El sector textil que suele producir y distribuir prendas y telas para todo el país está en una difícil situación. La Cámara de Innovación Textil informó que algunos reconvirtieron, ayudó la Asistencia al Trabajo y Producción (ATP) pero otros cerraron. En Jujuy el sector centrado en fabricación de uniformes, algunos se reconvirtieron, otros están paralizados y una textil nació de la mano de la comuna de Palpalá.
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El sector textil que suele producir y distribuir prendas y telas para todo el país está en una difícil situación. La Cámara de Innovación Textil informó que algunos reconvirtieron, ayudó la Asistencia al Trabajo y Producción (ATP) pero otros cerraron. En Jujuy el sector centrado en fabricación de uniformes, algunos se reconvirtieron, otros están paralizados y una textil nació de la mano de la comuna de Palpalá.
"El sector textil no escapa a la realidad coyuntural de Argentina, es uno de los más golpeados porque la Nación no habilitó negocios en el Amba y la mayoría del país estuvo cerrado y con imposibilidad de continuar. Muchas empresas cerraron y otras están en la incertidumbre", explicó Ernesto del Burgo, referente de la Cámara de Innovación Textil.
Expresó que hay muchas empresas de origen familiar que llevaban tres generaciones y no podrán continuar ante el parate de más de tres meses, pese a algunos momentos que abrieron.
Dijo que ayudó la ATP para pagar sueldos, pero que las que se reconvirtieron se perjudicaron con la importación china de productos médicos adquiridos con dólar diferencial lo que no le permitió competir con una cotización local mucho mayor.
En tanto, Jujuy tiene un sector textil reducido en comparación a Buenos Aires, y lo integran en general aquellas pymes que se dedican a fabricar uniformes escolares y del sector salud, y prendas deportivas. El panorama para ellos es disímil, hay pymes que continuaron trabajando a medias logrando reconvertirse y ofrecer otros productos para proveer ante la contingencia, otras pararon indefinidamente ante los costos altos de los insumos y escasa apertura comercial y hubo una iniciativa del Estado municipal que abrió una textil.
"Nos ha tocado bastante la situación, estamos parados desde el 16 de marzo y siempre que se pudo trabajar con las autorizaciones del Gobierno lo hemos hecho. Recientemente trabajamos con conjuntos deportivos para la Unidad de Infantería, pero nos ha tocado bastante no sostener la materia prima, que son cotizadas en dólar, y con esta variación ha sido importante la suba", dijo Sergio López de New Sport. Planteó que pese a los costos en alza buscan equilibrar y tender a mantener los precios de modo de lograr pedidos, sea para equipos de fútbol o empresas Pese a que realizan ventas online, la logística de transporte es un obstáculo porque tarda 10 días. "Gracias a Dios seguimos trabajando con barbijos, nos hemos reinventado en esta época, hemos aprendido a hacer muchas cosas para sostener a todos", explicó ya que cuentan con diez empleados. Dijo que pese a tramitar el ATP no lograron obtenerlo y pudieron sostenerse con el trabajo que hicieron.
En tanto, Irma Rosa Ávila, de Avila Uniformes explicó que en su caso no pudieron producir desde hace meses. Dijo que pudo gestionar ATP y no otros beneficios para pymes porque tuvieron que mudarse y recién están reuniendo los papeles para solicitarlo antes que lo corten. "Está muy difícil. Quería proveer al Gobierno, dicen que no importa que no paguemos pero mando a sacar la cédula fiscal y debo dos meses de Rentas y no me la dan, o sea que no es tan así lo que se habla y la realidad", explicó.
Otra iniciativa es la del municipio de Palpalá que creó la Fábrica Textil y en marzo comenzó a producir barbijos, luego para otras comunas y empresas privadas, y uniformes para empleados municipales. "La textil fue toda gente nueva, mano de obra calificada, y por eso se logró excelencia en la producción", explicó el director del instituto Municipal de Desarrollo (IMD) Luis Moreno, quien inició con 30 personas.
El objetivo es autoproveerse a la comuna y continuar a través del IMD un instituto autárquico que tiene sus propios ingresos, por lo que se busca generar trabajo.
"Son muchas pymes las que no pudieron aguantar más"
El panorama nacional es grave por la magnitud de la industria, que sólo en la Cámara de Innovación Textil reúne 350 empresas que incluye 20 mil puntos de venta adheridos en el país. Según su director Ernesto Horacio del Burgo pese a que el Gobierno nacional lanzó una serie de medidas de contención económica, entre ellas la Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) para suavizar la grave situación que el sector está atravesando, muchas al no poder sostener aunque sea el 5% de la planta, cerraron.
"Hay un margen de producción, muchas empresas se han reconvertido para hacer productos esenciales, de otros rubros en productos de salud sobre todo, eso fue un comienzo de luz para sostener algunas empresas hasta que el Gobierno dejó entrar productos de China con un dólar diferencial para el importador, 65 a 70 pesos contra el dólar a un costo más alto, eso hizo que pegue muy fuerte al sector pyme".
No obstante, consideró que el otorgamiento de ATP fue bueno, para pagar parte de la planta, pero que al no vender nada se complicaba. Detalló que en zonas comerciales como provincia de Buenos Aires donde están cerrados los locales y deben pagar el impuesto municipal que ronda 25 mil pesos no resisten.
Detalló que con la cuarentena de dos semanas hizo que se programaran para ello, y a medida que se fue alargando "muchas no pudieron aguantar más. Muchas están viendo cómo liquidan", precisó. Estimó que al no tener una seguridad del futuro, no saben si armar temporadas o no y la de invierno se perdió.
Explicó que con las aperturas intermitentes muchas pymes gastaron en los elementos para cumplir lo que establecen los protocolos, y ahora están en completa incertidumbre. "Hoy por hoy los grandes beneficios los tienen el Estado o algunas grandes empresas que tienen una vinculación más directa con el Estado", afirmó del Burgo.
Explicó que el pasado martes en el Amba recién abrieron algunos locales de indumentaria y calzado pero con la misma incertidumbre por cuánto tiempo continuará abierto.
Por otro lado, explicó que si bien la venta online se incrementó mucho, la dificultad surgió por la logística de envíos que se tornó sumamente cara, ya que en muchos casos cuesta más caro el costo de envío que el producto, que hoy asciende a 5.000 pesos el metro cúbico.
"Todo ayuda, agarramos lo que podemos en una pyme, queremos sostener la fuente de trabajo, el grupo de trabajo porque las pymes tienen una relación familiar con ellos. Ven que se están perdiendo dos generaciones de trabajo en 120 días, y la baja de empleados hoy va a ser del sector pymes y no del Estado", expresó. La Cámara tiene 350 socios del rubro y 20 mil puntos de venta adheridos en el país.