-¿Cómo se encuentra el sector gastronómico?
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-¿Cómo se encuentra el sector gastronómico?
-Está bastante complicado, sacamos para pagar las cuentas. No es un año para hacer ganancias, no es para cambiar el auto. Y estamos arrastrando y tratando de pagar las deudas del año pasado, que la mayoría de los negocios registrados tiene, ya sea con Afip, ya sea con sus empleados o con algún tipo de crédito que se tomó en su momento para solventar otros gastos.
Al no tener el Gobierno previsibilidad, uno creía que se habilitaban las cosas en algún momento, y nunca llegamos a reactivar el sector completamente, y eso es lo que estamos necesitando. Porque en estos momentos, si bien se nos permite trabajar a un 50%, los costos no han bajado al 50%. Los costos siguen siendo los mismos, y nos están superando las ventas, a veces hasta diarias. Entonces, en general, estamos mal, esa es la palabra, mal. Porque por ejemplo uno tiene la habilitación para 80 personas por bomberos, pero no podemos trabajar con las 80 personas.
Estamos trabajando en el mejor de los casos con 60 personas, por el distanciamiento interno, por los persistentes controles, porque a la hora de una inspección, la idea del inspector de turno, de la Policía, es en función de la normativa vigente. Entonces trabajamos con mucho menos personal, con menos clientes, y además de eso, se nota mucho la capacidad de compra de la gente.
O sea, no es que la gente sale y gasta mucho dinero; va, pasa la noche, pero gasta -diría- lo mínimo. Sucede que los precios van de la mano de lo que nos cuesta la bebida, abrir el negocio, el hielo, el alcohol, el papel, los costos mismos de la noche, del personal, luz, sacar para el alquiler y todo lo demás, entonces, los trasladamos a los precios. La gente gasta más por los precios, no hay mayor poder adquisitivo.
Quiere salir, pero no dan los bolsillos. Si uno tiene en cuenta que el 50 o 60% de Jujuy cobra el salario mínimo, es poco probable que la gente salga. Eso como panorama general, pero después particularmente puede ser que algún negocio trabaje muy bien, pero en general estamos todos trabajando por lo mínimo, cubriendo gastos, no podemos reinvertir.
-¿Cree que con el pase sanitario van a mejorar las condiciones o todo está condicionado al poco poder adquisitivo que menciona?
-Creo que vale la pena que toda la población se vacune, que minimiza el riesgo, pero que eso mejore la situación de un bar, de un cine, un teatro, una biblioteca, el shopping, que se abra todo, ese es el tema. Porque si vamos a seguir con restricciones y la población vacunada, ahí sí le diría que la vacunación no sirvió para nada, porque lo que está rigiendo es una norma política, no sanitaria.
-¿Se recuperaron puestos de trabajo luego de las primeras restricciones?
-Hay casos particulares. Por ejemplo, Borrasco trabaja con todo su personal, no hemos echado a nadie, pero no les podemos completar el sueldo. Hay un temita con Rentas, Afip, uno gana como si fuera un empleado más. Hay gente que echó personal, y que genere nuevas fuentes de trabajo es imposible. Lo que dijo hace unos días un secretario general de un gremio, que se recuperaron puestos de trabajo porque se abrieron nuevos comercios, es porque esa persona desconoce de economía.
Cualquier nuevo negocio que se abre, viene con una inversión y con un dinero en el bolsillo de resguardo por los próximos meses para pagar alquiler, empleados, luz, esas cosas. Después de hacer un primer balance, después de los primeros seis meses o al año, recien se ve si un negocio es rentable o no. Entonces no se puede decir que cuando abre un negocio se está reactivando todo.
Aquí lo que se tiene que reactivar es el consumo y eso lo va a reflejar la gente a la hora de gastar. Cuando un negocio abre no significa que la economía esté mejor, abrió con plata en el bolsillo gracias a una inversión, a un ahorro, plata para los empleados, para el negocio para unos meses, eso es una generalidad. Cualquier indicador de que esto sea bueno no hay que creerlo, porque se trata de una temporada, un momento del año. Hay que hacer proyecciones no de un fin de semana. Por ejemplo, yo ya estoy proyectando cómo va a ser la Fiesta de los Estudiantes, que dura una semana o diez días.
Estamos proyectando qué tipo de emprendimiento hacer, promociones, etc., y pasada esta fiesta apuntamos a fin de año. Y esas son las verdaderas proyecciones que hace un empresario. Hace unos días escuchaba lo que decía el ministro Posadas del turismo en la provincia, y realmente solo un sector hotelero trabajó bien. La hotelería en la provincia no existe, existe una región en Jujuy que se dedica al turismo, es la región de la Quebrada, pero el resto de la provincia no trabaja bien con el turismo. Es un sector en particular de la hotelería, y lo mismo ocurre con la gastronomía, con el expendio de las bebidas alcohólicas, los bares, teatros, etc., hay sectores que pueden trabajar bien, pero no es una generalidad en toda la provincia.
-¿Tiene expectativas en el plan para aumentar el consumo?
-A ver, emitir moneda ya es un problema en este país con la inflación que tenemos. Pero el otro tema es que la gente no sabe qué va a consumir. Uno hace una propuesta de consumo nada más. Después que la gente la acepte y acepte el riesgo de endeudarse es otro tema. Por ejemplo, yo hoy puedo tener la posibilidad de cambiar el auto, pero no sé qué va a pasar el año que viene, qué cuotas voy a pagar.
La mayoría de la gente tiene esta misma visión. Es decir, no sé qué va a pasar dentro de tres meses. O sea, me puedo endeudar en un plan cortito porque mi previsibilidad es, por ejemplo, de acá a después de una semana después de las elecciones, pero después yo no sé qué va a pasar. Entonces, sugestionar a la gente de que pueda comprar algo y quedar en el debe, no se qué es lo que se pretende. Otro ejemplo, es una chica que quiere comprar zapatos o un vestido para salir, si no puede hacerlo.
Con las restricciones también se está impidiendo consumir lo que uno quiere. Ese es el tema. Entonces, acá hasta que no se libere para tener una vida relativamente normal, todo plan que sugestiona de alguna manera a la gente a consumir es para generar dinero, gastos. Descreo del incentivo al consumo, porque realmente cuánta plata más le van a poner al bolsillo de la gente.
O sea, si me van a decir que el sueldo promedio lo van a elevar a 50 mil pesos, es una cosa, pero si se va a seguir manteniendo en un básico de 18 mil pesos, porque todos los demás son adicionales, ese es otro tema. Es decir, el salario real que va por ley está en el orden de los 16 o 17 mil pesos, y todo lo demás son los adicionales que completan los 26 mil pesos.