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¿Cuándo tiene tiempo una mujer para cuidarse?

Miércoles, 01 de julio de 2020 01:03

Por FLORENCIA YANUZZIO

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Por FLORENCIA YANUZZIO

Las mujeres desde siempre han ejercido tareas no remuneradas ligadas principalmente al cuidado de sus hijos e hijas como también de familiares directos o incluso familiares de sus parejas, llevando a una aún mayor carga de tiempo de las mujeres a disposición de otras personas y una reducción para ocuparse de su propia salud.

Según la Encuesta sobre Trabajo No Remunerado y Uso del Tiempo (Eahu-Indec, 2013) las mujeres destinan un promedio de 6 horas diarias a tareas domésticas y de cuidado de personas, contra un 3,8 horas que realizan los hombres. Si sumamos el trabajo doméstico no remunerado y el apoyo escolar obtenemos largas jornadas de trabajo total que reduce la posibilidad de disponer de tiempo personal, es por eso que me pregunto ¿cuándo tiene tiempo una mujer para cuidar su propia vida?

Hace más de 20 años que desde Fundación Avon trabajamos, en conjunto con otras organizaciones públicas y privadas, para facilitar el acceso a los medios tecnológicos para cuidar la salud mamaria y así lograr llegar a tiempo en la detección temprana del cáncer de mama, una enfermedad que se lleva a más de 5.500 mujeres por año. Anualmente con el mamógrafo móvil Avon-Lalcec atendemos a mujeres mayores de 40 años sin obra social para realizarles mamografías y, según la encuesta que realizamos luego del estudio, la mayoría de ellas reconoce que el cáncer de mama u otro tipo de cáncer es la principal causa de muerte en mujeres y comprenden el grupo de riesgo en el cual están involucradas, pero la mayoría no hace los estudios por falta de hábito, costumbre o porque les resulta muy costoso.

Sabemos que detrás del "no tengo tiempo" o de los "me olvido", está siempre presente esa desigualdad en las tareas de cuidado, esa aún lejana corresponsabilidad entre géneros, que se expresa en la sobrecarga mental de las mujeres. Si bien el cáncer de mama afecta principalmente a las mujeres (en un 99%) y esto es un factor de riesgo biológico inmodificable, hay otras variables totalmente modificables, profundamente socioculturales que afectan las posibilidades de las mujeres y pueden conllevar a diagnósticos tardíos.

Este contexto de pandemia global nos ha hecho parar y nos ha hecho cuestionar toda nuestra normalidad. A algunas personas les ha dado más tiempo en casa, otras salen cuidándose de no acercarse a nadie, pero a todas nos ha sumado mayores preocupaciones y responsabilidades. Sin embargo, algo bueno ha salido de esto: nos dimos cuenta que estamos de acuerdo en que hay que cuidar la vida y la salud de las personas y que eso debe ser siempre una prioridad.

Por eso, aprovechemos para reflexionar sobre las pautas culturales que ponen a las mujeres en desventaja respecto al acceso a la salud y exclamemos por nuestro derecho a tener el tiempo para cuidar de nuestra salud mamaria. Aprovechemos este momento de redefinición de costumbres y de hábitos para adoptar hábitos más saludables y para hablar con nuestro entorno (parejas, hijos, colegas) de la importancia de tener tiempo para ocuparnos de nuestro bienestar.

¿Qué puedo hacer ya, hoy, desde casa para ganarle al cáncer de mama?

La médicos siempre repiten cuatro claves: hacer ejercicio a diario (incluso desde casa e incluso hacerlo en familia), incluir más frutas y verduras a tu dieta; evitá el tabaco y reducí el consumo de alcohol.

Conocé tu cuerpo, tus mamas: observalas y tocalas regularmente. Conocer tus pechos en estado saludable te va a ayudar a detectar cambios. Prestá importancia a las alteraciones de tamaño o forma, cambios en la forma o posición del pezón y si aparecen hendiduras. Si notás algo extraño consultá a un médico para que te indique qué hacer.

Conversá con las pequeñas de la familia: ellas también tienen que conocer su cuerpo y entender que cuidar la salud es nuestro derecho.

Conversá con los grandes sobre corresponsabilidad en las tareas de cuidado: cómo podemos compartir más las tareas del hogar, el sacar los turnos de los niños y niñas. Es sólo apoyándonos los unos a los otros que vamos a lograr que todas tengamos tiempo para cuidarnos.

Desde 1999, la Fundación Avon trabaja para defender los derechos de las mujeres, promover su salud y cuidar su integridad física, social y emocional, liderando esfuerzos para erradicar el cáncer de mama y poner fin a la violencia de género y reconocer a mujeres que lideran proyectos sociales en el país.

En el marco de su programa "Promesa Avon para erradicar la violencia hacia mujeres y niñas", realiza acciones de concientización, capacitación y trabajo en red para contribuir a la erradicación de esta problemática.

Con el "Premio Mujeres Solidarias", reconoce y apoya a las mujeres que lideran proyectos sociales y que generan importantes cambios en sus comunidades.

(*) Directora ejecutiva de la Fundación Avon