En su homilía de ayer, día que se recordó la gesta del Éxodo Jujeño, el obispo César Daniel Fernández pidió oración por los más necesitados de alivio, de consuelo y de esperanza en medio de la pandemia en Jujuy. Dijo que al pueblo jujeño de 1812 se le pidió dejar todo por la libertad, y que “hoy se nos pide un esfuerzo semejante pero al revés, no de salir sino quedarnos en casa y cuidarnos” Señaló que también hace falta mucho heroísmo, “porque está en juego el pueblo, la supervivencia”, y “como nosotros también tenemos valor, hay que dar batalla a este enemigo invisible que tanto mal nos hace”.
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En su homilía de ayer, día que se recordó la gesta del Éxodo Jujeño, el obispo César Daniel Fernández pidió oración por los más necesitados de alivio, de consuelo y de esperanza en medio de la pandemia en Jujuy. Dijo que al pueblo jujeño de 1812 se le pidió dejar todo por la libertad, y que “hoy se nos pide un esfuerzo semejante pero al revés, no de salir sino quedarnos en casa y cuidarnos” Señaló que también hace falta mucho heroísmo, “porque está en juego el pueblo, la supervivencia”, y “como nosotros también tenemos valor, hay que dar batalla a este enemigo invisible que tanto mal nos hace”.
Estas palabras las dijo al final de su mensaje pastoral, tramo en el que Fernández también recomendó que entre todos “pidamos mucho también por nuestra provincia, que está sufriendo fuertemente a causa del Covid”. “Si miramos para atrás, vemos a esos patriotas que llevados por el consejo y la guía segura del General Belgrano fueron capaces de salir de su hábitat y arrasar todo para hacer funcionar una estrategia militar, que dio resultado, afortunadamente, en ese momento. Pero cuánto sacrificio, ¿no? Lo recordamos cada año de distintos modos.
Los sacrificios y la ofrenda que han hecho nuestros antepasados de su propia vida incluso, porque muchos han muerto en este caminar, de ir y volver hacia Tucumán, hoy se nos pide a nosotros un esfuerzo semejante. No para salir, sino al revés, hoy se nos pide que no salgamos, nos piden que nos quedemos en casa, que nos quedemos adentro, que nos cuidemos, pero seguramente hace falta tanto heroísmo también, porque está en juego el pueblo, está en juego la supervivencia. Hoy no son los realistas, no es Pío Tristán con sus tropas, es el Covid que viene cabalgando, se viene metiendo en nuestras casas, y por eso tenemos que darle batalla. Y la batalla es cumplir lo que nos dicen, aunque nos cueste a veces a los que tenemos muchas ganas de salir y de hacer muchas cosas, y de volver a la normalidad de antes, pero hagamos honor al esfuerzo. Nosotros no somos menos que nuestros antepasados. Nosotros también tenemos valor, así que ánimo, para dar batalla a este enemigo invisible que tanto mal nos hace”.
En su mensaje, el obispo Fernández también se refirió el Evangelio de Mateo capítulo 16, en el que el apóstol Pedro le dice a Jesús que es el Mesías, el hijo de Dios viviente. “Esta confesión de fe es la piedra fundamental en la construcción de esta comunidad que se llama Iglesia, que Jesús vino a edificar aquí en la tierra como signo del Reino de los Cielos, que habita en los corazones de los hombres. Y reconoce Jesús que lo que pudo decir Pedro no lo aprendió en ningún lado, no nace de su sabiduría humana. Por eso lo felicita y le dice esa confesión de fe no salió de su inteligencia y su capacidad de deducir y comprender, sino, te lo ha revelado mi Padre que está en el cielo. Y por eso, sobre esta confesión de fe y sobre esta humilde persona, que es Pedro, sobre esta piedra en la cual asienta la construcción del edificio, un edificio espiritual, porque iglesia quiere decir templo, lugar como en el que estamos celebrando la misa, pero, en el sentido más amplio y propio, iglesia es comunidad, es decir en donde estamos los cristianos”. Por eso también pidió rezar por el papa Francisco, el sucesor de Pedro en la Iglesia de Dios.