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La hazaña final de Miguel Russo contra Marcelo Napoleón

Viernes, 20 de agosto de 2021 17:00

Por Julio Suse

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Por Julio Suse

En Boca la cosa venía bastante fulera. Tres días antes del Super, Riquelme fue a ver a Miguelo...

–Conseguí lo que me pediste Migue...

–Decime que Roger Martínez es nuestro...

–Mmmmm, no, no precisamente, pero conseguí un brujo nuevo, un brazuca que "promete bastante", para salar a Gallardo. Se trata del Pai Gilberto: exbrujo del Gremio de Porto Alegre temporada 2011. Hace magia vudú con muñecos (se entiende ¿no?) y también videncia. Exorciza arqueros y árbitros. Es el brujo actualmente del Paranaense. Aceptó dólar oficial.

La llegada del Pai se produce luego del fallido trabajo de Carlos "El Mágico" Oliva, que pronosticó una victoria del xeneixe 4-0 en la vuelta de las semifinales de la Libertadores 2019 (le erró por tres goles).

Miguelo, un bilardista de la primera hora (nunca olvidar ese detalle para entender por qué Boca juega horrible), se emocionó hasta las lágrimas, levantando los ojos al cielo, recordando las hazañas de Juan Carlos Kiricocho, un personaje al que le faltaban algunos caramelos en el frasco, pero que el doctor Carlos Salvador utilizaba en su Estudiantes bicampeón para lechucear a los rivales.

“Además llegó el transfer del peruano, así que está a disposición” señala el vice. “A propósito... parece el hijo de Tyson ¿viste? Creo que les va a costar subir por el carril izquierdo”.

Miguelo, un estudioso de la histórica batalla de Waterloo, decidió no adelantar la formación inicial. “El muñeco cree que jugaremos con cinco en el fondo, o con seis, pero ya vas a ver el chasco que se lleva” dijo, blandiendo su dentadura enceguecedora.  “Vamos a jugar con Rossi, el peruano de cuatro, Zambrano, Izquierdoz y Rojo, y Sandez por izquierda”. “Dijiste con cuatro” le espetó Riquelme. “Justamente, lo pongo a Zambrano, riñones” expresó haciendo un gestito de idea. Explicó que jugarían con Rolón y el Pulpo de dobles 2 y 6, Ramírez de 5 y una potente delantera con Briasco y Pavón. Riquelme asintió, preguntó si hacía falta videos sobre catenaccio, “mirá que estos tiran tacos en el área, hacen firuletes, atacan con seis o siete, están afiladísimos” dijo. “No preocupeishon, está todo fríamente calculado”, lo tranquilizó. Consultado, el brujo planificó dos planes, A y B. El A sería un trabajo con sapos destripados y sahumerios sagrados para que Suárez no se recupere. El plan B, rezar y lograr que llueva torrencialmente, entonces el partido se jugaría en cancha mojada (somos mejores en “lucha en el barro”) o se pospondría para una fecha FIFA (“ahí River pierde a siete, el brujo está en todas” dijo el vice). Finalmente el Pai Gilberto optó por la macumba clásica sobre un muñeco con la carita de Suárez. “No te olvides de llamar al estilista para platinar a Briasco o a Orsini” dijo Román antes de despedirse.

En el campamento napoleónico las cosas estaban mucho más claras. “Acá no hay secretos, tampoco voy a poner seis defensores para sorprenderlos” dijo Marce.  “Lo nuestro es el sistema, la nobleza de una marca indeleble en el tiempo, la esencia de la escuela riverplatense que juramos no traicionar” discursea ante sus guerreros (se nota que está haciendo el secundario acelerado, en este momento le toca literatura). La muchachada lagrimea, el muñeco refuerza el concepto “sobre nuestras memorias se erigen las figuras de La Máquina, La Saeta rubia, Don Angelito, Amadeo Carrizo, El Pelado, El Bamb... (traga saliva), El Enzo, El Burrito, vamos River carajooooooo”. Los players se emocionan y abrazan. Hasta Suárez salta y hace hurras –hace un mal movimiento, se le agrava la lesión, le adicionan tres días más de reposo-.

Boca ganó solo uno de los últimos trece. Moralmente le ganamos a Mineiro, pero perdimos. Hicimos un solo gol en siete encuentros. Somos claramente un equipo en deformación.

River Champagne es el equipo mas ofensivo de Sudamérica. En el plano local es el más goleador con nueve. Líder en remates al arco rival (70) y también en pases en el último tercio de la cancha (264). Es el equipo con la mayor posesión de pelota (63%) y el que más pases generales realizó (2090) en las primeras cuatro fechas del torneo local. Viene de apabullar a Unión y Lanús.

Todo aquello me sume en una leve depresión (también por el avistamiento del resúmen de la tarjeta de crédito). Siento angustia. Estoy a punto de leer algo de Paulo Cohelo. Mejor no. Se me ocurre una acción desesperada, lo llamo al colega Álvaro Tejeda, de los más bravos entre los que profesamos la religión boquense. Quiero escuchar un mensaje esperanzador “LE TENGO MUCHA FE”, pontifica convencido. La depre cede un poquito. Tiene razón. Pongamos el colectivo y que sea lo que Dios quiera. Salgo a la calle, creo ver la silueta del Diego en una nube.

Uso la cábala del maracanazo. La mando a mi vieja a la pieza. Se resiste. Ma si, “esta noche ganamos aunque sea de pedo” intento autoconvencerme. No me lo creo, o sí.

