Con 19 años conlleva un desafío personal que se mantiene pese a haberse cruzado de vereda. Es que Nahuel Vilte Solano es el volante jujeño que hoy juega en la 4ta de Huracán de Parque Patricios, antes lo hizo en San Lorenzo de Almagro durante 3 años (ambos clubes de la Liga Profesional) pero mantiene como premisa debutar en Primera División una vez que se reanude el fútbol profesional.
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Con 19 años conlleva un desafío personal que se mantiene pese a haberse cruzado de vereda. Es que Nahuel Vilte Solano es el volante jujeño que hoy juega en la 4ta de Huracán de Parque Patricios, antes lo hizo en San Lorenzo de Almagro durante 3 años (ambos clubes de la Liga Profesional) pero mantiene como premisa debutar en Primera División una vez que se reanude el fútbol profesional.
Actualmente en su Monterrico natal, por la pandemia del Covid-19, el juvenil ante El Tribuno de Jujuy contó que "vengo entrenando de lunes a sábado, donde lunes, miércoles y viernes hago potencia toda la parte superior, martes, jueves y sábados salgo a correr por la mañana y a la tarde noche hago abdominales y la parte inferior de piernas. Y los domingos descanso", agregando que "las rutinas nos mandan por privado todas las semanas y los viernes tenemos las chalar por Zoom a las 19 donde se tocan temas puntuales".
De su corta e inconclusa estadía en Parque Patricios por la emergencia sanitaria detalló que "yo hice la prueba a fines de enero, hice pretemporada, tuvimos varios amistosos con Gimnasia, Ferro, River, Temperley y otros más hasta los primeros días de marzo y surgió todo estos que vivimos hoy. Tengo buena relación con el DT (Gastón Casas exdelantero del "globo" y Betis de España) que me integró bien a los chicos. Jugué todos los amistosos de pretemporada, me dijeron el viernes que me quedaba y el sábado ya teníamos un amistoso con Gimnasia La Plata". A su vez opinó que "no sé sí será más fácil pero si en Huracán hay más posibilidades de que suban a juveniles al plantel de Primera por el momento que atravesamos y lo dijo Israel Damonte (DT), pero una vez que vuelva el fútbol voy a pelearla, hay que tener suerte, los técnicos cuando a veces no sos de sus gustos o en otros te buscan otro puesto, depende de muchas cosas", señaló.
Al final Vilte se definió que "soy un 5 más de juego, con una buena técnica y manejo los dos perfiles. Cuando hay que meter lo hago, pero me caracterizo más por ser un 5 de juego. Y cuando vuelva intentaré hacerme ver con el técnico de Reserva así me da la posibilidad de dar el salto a Primera para poder obtener un contrato. Las veces que fui a entrenar con Primera me fue bien. Mi viejo (Diego Vilte) me dice que siga metiéndole, tengo todo su apoyo y es un loco del fútbol y cuando puede me acompaña en Buenos Aires".
El hábil volante se pasó de una vereda a la otra
El mediocampista oriundo de Monterrico comentó sobre sus inicios con la redonda y lo que atravesó en todo este tiempo en buscar de ser un futbolista profesional.
"A los 9 años empecé jugando para la Escuelita de Monterrico que está a cargo de mi padre (Diego Vilte) y al poco tiempo Argentinos Juniors me buscó para jugar un Torneo Infantil en Formosa, pero a los 14 años se dio de estar en una prueba en River Plate donde estuve una semana y luego hice lo mismo en San Lorenzo que mostró mayor interés donde hubo más de 200 chicos de los que quedamos sólo 4. Me decidí y empecé en octava y lo tuve de técnico a Gustavo Minervino. Me fue bien jugando en la Liga Metropolitana y AFA donde me pude adaptar. Fuí compañero de Alexís Sabella, Matías Palacios entre otros (hoy en Primera) con quienes mantengo contacto porque íbamos todos al mismo colegio en el Bajo Flores", inició su relato el jugador de categoría 2001 que mide 1,74 y pesa 65 kg.
Sobre su experiencia en el "ciclón" añadió que "hice de octava hasta 5ta división y ahí me dejaron libre. Me dijeron que busque otro club y que le siga metiendo por todas mis condiciones. En ese tiempo tuve la oportunidad de entrenar con el plantel de Primera con Diego Monarríz y Juan Antonio Pizzi de técnicos y después por medio de mi representante se dio de probarme en Huracán con Gastón Casas como técnico que fue el que me hizo quedar", sintetizó.