La llegada de Elon Musk a Twitter fue confirmada en las últimas jornadas de octubre, y desde entonces la compañía atraviesa sus tiempos más turbulentos. El empresario prevé cambios sustanciales en la red social, despidió a cerca del 50% de los empleados, y dijo que probarán “cosas tontas hasta que funcionen”. Para agregar una dosis de incertidumbre, más aún, acaba de avisar que no descarta declarar la bancarrota de la firma.
inicia sesión o regístrate.
La llegada de Elon Musk a Twitter fue confirmada en las últimas jornadas de octubre, y desde entonces la compañía atraviesa sus tiempos más turbulentos. El empresario prevé cambios sustanciales en la red social, despidió a cerca del 50% de los empleados, y dijo que probarán “cosas tontas hasta que funcionen”. Para agregar una dosis de incertidumbre, más aún, acaba de avisar que no descarta declarar la bancarrota de la firma.
Elon Musk podría declarar a Twitter en bancarrota
Un informe de Bloomberg señala que el magnate de 51 años comentó a empleados de la empresa que podría declararse en bancarrota en caso de no encontrar nuevas vías para generar ingresos.
Musk encontró un panorama financiero complejo en la firma. De acuerdo a The New York Times, recientemente tuvo que desprenderse de 4.000 millones de dólares en acciones de Tesla para emparchar agujeros en Twitter, por la que pagó 44.000 millones de dólares.
Los planes de Elon Musk para que Twitter genere más ingresos
Una de las primeras medidas del CEO de SpaceX y Tesla al frente de Twitter fue echar a más de 3.000 empleados. El empresario argumentó que esa determinación es necesaria para achicar el gasto, equilibrar las finanzas de la compañía y con ello atraer a nuevos inversores.
La decisión no es gratuita para el magnate. Exempleados presentaron una demanda colectiva, a la que se suman quejas individuales ante la justicia, entre ellas la de una mujer que fue despedida cuando cursaba el sexto mes de embarazo.
Más allá de la reducción de personal (y presupuesto asociado a esos cargos), Musk tiene en mente algunos planes para que Twitter sea redituable.
El nuevo dueño de la red social evalúa que Twitter deje de ser un servicio gratuito. En ese camino, una alternativa es el modelo freemium, que implica acceso sin pago y funciones exclusivas para suscriptores, tal como ocurre con aplicaciones como Spotify. En ese caso, la idea sería profundizar la propuesta de Twitter Blue, cuya tarifa subió a 8 dólares.
Mientras tanto, los pasos de Twitter son erráticos. El célebre check azul que se usa para verificar las cuentas pasa a ser una función paga. En los últimos días, la nueva opción apareció y desapareció de la plataforma, generando tanto desencanto como desconcierto entre los usuarios.
Además, algunos anunciantes decidieron suspender su pauta en Twitter, preocupados por las decisiones de Musk, incluyendo su ánimo de expandir la libertad de expresión en la plataforma. Esa intención es a priori loable, aunque inspeccionándola más de cerca aparecen problemáticas como la divulgación de discursos de odio y desinformación que propiciaría una moderación más laxa.