Un proyecto interinstitucional que se desarrolla en la Escuela Agrotécnica 7 "Ingeniero Ricardo Hueda" de Perico, avanza con éxito en la experimentación de formas para recuperar el suelo de cultivo del tabaco, con alternativas ecológicas. La iniciativa cobró interés del Fondo Especial del Tabaco, cuyo actual administrador, José Vilariño, visitó las 4 parcelas expresando su apoyo.
inicia sesión o regístrate.
Un proyecto interinstitucional que se desarrolla en la Escuela Agrotécnica 7 "Ingeniero Ricardo Hueda" de Perico, avanza con éxito en la experimentación de formas para recuperar el suelo de cultivo del tabaco, con alternativas ecológicas. La iniciativa cobró interés del Fondo Especial del Tabaco, cuyo actual administrador, José Vilariño, visitó las 4 parcelas expresando su apoyo.
Por un pedido expreso de visitar las parcelas de experimentación, el pasado sábado llegó a la Agrotécnica Hueda de Perico el administrador Nacional del Fondo Especial del Tabaco, dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de Nación, José Vilariño. Recorrió la zona junto a los coordinadores de este proyecto Rubén Sato y Rainer Kunz, quien explicó que "el Fondo Especial del Tabaco está interesado y colaborando con esta iniciativa".
La visita supone una valoración del proyecto, que surgió por una preocupación genuina de recuperar suelos, en este caso de tabaco y poder crear conciencia entre los productores, de la necesidad de cuidar el suelo considerado un "ser vivo" por la Organización de las Naciones Unidas de la Alimentación y la Agricultura, conocida como FAO. "Tenemos que acordarnos de la sabiduría de los originarios, el 1 de agosto le damos de comer a la Pachamama, pero hay que hacerlo en serio. Los suelos están en mal estado, la FAO registra que los suelos agrícolas llevan entre un 20 a un 60% de degradación", explicó Kunz.
Por ello en las parcelas de experimentación trabajan en la recuperación de suelo en que se produce tabaco cada año sin incorporar nada, y experimentan agregando humus de lombriz, y mientras se forma se agrega agua. "Eso produce un lixiviado que en jardinería se conoce como té de humus, que arrastra nutrientes, microorganismo y es un complemento", explicó Kunz.
Cuentan con la colaboración de la empresa Proyajo que con los residuos de la faena de ganado, heces, lo transforman en humus acelerando el proceso al incorporar microorganismos eficientes (ME).
Por ello en la Agrotécnica disponen de cuatro parcelas para experimentar, en una plantando el tabaco con tres toneladas de humus equivalente por hectárea, agregado de lixiviados y como único fertilizante suman nitrógeno económico que se produce en Argentina; y aclaran que no se agrega nitrógeno ni potasio.
En las tres parcelas restantes usan menos cantidad de humus, equivalente a 1 tonelada por hectarea, y agregan fertilizantes pero solo a nivel de reposición entendiendo que el productor suele poner mucho más. Se agrega también lixiviado en forma líquida en chorro al pie de la planta, con restos del humus, nutrientes y microorganismos, y "trichoderma". Esto lo produce un laboratorio en Perico, pero se puede cultivar y seleccionar las cepas, buscan cuál es la más eficiente, y lograron cultivarlo.
"Este año pusieron 1.400 kilos de abono importado para lograr 3.000 kilos de tabaco", dijo Kunz y detalló que por tonelada (tn) cuesta 1.000 dólares; considerando que no es necesario si se usan alternativas más naturales y de bajo costo.
Por ello trabajan en las parcelas buscando crear conciencia, en una extensión universitaria y educativa para adolescentes. Es una producción ecoamigable, con menos pesticidas; y promover la generación de productos ecológicos; y la necesidad de jerarquizar la agricultura con un sello agroecológico. Es un proyecto plurianual con apoyo de Unju e Inta. Tras la cosecha prevén tomar muestras de laboratorio de microbiología y edafología, analizarán la estructura del suelo, la vida microbiana y qué se logró con la experimentación. Esto supone una solución ecológica que les ahorraría a los productores el alto costo de los agroquímicos; el FET busca replicar la propuesta en otras regiones.
Otra experiencia investigada
El variable grado de degradación del suelo tabacalero que abordó en un estudio de maestría el ingeniero Raúl Colque, y que dividió en grupos, uno de monocultivo sin incorporar nada; otro de rotación de tabaco y trigo u otro cereal; otro tabaco con inmediata siembra de sorgo granífero o forrajero, que emite raíces, perforando el suelo dejando canales que ayudan a recuperarlo y producir forraje.
También explora incorporando preparados de trichodermas, que se alimentan de otros microorganismos dañinos.