Los vecinos del barrio El Progreso, de la capital, hacen muy bien los deberes, o por lo menos esa es la impresión que tuvo ayer El Tribuno de Jujuy, tras recorrer las diferentes calles y avenidas, al notar que quienes circulaban por el lugar lo hacían respetando todas las normas de bioseguridad, utilizando sus barbijos a la hora de ingresar a los comercios y respetar el distanciamiento. Los mismos vecinos y algunos comerciantes confirmaron a nuestro diario que cuando están vigente las medidas de la cuarentena, las personas cumplen y salen para realizar sólo algunas compras esenciales y que la mayor parte del tiempo, las familias permanecen en sus hogares. En tanto, algunos indicaron que, al inicio de la pandemia, había a quienes le costaba adaptarse a las reglas. Además, precisaron que, varios vecinos pudieron acceder a la revisión por parte del personal de salud, durante el operativo para detectar posibles casos de Covid-19.
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Los vecinos del barrio El Progreso, de la capital, hacen muy bien los deberes, o por lo menos esa es la impresión que tuvo ayer El Tribuno de Jujuy, tras recorrer las diferentes calles y avenidas, al notar que quienes circulaban por el lugar lo hacían respetando todas las normas de bioseguridad, utilizando sus barbijos a la hora de ingresar a los comercios y respetar el distanciamiento. Los mismos vecinos y algunos comerciantes confirmaron a nuestro diario que cuando están vigente las medidas de la cuarentena, las personas cumplen y salen para realizar sólo algunas compras esenciales y que la mayor parte del tiempo, las familias permanecen en sus hogares. En tanto, algunos indicaron que, al inicio de la pandemia, había a quienes le costaba adaptarse a las reglas. Además, precisaron que, varios vecinos pudieron acceder a la revisión por parte del personal de salud, durante el operativo para detectar posibles casos de Covid-19.
Barrio El Progreso. Está ubicado en la capital jujeña, a la vera de la colectora de la ruta 9, en cercanías del barrio Mariano Moreno.
La contracara de esta situación, está representada por los hechos de inseguridad que, no obstante al aislamiento -según apuntaron los vecinos consultados- se han mantenido en sus niveles normales, lo que genera preocupación, sobre todo a los propietarios de comercios que meses atrás han sufrido asaltos.
El barrio Progreso está ubicado a la vera de la colectora de la ruta 9, en cercanías del barrio Mariano Moreno. Durante el recorrido que llevó adelante nuestro diario, se pudo observar que los espacios verdes están necesitando tareas de desmalezamientos. En este punto, los vecinos solicitaron que cuando se normalice la situación sanitaria, las áreas competentes realicen también el asfalto en las calles. Mientras recorríamos los sectores, se observó que, como era obvio, los pocos espacios verdes que hay en el barrio y las esquinas de paradas de colectivos estaban desoladas y se registró una nula circulación de vehículos.
También piden limpieza
Al visitar un comercio ubicado entre avenida El Creador y calle San Salvador, dialogamos con la propietaria Lorena Armella, quien en la oportunidad pidió a las autoridades mayor seguridad para el barrio. Relató que en el mes de mayo fue víctima de un hecho de inseguridad. "Vinieron dos personas encapuchadas y me robaron varias bebidas, mi celular y dinero que había recaudado durante la tarde", expresó consternada. A su vez destacó que, es importante que la gente se siga cuidando. "En nuestro barrio se puede ver que los vecinos están cumpliendo con las medidas", sostuvo.
En tanto, otro vecino que prefirió mantenerse en el anonimato, señaló que las familias transitan muy poco por los espacios públicos y si lo hacen es únicamente para comprar la mercadería de la semana, pero también planteó que los vecinos están preocupados por la falta de seguridad, sobre todo durante la noche. "Necesitamos que los patrulleros recorran todos los días el barrio, porque ahora es cuando más aprovechan los malvivientes para robar, esto debe terminar", dijo.
Mientras tanto, la vecina Amelia Arias habló sobre el complicado momento laboral que atraviesa. "Soy vendedora ambulante, pero por la situación de la pandemia no estamos autorizados a trabajar, ahora sólo vendo sahumerios a domicilio y un poco me ayudan mis hijos porque la verdad es que de otra manera no podría subsistir", cerró.
Por último, los consultados coincidieron en que con la responsabilidad social se puede superar el difícil momento que atraviesan el mundo.