¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

25°
27 de Abril,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Rechazo de importación en Brasil alerta a productores

En la frontera, rechazaron una carga de poroto jujeño por superar los límites de residuos de glifosato.
Lunes, 22 de mayo de 2023 00:44

Desde la Cámara de Comercio Exterior recomiendan a productores evitar el uso del glifosato en la última etapa de cosecha ante el reciente rechazo de una carga jujeña de granos que estaba siendo exportada a Brasil frente a la detección de restos del herbicida. Se trata de un producto de amplio uso en producciones en Argentina, que está regulado pero permitido aunque algunos mercados del exterior tienen diferentes normativas y no los admiten.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Desde la Cámara de Comercio Exterior recomiendan a productores evitar el uso del glifosato en la última etapa de cosecha ante el reciente rechazo de una carga jujeña de granos que estaba siendo exportada a Brasil frente a la detección de restos del herbicida. Se trata de un producto de amplio uso en producciones en Argentina, que está regulado pero permitido aunque algunos mercados del exterior tienen diferentes normativas y no los admiten.

"Hubo un rechazo de cargas de poroto porque tenían restos de glifosato. Es un gran tema para la producción argentina, ellos antes de ingresar la mercadería la llevan a un aparato, una máquina que detecta si hay presencia de glifosato. Si tiene presencia de glifosato, ellos desisten de la compra de mercadería", explicó Jorge Gurrieri, presidente de la Cámara de Comercio Exterior.

Lo hizo al referir a un reciente rechazo en la frontera con Brasil, en Puerto Iguazú, donde le informaron de la prohibición debido a que se detectó en productos alimenticios en supermercados que devino en grandes multas, y llevó a ajustar controles de la mercadería que ingresa de Argentina. Consideró que es grave debido a que el glifosato es muy usado en el cultivo de maíz, poroto y soja.

Planteó que este tipo de equipos que permitan detectar restos de glifosato en el producto se usa en Brasil de manera tan rápida y que habría algunos productores que ya lo habrían importado por lo que será una opción para hacer controles y verificar si hay restos de glifosato antes de hacer una venta.

"Estamos a pocos días de comenzar la cosecha, quiero decirles que para levantarla no usen glifosato, sino otros productos que están permitidos, otros tipos de disecantes para cosechar porque pueden tener problemas muy complicados, no van a poder vender la mercadería por ejemplo a Brasil", expresó. Instó a no usar glifosato como disecante, que se suele aplicar ante la aparición de manchones o maleza antes de pasar la máquina buscando emparejar, porque la planta lo absorbe y trasmite a los granos, que pueden tener problemas para la comercialización. Busca alertar a los productores para que tomen conciencia, se asesoren y suspendan el uso del glifosato al momento de cosechar para evitar problemas en la comercialización.

Por otro lado, Gurrieri dijo que ya se vislumbra la afectación de la sequía que hubo. "La cosecha ya se inicia y tenemos prácticamente una pérdida del 30 o 40% por la sequía, está muy complicado. El fenómeno de la Niña fue muy duro también acá en el Norte Argentino, y no fue la excepción", dijo porque la planta sufrió mucho en su desarrollo.

La recomendación

En la frontera brasileña, las autoridades le entregaron la circular emitida por Asociación Brasileña de Frijoles Secos y Jumes y se dirige a la Cadena productiva de frijol (poroto) en Argentina.

Informa que hay "registros que indican el uso inapropiado de pesticidas por parte de algunos productores de frijol argentino, ya que varios cargamentos de frijol negro provenientes de Argentina, provenientes de residuos de pesticidas con porcentajes superiores al Límite Máximo de Residuos (LMR), de acuerdo con las disposiciones de la legislación brasileña en la materia".

Precisó que en las cargas analizadas, el glifosato fue el plaguicida más presente en los análisis de tamizaje y evaluación, quizás debido a que la aplicación ocurrió en la etapa de desecación del cultivo. "Señalamos que en Brasil, el herbicida glifosato no está registrado como desecante para el cultivo de frijol, ante el Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento (Mapa). Por lo tanto, los lotes analizados que presentan un resultado de glifosato por encima de 0,05% mg/kg o 50 ppb, se consideran no aptos para el consumo humano, por lo que están sujetos a las penas previstas por la ley", apuntó.

Se informó además que en Brasil, entre otras acciones desarrolladas por organismos gubernamentales para el control de residuos y contaminantes, se destaca una denominada FOR. Por ello buscan sensibilizar a los productores para observar buenas prácticas agrícolas, con énfasis en el uso correcto de los plaguicidas aplicados en ese cultivo para potenciar las transacciones comerciales entre Brasil y Argentina.

En Argentina, está autorizado su uso con reglamentación

POROTO | ES UNA DE LAS PRODUCCIONES EN LAS QUE SE USA EL HERBICIDA.

El Tribuno de Jujuy consultó a Alejandro Zelaya, de la cátedra de Protección Vegetal en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju), y explicó que el glifosato es un herbicida que se usa ante la aparición de hierba que compite con los cultivos, por lo que supone una herramienta para combatirlo porque los productores no pueden perder su cultivo. Precisó que las empresas que lo fabrican lo registran para distintos cultivos: soja, poroto, maíz, etc., pero depende de cómo manejen los productores su uso.

“Hay etapas en el cultivo en la que podés usar el producto sin el riesgo de que en la cosecha salga el residuo y cuando le hagan el análisis no encuentren glifosato. Hay etapas sobre todo en las finales, en lo que denominamos tiempo de carencia, entre que aplicas y cosechas, donde la molécula se degrada, entonces si aplicas sobre el final, es lógico que el producto salga en el análisis”, precisó. Explicó que el glifosato en Argentina está permitido, pero depende de los mercados donde se vaya a exportar que son los que regulan las reglas de las trazas de los residuos de plaguicidas que puede contener o si no la permiten. “No es lo mismo una carga para Europa, para Estados Unidos o para China, porque cada mercado regula las cantidades de residuo de glifosato que permiten”, explicó.

De hecho, recordó que hace algunos años, el Mercado de Buenos Aires no estaba permitiendo la entrada de tomates de Jujuy, justamente porque se habría analizado la cantidad de residuos por los que se rechazó la carga, algo que se estima que habría pasado en la frontera con Brasil. Aclaró sin embargo que Argentina tiene permitido algunas cantidades, por lo que hay una legislación vigente para su uso. Además, detalló que está reglamentado el uso de una receta agronómica para poder adquirirlos, pero estimó que no siempre se cumplen.

Existe una resolución 350-1999 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) que aprobó ese año el nuevo “Manual de procedimientos, criterios y alcances para el registro de productos fitosanitarios en la República Argentina”. La resolución clasifica al glifosato según criterios de la OMS, la dosis letal media aguda DL50, que mide la toxicidad aguda pero en formulaciones comerciales se mezcla con otros productos que incrementan su poder. Aunque tiene autorización del Senasa, el glifosato está prohibido en algunas ciudades argentinas como Bariloche, El Bolsón, provincia de Río Negro; Lago Puelo, Epuyén, Cholila de Chubut; General Alvear de Mendoza; Rosario, Rincón de Santa Fe; Concordia y Gualeguaychú de Entre Ríos; y en otras está en debate.