Si bien hay sectores que buscan que se abran las fronteras para incentivar el turismo internacional, en Jujuy los prestadores encuentran que el "cuello de botella" es la conectividad y consideran que si abren, debe ser planificado. Otro sector considera que el turismo regional vino para quedarse y que es una buena alternativa de desarrollo.
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Si bien hay sectores que buscan que se abran las fronteras para incentivar el turismo internacional, en Jujuy los prestadores encuentran que el "cuello de botella" es la conectividad y consideran que si abren, debe ser planificado. Otro sector considera que el turismo regional vino para quedarse y que es una buena alternativa de desarrollo.
Mientras un grupo de cámaras de turismo y asociaciones de guías de Córdoba, Chubut, Chaco, Santa Fe, y Santiago del Estero piden al Ministerio de Turismo de Nación la apertura de frontera y llegada de turismo internacional, asegurando que Uruguay y Chile lo hicieron, en Jujuy la mirada es diferente. Se considera que para hacerlo es necesario una planificación que dure en el tiempo y que se reestablezca la conectividad nacional, porque de nada serviría el ingreso de turistas del exterior si no se puede circular fácilmente por el país. Mientras otro sector ve en el turismo regional un modelo que llegó, fue beneficioso y que puede seguir creciendo.
En tal sentido, Mónica Quiroga (Cámara de Turismo de Jujuy) planteó que se abordó el tema en el sector y aunque hay gente que quiere que se abran las fronteras para incentivar al turismo internacional, hay dificultad en el acceso vía aérea, porque aún no se solucionaron las frecuencias internas de aviones.
"Es importante que se abra pero se tienen que abrir paralelamente y solucionar el problema de conexiones aéreas internas y frecuencias de vuelos en el país; porque de nada sirve que abran las fronteras si una vez que entra el pasajero no puede acceder a los puntos turísticos por insuficiencia y falta de frecuencias aéreas", explicó Quiroga.
Sostuvo que inclusive había posibilidad de ingreso de cruceros pero no tenían planificación ni se les había informado nada. Por ello consideró que en general hay "falta de certidumbre con respecto a la planificación de la apertura y las reglamentaciones que se necesitan para esas aperturas, protocolos. La falta de una circulación abierta hace que no se pueda trabajar en turismo tanto nacional como internacional", remarcó.
Se había barajado la posibilidad de que se abra a los países vecinos en octubre, pero opinan que si lo hicieran, no sabrían cómo hacer para que se movilicen dentro del país. Entienden que las frecuencias aéreas no son suficientes para cubrir el mercado nacional, con lo cual si se abrieran las internacionales, tampoco se podrían atender, por lo que creen que se debe prever y no es cuestión sólo de abrir fronteras.
Estimó Quiroga que hace falta una planificación nacional, y con tiempo de antelación, ya que cada apertura o cierre supone dinero para el empresario.
De hecho, consultada con el "previaje" lanzado nuevamente por el Gobierno nacional, consideró que está bien para incentivar y afirmó que el sector va teniendo reservas de ese tipo, pero aún hay incertidumbre en algunos destinos.
Es que precisó que los turistas todavía deben presentar certificados de un punto a otro, ya que cada provincia tiene una regulación diferente para el ingreso y egreso, en virtud de la pandemia. "Muchas veces ese certificado para turismo no cubre", explicó, dando a conocer otro de los puntos que genera incertidumbre en el sector.
Sobre la situación del sector, señaló que el receso invernal de Jujuy para un sector no fue tan fuerte porque mucha gente hizo una "escapadita" de una provincia a otra, porque hay restricciones de circulación y no pueden venir fácilmente de otros lugares. Entonces muchos toman hoteles directamente, porque el "previaje" lo permitió al igual que solo vuelo y no optaron por paquetes programados y diseñados, por lo que estimó que no fue masivo.
"Todavía no está abierto todo, para tener libertad total para viajar de un lado a otro. Entonces siempre hay algo que no encaja, para que esa rueda funcione en forma normal y vaya funcionando a futuro. Hay salidas puntuales y volvemos a lo mismo, no se puede hacer una planificación, tiene que haber certeza a futuro", afirmó finalmente Quiroga.
Turismo de cercanía
En tanto, Ramón Aisama, de la Red de Turismo Sostenible, que incluye emprendedores de gastronomía, hoteleros y prestadores de turismo activo, consultado por El Tribuno de Jujuy consideró que la conectividad actual no incidió en el sector sino que fue el turismo de cercanía, estimando que la apertura de fronteras será paulatina.
“El impacto que están generando los pocos vuelos que tiene Jujuy es mínimo”, explicó Aisama. Consideró que en el momento que abran las fronteras será de manera paulatina, y con determinadas precauciones. Indicó que no se están poniendo las expectativas en ello, sino en el turismo de cercanía. Aseguró que tuvo éxito porque muchos prefirieron recorrer el Norte argentino, salir en familia en su propio vehículo, lo que generó impacto en las economías regionales. “Hoy la clave, de acá a un año, tiene que ver con la economía regional”, ratificó.
Es que explicó que a las agencias de turismo fue a las que más les cuesta recuperarse, porque la gente comenzó a salir en su vehículo, “encapsulada” y no en contingentes, debido a la pandemia. Sobre el “previaje” explicó que las ediciones anteriores no funcionaron y estimó que está bien que el Gobierno nacional insista para poder lograr en algún momento una participación más activa del turista.
Dijo que desconoce por qué la gente está reacia a contratar el “previaje”, pese al 50% de descuento, y estimó que puede ser por la crisis económica al entender que los costos que se ofrecen son altos, porque las agencias intermedian todos los servicios. No obstante, entiende que para las agencias aún hay mercado, y coincidió en que hay un problema en torno a la conectividad aérea.
Recordó que la temporada de invierno fue buena para ese sector por la llegada espontánea de los viajeros durante el receso invernal, y bajó en agosto al 50% de ocupación hotelera promedio, y en septiembre disminuyó más, pero se sostiene la expectativa. Recordó que en invierno las excursiones volvieron a tener protagonismo y los guías de turismo tuvieron oportunidad de trabajar con contingentes y con familias, mientras los restaurantes mejoraron su actividad. Para septiembre consideró que es clave la naturaleza y la sostenibilidad, y estimó que por ahora están promocionándolo de manera regional, que se suman fechas claves. Opinó que la actividad turística debe ser consensuada por todos los actores, desde las cámaras empresariales, el Gobierno nacional, provincial, y también emprendedores y profesionales independientes.