¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

24°
29 de Abril,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

La trombofilia y sus graves consecuencias en embarazadas

Pablo Clementti, especialista en cardiología y medicina vascular, habló de la enfermedad y brindó recomendaciones.También puede afectar a los hombres pero es más dañino en las mujeres causando abortos espontáneos.
Domingo, 15 de marzo de 2020 01:00

La trombofilia es una alteración del sistema de coagulación que genera más coágulos de lo normal tanto en el sistema arterial como el venoso causando infartos cerebrales o cardíacos, o complicaciones en las mujeres durante su embarazo cuya peor consecuencia son los abortos espontáneos, sostuvo, en diálogo con El Tribuno de Jujuy Pablo Clementti, médico especialista en cardiología y medicina vascular.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

La trombofilia es una alteración del sistema de coagulación que genera más coágulos de lo normal tanto en el sistema arterial como el venoso causando infartos cerebrales o cardíacos, o complicaciones en las mujeres durante su embarazo cuya peor consecuencia son los abortos espontáneos, sostuvo, en diálogo con El Tribuno de Jujuy Pablo Clementti, médico especialista en cardiología y medicina vascular.

Puede afectar al hombre y a la mujer, y se presenta normalmente entre los 20 y 40 años. Hay dos tipos: la adquirida que aparece a veces sin ninguna causa o acompañando algunas enfermedades como artritis reumatoidea o lupus; y las congénitas, que surgen desde el nacimiento.

En ese sentido, Clementti mencionó que "la trombofilia afecta en general a personas jóvenes y en el caso de la mujer, es más llamativo porque lleva a pérdidas de embarazo. Las consultas de mujeres embarazadas están aparejadas a la trombosis venosa profunda o embolia de pulmón, que aparecen durante el embarazo o antes del mismo, y puede originar interrupciones en el mismo".

"Hay un diez por ciento de la población que tiene trombofilia pero eso no significa el hecho de que tenga la enfermedad que le cause problemas, por eso no se estudia a todas las mujeres con trombofilia sino a las que tienen algún factor de riesgo", añadió.

Asimismo señaló que "en general siempre el estudio por trombofilia es por descarte, cuando se descartan otras causas de pérdidas de embarazo se estudia. Hay mujeres que no tienen ninguna causa de pérdida de embarazo y de repente pierden dos o tres antes de las diez semanas sin ningún motivo, entonces a esas pacientes hay que investigarle si tiene la enfermedad. O aquella mujer que pierde un embarazo más allá de las diez semanas sin ningún motivo también hay que analizar si tiene la patología".

Clementti también aseguró que esta enfermedad no da síntomas, "lo que da síntomas es la presencia del coágulo, del trombo, que tapa una arteria o una vena", afirmó. Las trombofilias se tratan con anticoagulantes o con aspirinas. Las congénitas con anticoagulantes y en el caso de embarazadas con heparina, y la más usada es la enoxaparina.

Recomendaciones

Pablo Clementti recomendó investigar trombofilia en aquellas personas menores de cuarenta años que tienen algún evento trombótico como ser trombosis de embolia profunda, embolia de pulmón, infarto cardíaco o cerebral y que no tienen ningún otro factor de riesgo. En esos casos hay que estudiarla.

También "recomiendo estudiarla en embarazadas o mujeres que perdieron dos embarazos antes de las diez semanas o más, que no tienen otro motivo para perderlo. O en aquellas mujeres de más de diez semanas que perdieron un embarazo sin otra causa o las que tienen un evento trombótico durante o en el puerperio", sostuvo.

Hizo un tratamiento y logró dar a luz, tras perder dos embarazos

Gisela León tiene 40 años y vive en capital, en el año 2012 quedó embarazada por primera vez y mientras transitaba en la semana ocho tras un control médico le dijeron que no se registraba vida en el embrión.

Sobre su historia personal expresó que “me informaron que los abortos espontáneos son muy comunes y que por haber sido el primer embarazo había que esperar. Que seguramente el segundo vendrá bien pero en el 2014 quedé nuevamente embarazada y los primeros controles salieron bien, pero en la semana diez me dijeron que se había producido otro aborto espontaneo”.

Volvió a consultar y le dijeron lo mismo, “es normal y hay que seguir esperando. En el tercer embarazo recién podemos hacer estudios. Era un dolor físico y también emocional, una gran frustración. Con mi esposo no quisimos esperar más y nos fuimos a Buenos Aires para pedir consultas con otros médicos y un hematólogo me hizo los estudios donde me dijeron que tengo trombofilia. Entonces empecé a medicarme”, indicó.

En el 2015 nuevamente quedó embarazada mientras hacía el tratamiento mediante una dosis de inyecciones pero a las once semanas lo volvió a perder.

Desde ese momento cambiaron de especialista y acudieron al doctor Pablo Clementti que le realizó más estudios y le cambió el tratamiento.

Asimismo manifestó que “gracias a Dios con ese tratamiento, en el 2018, que quedé embarazada nuevamente logré dar a luz. Tuve complicaciones porque fue un embarazo de alto riesgo por la misma trombofilia pero todo salió como yo soñaba.

Estuve todo el tiempo haciendo reposo, tenía hematomas y contracciones muy seguidas, pero todo valió la pena”. A las mujeres que también poseen trombofilia les digo que “el diagnóstico es shockeante pero por otro lado te da la seguridad de saber cómo enfrentarlo y saber lo que una debe hacer para cumplir con el sueño de ser madre. Me costó años, tuve pérdidas, pero nunca perdí la fe y a eso me aferré. El apoyo de la familia y los afectos es imprescindible para superar esta situación”.

Temas de la nota