El Tribunal en lo Criminal Nº 1 condenó a un hombre a la pena de 14 años de prisión efectiva, luego de que se comprobara que abusaba de su propia hija de 11 años, hechos ocurridos en la ciudad de San Pedro de Jujuy.
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El Tribunal en lo Criminal Nº 1 condenó a un hombre a la pena de 14 años de prisión efectiva, luego de que se comprobara que abusaba de su propia hija de 11 años, hechos ocurridos en la ciudad de San Pedro de Jujuy.
Además revocó la prisión domiciliaria que cumplía el condenado y ordenó su inmediato traslado al Servicio Penitenciario provincial del barrio Gorriti.
Asimismo autorizó que una vez firme y consentida la sentencia, se obtengan los perfiles genéticos del condenado a los efectos de su incorporación al Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a Delitos contra la Integridad Sexual.
El veredicto fue emitido por los jueces Luciano Yapura (presidente de trámite), Felicia Barrios y Alejandra Tolaba y fue dado a conocer en la última audiencia del juicio oral que tuvo lugar en la jornada de ayer.
Sobre los hechos
Tres fueron los hechos delictivos por los que el hombre que padece una discapacidad visual, fue sometido a juicio acusado.
El primero ocurrió durante el 2017, en los meses previos a las vacaciones de invierno, cuando la víctima, una niña de 11 años, se encontraba en compañía del acusado, quien es su padre, en el interior de una vivienda de la ciudad de San Pedro de Jujuy.
Aprovechando la ausencia de la madre de la víctima, el inculpado atacó sexualmente a su hija, según las declaraciones en Cámara Gesell.
El segundo de los hechos, sucedió en los primeros meses del 2017, cuando el imputado aprovechó nuevamente la ausencia de su mujer, bajo amenazas atacó nuevamente a su víctima, situación que se repitió en más de una oportunidad en el año 2018 cuando la niña ya contaba con 12 años.
El último delito por el cual fue juzgado el hombre no vidente, sucedió durante el 2018, en los días previos a las fiestas de fin de año, cuando la niña tenía 13 años y cursaba el primer año de la secundaria.
El hombre llamó a la niña a su habitación y tras ingresar, la arrojó sobre la cama e intentó accederla carnalmente. La víctima se defendió con golpes y patadas y logró escapar del lugar para encerrase en su habitación.
Tres hechos fueron probados en Cámara Gesell, pero hubo más que fueron desestimados en la investigación penal preparatoria y el hombre fue condenado por ser hallado penalmente responsable del delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por ser cometido por ascendiente y aprovechando la situación de convivencia con una menor de dieciocho años en grado de tentativa (dos hechos), en concurso real con abuso sexual con acceso carnal agravado por ser cometido por ascendiente y aprovechando la situación de convivencia con una menor de dieciocho años".
Otro dato que no es menor, es que a la denuncia la realizó una tía de la víctima, no su progenitora, que según se supo, optó por desestimar los pedidos de ayuda de la niña.
Sobre los alegatos
Como fiscal de Cámara ante el Tribunal se desempeñó Marcelo Cuellar, quien en sus alegatos solicitó la pena de 16 años de prisión para el acusado, mientras que el querellante, Cristian Molina, del Consejo Provincial de la Mujer e Igualdad de Género, requirió la pena de 20 años de prisión.
Por su parte Juan Pablo Canetti, Defensor Oficial del Ministerio Público de la Defensa Penal, pidió 3 años de prisión para su defendido.
Los fundamentos de la sentencia serán dados a conocer dentro del plazo establecido por el Código Procesal Penal de la provincia, a partir de lo cual las partes podrán recurrir ante una instancia superior al Tribunal de juicio.