Optimismo, lecciones de vida, homenajes y una gran humildad mostró Palito Ortega en su recital de despedida eligiendo Palpalá para su tour de despedida de la música, aunque muchos de quienes lo escucharon la noche del sábado coincidieron en que la música no lo dejará a él porque está en su esencia.
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Optimismo, lecciones de vida, homenajes y una gran humildad mostró Palito Ortega en su recital de despedida eligiendo Palpalá para su tour de despedida de la música, aunque muchos de quienes lo escucharon la noche del sábado coincidieron en que la música no lo dejará a él porque está en su esencia.
Ante un lleno total de las instalaciones del miniestadio cubierto "Néstor Kirchner" en el barrio Canal de Beagle, con sus seguidoras que llegaron de todas las regiones para ver y escuchar al "Rey" Palito Ortega, de reconocimiento mundial como cantante y actor, protagonista de películas llenas de mensajes de vida, conmovedoras y pegadizas canciones, no pararon de cantar y aplaudir al músico que marcó una época importante como artista y dejó su sello en una época del país al que sus letras eran un bálsamo para el alma.
Su aparición en el escenario con un traje radiante plateado que vestía la figura del músico impecable con un porte involuto que el tiempo no cambió, deslumbró con sus canciones y su diálogo con el público a quien le contó entre las canciones cómo fueron sus inicios y su llegada a la cumbre recorriendo el mundo y cantando incluso en italiano. "Un muchacho como yo, llegó una vez desde Tucumán a Buenos Aires en busca de sus sueños, en Retiro no conocía nadie y busqué refugio para dormir, con mis sueños de cantar intactos", dijo a sus seguidores que recibieron sus mensajes hecho canciones.
El Tour de despedida hizo bailar y rememorar momentos de gloria de su carrera musical como cantante, compositor y actor, les brindó canciones a artistas que los transformaron en verdaderos éxitos y récord de ventas por la impronta de quienes las compuso y a quien se las dio para que le pusieran su voz como Violeta Rivas y en su viaje a Italia con Doménico Modugno, de quien dijo "le encantaban las pastas 'al tano' y juntos vivimos momentos inolvidables", señaló al momento de cantar sus canciones en italiano y luego en español. Fue impactante su presencia porque los años no pasaron para "El Rey" que nos trasladó en el tiempo con sus temas y mostró ser un hombre de mucha fe, "hermanos, den gracias cada día cuando se levanten con mucho optimismo y visualicen lo que quieren llega a ser y lo alcanzarán", les decía mientras otro éxito resonaba desde el escenario en una imponente puesta con iluminación que lo mostraba con "La Felicidad", a flor de piel como en uno de sus éxitos.
El artista comentó que, en una de sus primeras giras, cuando sus sueños empezaban a tomar forma de canciones, llegó a nuestra ciudad, un relato que emocionó a los asistentes, entre ellos una abuelita a quien el tiempo le quitó la luz de sus ojos, pero no del corazón, porque acompañada de sus familiares aplaudía y cantaba sus canciones.
"Esta noche estoy aquí y no sé si tendré la posibilidad de verlos de nuevo, pero dejaré mis mejores canciones en un recorrido por el tiempo", dijo ante sus seguidores donde los nietos acompañaron a sus abuelos y contaron con la misma alegría que ellos. El momento no pudo ser mejor, hasta tres generaciones cantando sus éxitos y unidos en un mensaje optimista y lleno de fe que llenó el alma y seguramente colmó las expectativas de los productores. Palito Ortega cantó, emocionó y sanó con sus letras que llegan al corazón de todos con un grado de autenticidad que trascendió fronteras generacionales.
El artista recordó que vendía diarios y luego con la ayuda de su padre armaron un cajoncito para lustrar zapatos, "la diferencia la hacía porque a mis clientes les cantaba", dijo con una sonrisa de complicidad del público que entendió lo que dijo y celebró su humildad.
En el marco de los homenajes recordó a Violeta Rivas, para quien compuso una canción en la época del "Club del Clan", una época dorada, una canción que llevó a la artista a ganar premios y reconocimientos, "que suerte, que suerte, que suerte que esta noche voy a verte".