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“Detectamos que los adolescentes tienen baja autoestima y están solos”

Pedagoga con orientación en Psicopedagogía y autora de la novela “Amor Confinado”. Se desempeña como asesora de equipos directivos en el Centro Polivalente de Arte y docente de la cátedra Psicología Evolutiva. Analizó la situación de los estudiantes jujeños que atraviesan la adolescencia y cuáles son las problemáticas más frecuentes en lo que respecta al aprendizaje. Y el impacto de la Fiesta Nacional de los Estudiantes.

Martes, 30 de agosto de 2022 01:02

¿Cómo analiza el desempeño de los estudiantes adolescentes en Jujuy? ¿Qué problemáticas se detectan?

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¿Cómo analiza el desempeño de los estudiantes adolescentes en Jujuy? ¿Qué problemáticas se detectan?

En general cuando uno se sienta con cada uno de los estudiantes la problemática por lo general pasa por las condiciones de vida asociadas al aprendizaje. Los estudiantes no creen que puedan seguir estudiando cuando terminen la secundaria.

En el colegio que trabajo detectamos que nuestros estudiantes de 4º y 5º año querían ser policías o enfermeros. Y cuando les preguntamos ¿por qué? respondieron porque son carreras con salida laboral rápida.

Otra cosa que detectamos es que hay muy baja autoestima y eso los condiciona. No creen ser capaces de seguir otra carrera y nosotros como sociedad tampoco estamos siendo capaces de ofrecerles otras alternativas.

¿Cuáles son los factores que están influyendo para que se sientan así?

La baja autoestima tiene que ver no solo con la mirada que uno tiene de sí mismo sino la mirada que te devuelven los otros.

Si en la sociedad y hasta en sus propias casas los chicos escuchan que tienen que acceder a carreras de rápida salida laboral porque "no van a poder", es un martilleo constante que los va convenciendo de que realmente no van a llegar y que no van a poder. He aquí la importancia que los profesores les refuercen el mensaje de creer en ellos e impulsarlos a potenciar lo que hacen y fomentar el creer en sí mismos.

Es una realidad que los docentes se ven en papel de ser psicólogos o trabajadores sociales porque a la problemática se la palpa concretamente en la escuela, pero también es cierto que ellos no pueden solucionar las condiciones de vida y de pobreza que como la cola de un dragón va dejando latigazos que tienen que ver con lo humano, lo social, etc.

¿Cómo afectó la llegada de la pandemia en la educación?

En pocos meses nos enseñaron que todo tenía que ser virtual y pese a que ya éramos una sociedad digitalizada no estábamos preparados ni los docentes ni los gabinetes, directores, etc. Era todo un caos y una angustia porque había chicos que habían quedado afuera por falta de recursos.

Sin embargo, analizando la situación desde un lado positivo considero que esto de la virtualidad nos despertó a los docentes en un momento en que los chicos ya manejaban la tecnología. Hay cosas muy positivas que se pueden tomar de la tecnología como el rápido acceso a archivos, pero ocurrió que no todos tenían acceso y esa sigue siendo la parte negativa.

A los efectos colaterales de la pandemia los vamos a ver en los próximos años y creo que ya los estamos sintiendo y sin tomar en cuenta la crisis generalizada que hubo este año y que venimos arrastrando como un estrés a largo plazo. Situación con la que pensamos que a los chicos no les pasa nada pero sí les está pasando.

¿Qué es eso que les está pasando a los adolescentes?

Los adolescentes están muy solos, se los ve muy solitarios. Y sin condenar a nadie, los padres están muy ocupados en sus cosas. Por eso hablo mucho con los docentes sobre esto para reforzar el acompañamiento de los chicos. Es muy importante la mirada del que es líder, es decir, de la persona con la que los chicos se identifican. Los adolescentes están en una etapa en la que buscan su identidad, pertenecer a un grupo, son procesos psicológicos. Que el otro te devuelva la atención, te dedique tiempo y te dé aliento y confianza, es fundamental.

¿Considera que el docente debería reforzar el acompañamiento de los estudiantes? ¿Hasta dónde les corresponde hacerlo?

Los docentes tampoco pueden lidiar con tantas cosas a la vez, pero sí deben solicitar el apoyo y el acompañamiento de la familia o de algún adulto que sea responsable de ese chico y que pueda darle la importancia que merece porque vemos como los chicos entran a la secundaria en piloto automático y cuando se dan cuenta a fin de año están en llamas con ocho materias para rendir.

Y es necesario también, para que todo funcione en equilibrio, que los docentes cuenten con políticas públicas más claras como fue la vuelta a la nota numérica, políticas direccionadas y con espacios para debatir estas situaciones de la vida con los estudiantes. Pero insisto, siempre con el acompañamiento de la familia porque tampoco hay esos espacios institucionales para trabajar. Resulta clave que los padres fomenten el espacio de diálogo con ellos desde la niñez, tiempo de calidad aunque sea por veinte minutos que para los chicos ya será una demostración de interés. La palabra responsabilidad viene de respuesta.

¿Cómo repercute el trabajo que exige la Fiesta Nacional de los Estudiantes en el desempeño de los alumnos?

Hace años que observo el accionar de los chicos y pienso que ojalá nosotros los docentes aprendiéramos de ellos. Porque uno de los temas que más cuesta llevar a delante en las reuniones institucionales es el trabajo en equipo y si nosotros los observáramos un poco más, aprenderíamos mucho. Y esto no es romantizar la adolescencia, es algo que se nota en todos los colegios porque lo que une al equipo es la tarea y el objetivo.

Admito que yo por muchos años pensaba ¿cómo se va a gastar tanta plata en una carroza? Pero hoy los observo y veo que es impresionante lo que hacen y todo a través del trabajo en equipo. Tenemos que aprender mucho de ellos, el cómo se cuidan, los emprendedores que son para reunir dinero, el ser todos pares e iguales sin egos en competencia. Yo los veo soldar, aprender electricidad, cumplir con los plazos de tiempo y hacer rendir el presupuesto. ¿Díganme si esto no los prepara para la adultez? Los adultos deberíamos aprovechar este potencial de los chicos.

Con el Sábado Estudiantil vimos cómo canalizaron su energía pintando y bailando y eso está muy bien porque si no lo hacen ahora ¿en qué momento lo van a hacer? Porque después ya los espera la vida para el trabajo, el horario, las obligaciones y qué mejor que estén enfocados explorando y potenciando sus habilidades para el futuro. Y como sociedad no podemos dejarlos solos, tenemos que apoyarlos en sus iniciativas.