Dos cazadores furtivos que habían violado disposiciones que prohiben la caza de animales en peligro de extinción fueron sorprendidos con 45 cueros de vicuñas al noroeste de la Puna jujeña.
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Dos cazadores furtivos que habían violado disposiciones que prohiben la caza de animales en peligro de extinción fueron sorprendidos con 45 cueros de vicuñas al noroeste de la Puna jujeña.
Un cómplice del detenido logró darse a la fuga y en el operativo además de los cueros secuestraron un arma calibre 22.
La detención fue producto de un operativo de control por áreas limítrofes con el vecino país de Bolivia, informaron desde el departamento de prensa de la Policía de la provincia.
Uno de los hombres, de nacionalidad boliviana, fue demorado mientras que el otro logró darse a la fuga, según se dio a conocer tras el procedimiento realizado el pasado viernes en inmediaciones de un espejo de agua conocido como Laguna de Vilama.
El hecho tuvo lugar alrededor de las 19, en momentos en que los efectivos del Cuerpo de Infantería de la ciudad fronteriza de La Quiaca realizaban recorridos por el lugar y alcanzaron a visualizar a dos individuos que transportaban bultos en tres asnos.
Al percatarse de la presencia policial, los cazadores se dieron a la fuga, pudiendo ser aprehendido solo uno de ellos a metros del lugar.
Posteriormente, tanto el hombre como la carga fueron llevados a un destacamento policial en cercanías, de la localidad de Lagunillas de Farallón, donde en presencia de testigos se procedió a la apertura de lo secuestrado, constatándose que en el interior de los bultos se hallaban la totalidad de 45 cueros de vicuñas.
Entre otros elementos, según se informó finalmente, también se hallaban cartuchos de arma de fuego calibre 22, por lo que el hombre aprehendido quedó demorado en la dependencia policial a disposición de la Justicia.