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Luis Chañi, toda una vida entre tijeras, música y enseñanza

Está entrevista se realizó el 21/06/21, en la tradicional peluquería de calle Salta, donde brindaba clases de guitarra. 
Sabado, 19 de junio de 2021 18:49
LUIS CHAÑI/ EL QUERIDO MÚSICO Y PELUQUERO DIO DETALLES DE SU GRAN HISTORIA.

"Lo que le falta a la Selección es pasión", decía con una fuerte convicción en la voz don Luis, mientras don Raúl se acomodaba desde el sillón vintage Standard en la peluquería de Salta al 1100.

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"Lo que le falta a la Selección es pasión", decía con una fuerte convicción en la voz don Luis, mientras don Raúl se acomodaba desde el sillón vintage Standard en la peluquería de Salta al 1100.

Como listos para la foto, peluquero y cliente inmortalizaron el momento, mientras bromeaban y -en un diálogo compartido a los cuatro vientos- se ponían de acuerdo para sacar a la luz la complicidad puesta de manifiesto.

Se miraron, se escucharon, se respetaron. Y así compartieron como otras veces, entre cortes y spray; sin actuar demasiado, solo con movimientos finos que terminaban por cambiar una fisonomía del visitante gracias a la habilidad en las manos del anfitrión que desplagaban vasta experiencia.

LUIS CHAÑI/ EL QUERIDO MÚSICO Y PELUQUERO DIO DETALLES DE SU GRAN HISTORIA.

Luego de una despedida cordial, el hombre de las tijeras dejó ver su historia de manera transparente, contándola con ánimo alegre a través de una lucidez magnífica a sus ochenta y ocho años.

El eje de su labor artesanal fue acaso la llave para abrir puertas a posibilidades nuevas e inimaginables en su vida. Un trabajo que a sus trece, le comenzó a dar todo lo bueno que anhelaba gracias a una dinámica muy especial. Ya con el delantal colgado y presto, las ganas de develar los secretos mejor guardados a más de cuarenta años de oficio, comenzaron a hacer de las suyas y Luis Chañi se decidió a desempolvar recuerdos y épocas que a través de sus palabras brillaron con una fuerza indiscutida.

"Mi historia con la peluquería comienza en el año 1945, cuando terminé el primario y me incorporé a ello, empecé como ayudante de mi papá y ya en el '47, él muere. Es entonces que tomé el mando en lo que es el trabajo", comentó Luis que fue una suerte de maestro para Foro y Amaranto. Juntos, encontraron la respuesta en el oficio y, en el querer trabajar, unieron voluntades con hermandad digna para resaltar el don que su padre Nicanor Chañi les había legado desde Purmamarca. "A la par del trabajo, nos gustaba la música. De chico frecuentaba en las escuelas bailando folclore y ahí también aprendí a tocar la guitarra", contó Luis mientras cada hermano se hacía fuerte en caminos de quenas y charangos que iban marcando el ritmo.

A lo aprendido en su niñez, lo transformó en enseñanza y cerca del año 1950; los hermanos Chañi, fueron haciendo de su peluquería un escenario donde la magia musical nacía en folclore. Con el tiempo llegaron las presentaciones, la mayoría de esencia solidaria y para lucir el talento elegido por ellos mismos, adquirido con el ensayo cotidiano.

LOS HERMANOS SEAN UNIDOS/ MEMORABLE IMAGEN DE LOS CHAÑI, EN CONJUNTO.

"Comenzamos a dar clases a los chicos, con los hermanitos Chañi que son mis hijos", indicó Luis, emocionado, como dando a entender que la energía estaba lista para cumplir con la misión en un clima ameno para lo que finalmente sería un desfile de músicos en generaciones nuevas. Así, organizaron a ojo de criterio humano y con sus propios hijos, la tarea de instruirlos en el arte musical. Ellos, sus retoños, hicieron carrera al igual que hijos del corazón fueron aquellos que se transformaron con el tiempo en grandes músicos. "Aquí entraban clientes, los atendíamos siempre con respeto y eran un público de los nuevos talentos. Muchos han tenido suerte, han salido conjuntos grandes como Los Tekis, Luna Jujeña, Bruno Arias, Daniel Magal, nosotros ahora seguimos haciendo lo que siempre: nos dedicamos a enseñar", contó el gran Luis, recorriendo su salón con una mirada brillante de amor sostenido. Y es que la peluquería -finalmente- es una escuela pero de la vida, un aula espejada, donde gente transita como avenida y -en simultáneo- las notas brotan para ser música pero antes que nada, un lugar que atesora lindos recuerdos llenos de carnavales, peñas; y encuentros vividos con historias de niños hoy convertidos en hombres. "La peluquería es un oficio muy lindo, muy noble que nos dejó nuestro papá de raíz. Nosotros somos peluqueros que fuimos siguiendo la moda, a veces con pelo largo, pelo corto, pelados", aseguró Luis, que prefiere más hacer el corte clásico; a su gusto, el más artístico. Los Chañi tuvieron clientes predilectos en otras épocas, cortaron el pelo a niños de hospitales, a estudiantes del Colegio del Salvador, trabajaron en el ejército haciendo incorporación y también en los casinos.

LOS HIJOS DE LUIS/ JOSÉ Y SOFÍA SON "GUARDIAS" QUE LO CUIDAN SIEMPRE.

Así infinidad de historias de vida pasaron por la peluquería, mientras se perfilaban looks, la música a la par era motivación de mini conciertos en la intimidad de un espacio puesto al servicio entre tijeras, charangos, peines, bombos, guitarras y batas, pero sobre todo, una buena compañía; algo de lo que Luis Chañi se siente muy orgulloso.

Distinciones

Antes de autodenominarse "Cacique de los Chañi", Luis recordó algunos reconocimientos de los bueno que a lo largo de su vida recibió junto a sus hermanos. El Congreso de la Nación los reconoció como patrimonio de Jujuy, tienen la plazoleta sobre calle Salta y Senador Pérez denominada "Hnos. Chañi", así como el privilegio de ser los primeros folcloristas del Enero Tilcareño y ser los fundadores del Festival del Quesillo en San Antonio, además de formar parte del primero de los festivales de la Pachamama en Purmamarca y del Tantanakuy de Humahuaca. 

Está entrevista se realizó el 21/06/21, en la tradicional peluquería de calle Salta, donde brindaba clases de guitarra.