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Caso Romina Aramayo: su expareja muy comprometida

El imputado omitió contar a los fiscales que mantuvo diálogo por mensajes con ella hasta el día que desapareció. La clave fue la insistencia de Villarroel para que Aramayo se contactara con un arquitecto por un asunto de dinero.
Miércoles, 23 de septiembre de 2020 01:01

La investigación por el femicidio de Romina Aramayo ocurrido en 2014, la semana pasada dio un inesperado giro y la expareja de la joven ledesmense fue detenido e imputado por el hecho y además se dispuso el cese de detención de Diego Alemán, "el patovica" que trabajaba en un cabaret, donde también frecuentaba la joven asesinada.

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La investigación por el femicidio de Romina Aramayo ocurrido en 2014, la semana pasada dio un inesperado giro y la expareja de la joven ledesmense fue detenido e imputado por el hecho y además se dispuso el cese de detención de Diego Alemán, "el patovica" que trabajaba en un cabaret, donde también frecuentaba la joven asesinada.

Se trata de Nicolás Villarroel, quien además es el padre de la hija de Aramayo y se entrevistó en reiteradas oportunidades con los fiscales a cargo de la investigación, para pedir justicia por su exmujer.

"La detención de Nicolás Villarroel nos dejó a todos perplejos, todavía estamos en shock y pensamos en mi sobrina, que primero perdió a su mamá, después a su abuelo y ahora tiene a su papá detenido", le dijo a nuestro diario Pamela Aramayo, hermana de Romina.

El cuerpo de la joven de 24 años fue hallado en la mañana del 10 de abril del 2014 muy cerca del predio del dique Los Molinos, en la localidad de Reyes, luego de estar desaparecida desde el 4 de ese mes y de la investigación que surgió en los últimos días, Villarroel sería el autor material del hecho.

Aramayo junto a su "amiga" Yesica Pantoja trabajaban en un cabaret ubicado en el barrio Alto Comedero y antes de viajar aquel viernes 4 de abril, le había manifestado a la mujer que no quería regresar más a ese lugar, que había retomado la relación con el padre de su hija y hasta incluso habían planeado casarse.

Hay que decir que la investigación tuvo muchísimos lados oscuros desde sus comienzos, al punto de que el comisario Gabriel Osvaldo Zapana, quien estuvo a cargo de investigar el crimen, fue imputado por la supuesta autoría del encubrimiento agravado, por tratar de hacer desaparecer un cuaderno, que se creía que contenía datos de sumo interés para la causa.

Entre los meses de agosto y noviembre del 2018, los investigadores procedieron a la detención de Zapana y del "patovica" Diego "Chicago" Alemán, luego de que se recupera parte del "famoso" cuaderno, cuando Zapana estaba a cargo de la División "Leyes Especiales" y llevaba una cuenta de las personas que ingresaban al cabaret, tanto trabajadoras como clientes.

En ese cuaderno quedaron registradas actuaciones sobre hematomas en el rostro y el cuerpo de Alemán, donde los investigadores creyeron que serían productos de un acto de defensa de otra persona y todo apuntaba a que esa persona podría ser Romina Aramayo, en un acto de defensa, antes de ser asesinada.

Los investigadores creen que estos imputados podrían estar vinculados en hechos de "trata de personas" y realizaron la correspondiente denuncia en el fuero federal, pero nunca se citó a estas personas, ni al propietario del lugar para dar las correspondientes explicaciones.

El giro inesperado en la causa

Nicolás Villarroel fue detenido luego de que su teléfono celular fuera analizado en las últimas semanas y se haya descubierto un diálogo entre él y su exmujer el 4 de abril de 2014. Situación que omitió de contar a los fiscales que intervinieron en la causa. Villarroel era insistente en pedirle a Aramayo que viajara a San Salvador, para que se reuniera con un arquitecto, para cobrar un dinero aproximado a los 15 mil pesos.

Luego Villarroel le dijo a Aramayo que esta persona la esperaba cerca del mercado de exabasto alrededor de las 14, muy cerca del residencial donde la joven estaba alojada junto a Yesica Pantoja.

La prueba irrefutable que a Villarroel le va a costar responder, es explicarle al fiscal por qué motivo, luego de mantener un fluido diálogo con Aramayo ese 4 de abril, dejó de escribirle o preguntarle si había podido cobrar el dinero o no. Su registró telefónico siguió activo, se mensajeó con varias personas, pero no llamó más a su exmujer.

Conferencia de prensa

En la jornada de ayer, familiares de Romina Aramayo y su representante legal Mariana Vargas convocaron a una conferencia de prensa a través de una plataforma virtual, para dar cuenta de la situación procesal del nuevo detenido.

“Desde la querella entendemos que se tiene que seguir investigando, esto es un elemento nuevo. No se descarta ni se justifica la liberación de Alemán ni el sobreseimiento de Zapana”, dijo la abogada.

Por otra parte, la representante legal de los familiares de la víctima, se refirió a la situación procesal del comisario Alemán y del “patovica” apodado “Chicago”.

“Estas personas estaban detenidas con pruebas que el fiscal consideró que se vinculan al hecho. Habría que ver si esto fue la razón por la que Romina Aramayo fue asesinada y si no existe vínculo entre todos los acusados. Por otra parte siempre estuvo planteado que hubo más de una persona involucrada en el femicidio”, dijo.

Además la abogada manifestó que a través de lo que surgió del expediente, Nicolás Villarroel ocultó información, omitió declarar ante el fiscal el diálogo que mantuvo con su expareja, momentos antes que desapareciera.

Por otra parte la querella solicitó como testigo a esta persona que sería arquitecto, que en teoría Aramayo debía reunirse ese día, a las 14 hs y recibir el dinero, para dar fe de esta hipótesis, puesta en los requerimientos por el ahora imputado.

Sobre los hechos

El cuerpo de Romina Magali Aramayo fue hallado en la mañana del 10 de abril del 2014 muy cerca del predio del dique Los Molinos, luego de estar desaparecida desde el 4 de ese mes.

Presentaba avanzados signos de descomposición, por lo que no pudo ser identificado de inmediato. Aramayo sufrió múltiples golpes en su cuerpo y quedó comprobado que fueron al menos dos atacantes, y su causa de muerte fue politraumatismos y traumatismo encéfalo craneano luego de ser abusada sexualmente. 

Nicolás Villarroel era pareja de la joven y está acusado de ser el supuesto autor del delito de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la participación de dos o más personas” y “homicidio doblemente agravado por la violencia de género en concurso real”, calificación legal que tiene pena prevista y penada de prisión perpetua.

 

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