas que da la información.