Entran los jugadores al campo de juego. En el túnel El Cali se toca la zona genital. ¿Cábala? No. Huevo escaldado.  "Tiene que ponerse Macril" dice mi vieja. Tira la frase antigallina reglamentaria “les veo cara de asustados”. A la pelota la transporta un autito eléctrico, Miguelo se corre a dos metros. No quiere sorpresas. Se le acerca a Briasco, el blondo espera una frase referida a Palermo, Russo lo sorprende “hoy te convertís en Guerra” (los más chicos no se acuerdan, el del gol de nuca para ganar un partido de pedo). “No te hagas el loco, no sos Palermo, ojo con pasar la mitad de la cancha, jugá de doble cinco con Ramirez”. Se le acerca a Advincula, “usted sabe lo que tiene que hacer”. “Sí, mister, proyectarme por el lateral”. “No, no entendiste, cagalos a patadas”. Napoleón mira el cielo con los ojos llorosos, muy conmovido. ¿El recuerdo de su madre? No, siente que Cruyff está mirándolo.

Aguante corazon aguante, comienza el partido!!!

Boca parece mejor parado. Ramírez manda con la redonda. River comienza a usar el sistema de “hacha” escalonada. El billo con un doble cinco, el volante central arquero y Zuzu zucu te voy a dar (aunque el genial Napo lo transformó en un cinco que pisa el área contraria, cuando pensaba dejar el fútbol).

Minuto tres: Mejor comienzo de Boca, dos jugadas ofensivas de Advíncula con sendos centros.

Minuto siete: Primer avance de River luego de un comienzo intenso del xeneize. Marcos Rojo corta jugada peligrosa de "Romero". Rojo con el pecho henchido. ¿Orgullo por los colores? Noooooo. Cobró dos sueldos sin lesionarse.

Minuto once: Buen pase de Ramírez hacia Pavón, Armani tiene que salir fuera del área para repeler el ataque. Bah, era Pavón. “Ataque”. No exageremos.

Minuto 15: Gallardo le pide nervioso a Julián Álvarez que encare a Advíncula. Prefiero ir por el centro y tirar diagonales, le dice. El miedo no es zonzo.

Minuto 21: Amarilla para Enzo Pérez, que no pudo agarrar y fuleó de atrás a Ramírez. Primer amonestado. Ramírez aprovecha para pedirle la camiseta para cuando termine. A Enzo Corazón lo queremos todos.

Minuto 23: Progresión en la cancha de Boca a fuerza de recuperación y pelotazos. Llegamos tres veces seguidas a tres cuartos. Russo dice “ojo, no seamos loquitos. No abusemos del jogo bonito”. Lo nuestro no es champagne. Es tinto sodeado.

Minuto 30: Bochazo de Armani para Álvarez en tres cuartos, se la da a Romero que le devuelve el pase a espaldas de Advíncula, corrida de Izquierdoz, que se pasa de largo. Disparo al centro del area, la toca Rossi y le rebota a Romero abajo del arco. Salvada de Diego, no se ve pero está.

Finalmente,  cuatro futbolistas millonarios se fueron al vestuario amonestados: Enzo Pérez, Díaz, Montiel y Martínez. Debieron cortar con falta cada vez que Boca sorteó su mediocampo. Tres de esas cuatro amarillas fueron generadas por Ramírez.

Termina el primer tiempo. Resultado moral: River 1 – Boca 0.

Minuto 46: Gran jugada de Paradela por izquierda, pase al medio para Romero, Izquierdoz se arroja de espaldas, y la pelota le queda a Zuculini que remata al centro del arco. River 2 – Boca 0  (moralmente hablando).

Minuto 53: Planchazo de Marco Rojo sobre Álvarez (su espalda). En occidente es roja directa. En el sistema Vangioni Funes Mori ¡siga! ¡siga! Después nos enteramos que el hijo de Marquitos es fanático de la serie Cobra Kai.

Minuto 78: La pierde Varela en el medio, River la recupera con Álvarez que se la da a Romero, remate del delantero y pelota apenas ancha. Nuevo casi gol. Rossi queda tirado en el área. Miguelo le dice, “no te apures, cuida el fisico que se viene Patronato”. El muñe protesta, dice que los otros (no nombra al ex club) hacen tiempo.

Minuto 83: Trepada de Angileri por izquierda, centro a la olla, Boca defiende con ocho, entre tres terminan sacándola.

FINAL DEL ENCUENTRO ¡TENEMOS PENALES!

Se realiza el sorteo. Gana Armani. Dios es de River. Armani elige que Boca comience pateando. No dije nada.

Va Marcos Rojo. Armani hace una mueca. Sin el matafuego no es tan intimidante. Contra Mineiro pateó perfecto. Gol de Boca. Marquitos mira desafiante a hinchas de River en la tribuna. Piensa una guarangada relacionada con Roto.

Primer penal para River. Va Julián Álvarez. Se lo ve nervioso. Rossi tentado de hacer la gran Dibu. Se arrepiente. Atajadón.

Va Ramírez para patear el segundo (está tranquilo, jugó un gran partido y ya tiene turno para que le arreglen el diente, igual no lo quiso mostrar por que es coqueto). Golazo. Lo grita pero pone el perfil con el comedor sano.

Va Braian para confirmar que es el sucesor de Rafael Santos. Le erra al arco. Rafael lo consuela en Instagram. "Sos crack Braian".

Patea Pavón. Se lo ve a Cardona rezando de rodillas (es muy religioso). Pavón le hace un gesto al DT (¿Si convierto ganamos?). Miguelo le sugiere usar los dedos para contar. Rompe el arco.

Va Martínez. La clava al ángulo. Hay vida.

Va El Cali. Cardona promete no pisar nunca más un boliche si pasan a River. Dios no le cree. Gol. Resultado mentiroso. Debió ser 3-0.

Miguelo deja frase para la posteridad: "Prefiero que vibre el corazón y no el celular". Temía el despido por mensaje de texto. "Esto es Boca carajo".