Con gran sentir, la comunidad de San Andrés Apóstol de San Pedro celebró las Bodas de Oro de la parroquia, con una celebración que se realizó en el templo ubicado en el barrio Providencia y que fue presidida por el flamante párroco Marcelo Churquina. Hasta allí, llegaron las comunidades de las distintas capillas y grutas que pertenecen a la jurisdicción, fue un momento especial en el que se compartieron relatos de los pioneros y marcó el inicio del Año jubilar, que se extenderá hasta el 15 de abril del año próximo. El templo se vistió de fiesta para tan significativa celebración, donde se cumplió con el protocolo sanitario obligatorio.
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Con gran sentir, la comunidad de San Andrés Apóstol de San Pedro celebró las Bodas de Oro de la parroquia, con una celebración que se realizó en el templo ubicado en el barrio Providencia y que fue presidida por el flamante párroco Marcelo Churquina. Hasta allí, llegaron las comunidades de las distintas capillas y grutas que pertenecen a la jurisdicción, fue un momento especial en el que se compartieron relatos de los pioneros y marcó el inicio del Año jubilar, que se extenderá hasta el 15 de abril del año próximo. El templo se vistió de fiesta para tan significativa celebración, donde se cumplió con el protocolo sanitario obligatorio.
Fue singular el gesto de la feligresía al obsequiar una gran torta de cumpleaños, que fue llevada hasta frente al altar con el aplauso y el canto del feliz cumpleaños que fue coreado por todos.
"Que este Año jubilar nos permita a nosotros como parroquia San Andrés poder descubrir nuestro centro y fundamento que es Jesús en nuestras vidas, haciendo memoria agradecida por cada una de las personas que han pasado y que fueron un eslabón precioso para la evangelización dentro de la comunidad, comenzando con el padre Miguel Ángel, que fue un signo de Dios en su tiempo, los distintos sacerdotes, religiosas y religiosos, laicos que han pasado", dijo en su homilía el párroco.
Cabe acotar que la gran fiesta de la parroquia San Andrés siempre se celebró en el mes de junio, fecha en la que el padre Miguel Ángel Aquino tomó posesión como párroco, dejando ya de ser colaborador de monseñor Sixto Villoldo para pasar a pastorear en su propia parroquia, a la que se le impuso el nombre de San Andrés Apóstol y que, por aquel entonces, tenía como sede la capilla Nuestra Señora de Fátima, ubicada en el barrio Belgrano. La erección a parroquia se realizó un 15 de abril de 1971 y fue dispuesta por el obispo José Miguel Medina.
El nuevo párroco, con el deseo de conocer la historia de la parroquia a la luz de los documentos históricos, se trasladó hasta el obispado, solicitando el documento de la erección a parroquia, la secretaria canciller, recibiendo de manos de la secretaria canciller una copia fiel del mismo. De esta manera, en medio siglo de vida, este año es la primera vez que se celebra la creación de la parroquia, ya que las restantes se realizaron en el mes de junio. El padre Marcelo Churquina sostuvo que por la proximidad de la fecha y para que forme parte de las importantes celebraciones, se realizó un triduo, con una misa solemne, oportunidad en tuvo lugar el lanzamiento del Año jubilar. En ese sentido, explicó que durante todo el año se realizarán distintas actividades, se trabajará en recopilar fotografías y relatos de las capillas y se pondrá énfasis en la refacción del templo de la sede parroquial, para lo cual convocó a toda la comunidad sampedreña.