La Justicia jujeña a lo largo del 2023 llevó a cabo más de 150 allanamientos por causas vinculadas al narcomenudeo y procedió a la detención y al procesamiento judicial de alrededor 130 personas, muchas de ellas ya fueron sometidas a un juicio abreviado y condenadas.
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La Justicia jujeña a lo largo del 2023 llevó a cabo más de 150 allanamientos por causas vinculadas al narcomenudeo y procedió a la detención y al procesamiento judicial de alrededor 130 personas, muchas de ellas ya fueron sometidas a un juicio abreviado y condenadas.
Desde el 1 de octubre de 2022 está en vigencia el Nuevo Código Penal de la Provincia, que contempla la desfederalización de este tipo de delito.
El ministerio Público de la Acusación creó la Unidad Fiscal Especializada en Narcomenudeo que tiene a cargo a los fiscales Walter Rondón, Ariel Gil Urquiola y a Agustín Jarma y trabajando en forma conjunta con la División de Narcotráfico de la Dirección General de Investigaciones.
Pero además esta Unidad Fiscal llegó a concretar 190 audiencias, que si son divididas en los días hábiles del año en curso, se puede decir que se materializaron más de una audiencia por día.
Además, hay que destacar el total de 50 condenas realizadas durante el 2023 por la tenencia, distribución o comercialización de drogas, por ejemplo marihuana, cocaína y pasta base de cocaína.
Los allanamientos llevan un tiempo de investigación y se lograron gracias a que el Ministerio Público de la Acusación concurre a los sectores barriales de cada localidad de la provincia, se entrevista con los vecinos y para su seguridad, deja buzones para las denuncias anónimas.
Pero además se debe a la tarea de investigación previa a cargo de la División de Narcotráfico de la Brigada y la Agencia Provincial de Delitos Complejos, que de forma mancomunada lograron de a poco desbaratar bocas de expendio de drogas en distintos sectores.
Del cúmulo de allanamientos que el Ministerio llevó a cabo, también hubo efectivos policiales que fueron detenidos vinculados al entorpecimiento, al encubrimiento o a alertar a los investigados sobre los futuros allanamientos, quienes fueron detenidos y se encuentran procesados, esto da cuenta que la investigación no hace distinción entre los actores que contribuyen a que este flagelo social se halla instalado en la vida cotidiana de los jóvenes.
Con esta forma de trabajo, la respuesta a la sociedad se da de forma inmediata.
El nuevo Código Penal permite que se pueda procesar a las personas que cometen este tipo de delitos, situación que cuando la figura estaba a cargo del fuero federal, no eran procesadas.