La constipación o estreñimiento es un problemática común tanto en niños como en adultos, y la mayoría de las veces es por una alimentación pobre en fibras y por carecer de un ritmo evacuatorio frecuente. También hay algunas enfermedades que producen como consecuencia el estreñimiento.
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La constipación o estreñimiento es un problemática común tanto en niños como en adultos, y la mayoría de las veces es por una alimentación pobre en fibras y por carecer de un ritmo evacuatorio frecuente. También hay algunas enfermedades que producen como consecuencia el estreñimiento.
Pero en el último tiempo se detectó un incremento en la cantidad de consultas a nutricionistas por estreñimiento en niños. Situación que se atribuye, además de a una inadecuada alimentación, a la falta de actividad física que se vio reforzada por el sedentarismo durante la pandemia.
Es sabido que muchos niños y jóvenes durante el tiempo de confinamiento acentuaron su conducta de quietud, dejando de lado las actividades al aire libre y reemplazándolas por horas y horas frente a una pantalla, ya sea viendo series y películas o bien con los videojuegos, y ni hablar de la reproducción de videos en el celular.
"La poca actividad física en los niños combinada con una alimentación con poca fibra, entendiendo que a ellos no les gusta la verdura, hizo que tenga un gran incremento en las consultas con respecto a otros años. La constipación es un problema en niños porque se sumó la poca movilidad y mucho tiempo frente a la computadora. Por eso se necesita el compromiso de todos en la familia", informó la nutricionista Silvia Pérez en diálogo con El Tribuno de Jujuy.
"La constipación es una alteración en la defecación y es uno de los motivos de consultas pediátricas más frecuentes entre 5 y 10%, alcanzando entre el 25 y el 45% de las consultas gastroenterológicas. Las causas en general son de carácter funcional y están relacionadas con factores dietéticos, sociales y emocionales", citó la nutricionista y explicó cómo combatirla y prevenirla desde la alimentación.
Un ritmo normal sería una evacuación por día, aunque hay personas que van al baño con más frecuencia como 2 o 3 veces por día, lo que es considerado también normal, aunque se debe tener en cuenta siempre la forma y el color.
"En el caso de los niños con constipación se observan heces pequeñas y redondas que muchas veces se comparan con las heces de las ovejas y por lo general son de color oscuro", indicó
La principal causa de este síntoma es una alimentación pobre en fibras y en agua, siendo la hidratación un punto clave en estos tiempos en que las altas temperaturas provocan una mayor transpiración. Además el agua limpia hidrata el cuerpo.
Las fibras que limpian el intestino están presentes en alimentos vegetales como frutas y verduras, legumbres y cereales integrales. La especialista ofreció una dieta tentativa para regularizar el tránsito intestinal y prevenir el estreñimiento.
Una dieta adecuada
"En el día tenemos básicamente cuatro comidas. En el desayuno, incorporar un vaso de agua o el jugo de una fruta exprimida con agua en ayunas, y al mate, te o leche se le debe incorporar una fuente de fibra como el pan integral o con salvado", indicó
"En el almuerzo también se necesita incluir un grupo con fibra. Hay verduras que son más ricas en fibra que otras como la acelga, la chaucha, la remolacha que se deben combinar con otras como papas, batatas y choclo. De consumir arroz se recomienda que sea integral, y de ser común debe combinarse con acelga, apio, palta o tomate".
Y destacó que las ensaladas siempre deben copar el 50% del palto que vamos a comer. "Las legumbres, lenteja, garbanzo y poroto, son excelentes para prevenir la constipación y el azúcar alto en la sangre. Y tienen su principal fuente de fibra está en la cáscara", agregó.
Una vez finalizado el almuerzo, se sugiere "de postre una fruta pero sin pelar, como manzanas, peras, ciruelas y si se trata de naranja debe consumir también el hollejo y no sólo el jugo. En la merienda se puede repetir el desayuno y en la cena lo que quede del almuerzo", concluyó.
Consecuencias en la salud
Sobre cuáles son las consecuencias en la salud del padecimiento de una constipación crónica en la que los laxantes ya no generan efecto, explicó que puede causar enfermedades infecciosas, porque no hay que olvidar que las heces son desperdicios que el cuerpo descarta. Las bacterias del intestino pueden producir sustancias tóxicas en el organismo produciendo infecciones que pueden manifestarse en la piel, como dolores estomacales, intestinales, malestar, inapetencia y de ser crónico puede causar cáncer de colon.
Por eso el alerta debe encenderse en cuanto se detecte una irregularidad en la evacuación por lo que resulta clave tener un registro de en qué horarios y cada cuánto se va al baño. Hay personas que van una vez por medio siendo esa su normalidad y eso está bien siempre y cuando se mantenga así.
Respecto al uso de laxantes, Silvia Pérez explicó que son de emergencia. "Sirven para casos agudos, como pasar cinco días sin ir al baño. Tampoco hay que acostumbrar al cuerpo porque de ese modo el laxante pierde su capacidad de acción, por eso lo ideal es que el ritmo sea natural a partir del hábito alimenticio".
Sin embargo destacó que ante una situación de constipación crónica que no se puede resolver a través de la alimentación, es necesario consultar al médico para determinar su hay una enfermedad de base que la produzca.
El estrés también influye, ya sea para ir más veces al baño como ocurre cuando se está por rendir un examen, como para no ir. Insistió Pérez que la actividad física es muy importante en los ritmos evacuatorios, ya que ayuda al intestino a mantenerse en movimiento.