A pesar de no haber sido jujeña de nacimiento, Claudia Lassaletta fue sin dudas uno de los nombres más fuertes en el ámbito de la plástica de su generación, que el jueves pasado se vio enlutado con su fallecimiento. Varias de las obras de la artista plástica, integran el Patrimonial Artístico de Jujuy. Cabe mencionar que había nacido en Tucumán, y se había criado en Córdoba, pero adoptó Jujuy para su madurez y para inspiración de sus creaciones.
inicia sesión o regístrate.
A pesar de no haber sido jujeña de nacimiento, Claudia Lassaletta fue sin dudas uno de los nombres más fuertes en el ámbito de la plástica de su generación, que el jueves pasado se vio enlutado con su fallecimiento. Varias de las obras de la artista plástica, integran el Patrimonial Artístico de Jujuy. Cabe mencionar que había nacido en Tucumán, y se había criado en Córdoba, pero adoptó Jujuy para su madurez y para inspiración de sus creaciones.
Dejó pinturas y murales, que perdurarán en la historia del Arte de la Provincia.
La artista falleció fruto de una enfermedad respiratoria que venía sufriendo desde hace algún tiempo, según explicaron algunos de sus colegas allegados.
La artista egresó de la Escuela de Bellas Artes y Artes Decorativas e Industriales de la Universidad Nacional de Tucumán con el Titulo de Maestra de Dibujo, Especializada en Escultura.
Lassaletta participó en salones provinciales de Jujuy, Salta, Tucumán, Córdoba y Buenos Aires.
Integró jurados de salones y concursos de pintura en representación de la Dirección Provincial de Cultura de Jujuy; ilustró libros de escritores jujeños; dictó clases de plástica en escuelas primarias en programas especiales; en colegios secundarios y en el profesorado provincial de Artes Plásticas de Jujuy.
Creó, dirigió y enseñó en el Taller Lassaletta, desde l980 a 1994 en nuestra Provincia y luego junto a la plástica Carolina Britos, en el Taller Lassaletta en Mendiolaza, Córdoba.
La reconocida plástica Claudia Lassaletta fue detenida durante la dictadura en mayo de 1976, y esa experiencia sin dudas también marcó su camino artístico.
Una de sus últimas exposiciones resonantes fue en el año 2013 en el Centro Cultural "Culturarte". Se titulaba "Invicto el color", según explicaba en ese momento "porque el color está siempre presente, a veces es exuberante, a veces tranquilo, otras muy luminoso. Lo que me atrajo del paisaje de la Quebrada es la luminosidad, incluso en los días grises". Y en esa oportunidad los protagonistas de sus cuadros eran los coloridos cerros de nuestra provincia.
En esa oportunidad, contó en las primeras décadas de su carrera pintaba figuras, y cuando le encargaban paisajes del norte, venía y se instalaba en la Quebrada varios meses, y entonces " el viento, el frío, el paisaje, los olores, el sol y su deslumbrante luz creo que me volvían a enamorar. El amor por esta tierra adormecido en los años de ausencia, se despertaba y empezaba a plasmar las sensaciones que me provocaba", explicaba tratando de enseñarnos cómo se hacían esos cuadros.
Sobre su proceso de creación nos contaba que "mientras pinto, la tela me responde. Mirando el paisaje descubro pequeños sectores, los tomo, me apropio de ellos y trabajo sobre aquello que me emociona, me atrae. De pronto se dónde quiero que vaya la imagen, pero luego ella cambia, no obedece. Más que buscar, encuentro. Hoy, puedo hacer una lectura más fluida, entre la articulación y la tensión, entre la figuración y abstracción. Hay una intensa subdivisión del espacio; una persistencia en borrar los silencios; un color exuberante, plano y a veces violento. Por primera vez pinto realmente la luz. La luz que invade hasta los últimos poros del cerro, cambiando los colores, marcando intensamente las sombras. Estas imágenes abstractas han crecido en mí a partir de mi profunda conexión con el paisaje".