Cada quien le pone su significado a la palabra "cuarentena", que para unos es pintar, para otros pensar, leer, escribir, componer.
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Cada quien le pone su significado a la palabra "cuarentena", que para unos es pintar, para otros pensar, leer, escribir, componer.
Para Martín Esquivel Viveros es todo eso, pero le agrega que "por estar aquí, en Humahuaca, con toda esta tranquilidad aproveché para estudiar y para poner en marcha proyectos que tengo para este año", dice.
"Por ejemplo", nos explica en una conversación telefónica que mantuvo con El Tribuno de Jujuy, "una obra que es Beca de la Creación del FNA (Fondo Nacional de las Artes), en el rubro de danza", explica y de paso pasa el dato de esta creación en proceso.
Movimiento Andino Danzante
Nos cuenta que "el anteaño tuvimos una beca con el Movimiento Andino Danzante, junto con Mariana Castro, Nadia Viveros y Daniela Cazón".
Luego "a fines del año pasado obtuve una individual".
Esta última es para una obra de danzas que se llama "Sajra Supay, El Cuerpo Endiablado", que según se explaya "tiene que ver con el proyecto de mi tesis de Antropología y el proyecto de investigación del INT (Instituto Nacional del Teatro)", comenta entusiasmado.
"Todo se fue entrelazando, porque cuando empecé esa investigación sobre los diablos, el fin era poder crear en algún momento la obra", y las condiciones hoy, en este marco de cuarentena obligatoria, se da.
"Ir a lo corporal"
Así dice que "ese tiempo fue más que nada de experimentación, de investigación, y ahora estoy aprovechando para ir a lo corporal, a la construcción escénica. Es algo que ya venía haciendo, pero con la cuarentena se volvió más interesante por eso de armar el lugar de trabajo en la casa, seguir estudiando. Si no, me la pasaba viajando a Tilcara, a Jujuy", confiesa sobre la vorágine de la cual hoy todos tuvimos que recular. "Este año empecé a trabajar en la Escuela Cooperativa Tierra del Sol, y eso también es otra forma de trabajo porque seguimos las clases en forma virtual", cuenta.
Piensa que "se van generando otras formas de trabajo, incluso con los niños. Y con eso estoy terminando mi tesis de Antropología, que tiene que ver con el Carnaval y los Diablos humahuaqueños, y está orientada al cuerpo, la corporidad, la fiesta y el ritual. Lo vengo investigando desde el 2014 y este año la voy a presentar, así que estoy también en eso de escribir, de aprovechar todo lo que uno lee y poder pasarlo a palabras, para lo que en otras condiciones no encontraba los tiempos necesarios".
Entonces se hizo un orden de actividades: "a la mañana me levanto, leo, hago un trabajo corporal, voy con la creación de la obra y a la noche me siento a escribir para seguir la tesis, y en ese interín uno decide seguir bailando, cantando, lo que nos gusta. Hay que aprovechar el tiempo para seguir trabajando".
Con el anuncio de la cuarentena nos cuenta que "se interrumpió el taller Danzantes, que dicto en Humahuaca, Tilcara y Jujuy, y que había iniciado pasado el Carnaval. Se cortó esa forma personal de encuentro. El año pasado lo terminamos muy lindo, porque junto a Noelia Gareca y Caro Escobar fuimos invitados a formar parte del videoclip de Angelito de Purmamarca, el carnavalito de Daniel Vedia y Héctor Hugo Cazón". Aclara que "eso se cortó, pero vía internet seguimos las clases, nos mandamos algunas propuestas, revisamos cosas de la coreografía. La cuarentena es una experiencia rara, pero uno se va acomodando. Se detuvo el ritmo para poder decantar un montón de cosas que ya venía haciendo", concluyó.