Una mujer que presta servicio en el Cuerpo de Infantería de la Unidad Regional 4, seis detenidos y un patrullero seriamente dañado, fue el saldo de una violenta agresión que sufrieron los efectivos policiales de esta unidad, mientras buscaban dispersar un grupo de personas que se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas en la vía pública.
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Una mujer que presta servicio en el Cuerpo de Infantería de la Unidad Regional 4, seis detenidos y un patrullero seriamente dañado, fue el saldo de una violenta agresión que sufrieron los efectivos policiales de esta unidad, mientras buscaban dispersar un grupo de personas que se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas en la vía pública.
El violento episodio, se desarrolló durante las primeras horas de la noche del domingo en un sector del barrio San Francisco de la ciudad de Libertador General San Martín, en el departamento Ledesma.
En momentos en que los uniformados realizaban algunos recorridos preventivos por los alrededores del mencionado sector barrial, se percataron que en una de las calles se encontraba sobre la vía pública un grupo de personas consumiendo bebidas alcohólicas, entre los que se encontraba un menor de edad acompañado de otros cinco hombres.
Estas personas, al notar la presencia de las fuerzas policiales en la zona y que se aproximaron hasta ellos, comenzaron a mostrarse completamente agresivas, iniciando una incesante lluvia de piedras contra la unidad móvil en la que se desplazaban los policías.
En estos momentos, una de las policías que estaba en la patrulla, fue alcanzada por uno de los proyectiles, causándole heridas en el rostro y la cabeza, además de contusiones al resto de sus compañeros. La patrulla, por su parte, quedó con la luneta destrozada y algunos focos rotos, gracias a la violenta agresión que recibió.
Los uniformados, solicitaron entonces ayuda y refuerzos para repeler el ataque de los malvivientes, a quienes luego de la llegada de otros policías, recién pudieron demorar.
En total, unas seis personas fueron detenidas, todos hombres y entre quienes se encuentra un menor de edad. Los demorados por las fuerzas policiales, fueron trasladados a la Seccional 39º.
En tanto que los policías heridos fueron atendidos por el personal del servicio ambulatorio, no siendo necesario el traslado de ninguno hasta un centro de salud más especializado para tratar alguna herida.
El móvil policial, sufrió serios daños, debiendo estar en servicio por algunos días, con lo que significa para las unidades perder el medio de transporte necesario para acudir a algún llamado de emergencia.
Finalmente, se procedió a realizar la denuncia correspondiente por parte de los policías en contra de los agresores por las heridas causadas, además del destrozo del móvil en cuestión.