Jujuy quedó revolucionado, luego del exitoso festival realizado en el centro cultural "Manuel Belgrano", donde cientos de personas se congregaron para vibrar al ritmo de las melodías de artistas nacionales consagrados, matizados con aquellos del género que también buscan su espacio entre el público local.
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Jujuy quedó revolucionado, luego del exitoso festival realizado en el centro cultural "Manuel Belgrano", donde cientos de personas se congregaron para vibrar al ritmo de las melodías de artistas nacionales consagrados, matizados con aquellos del género que también buscan su espacio entre el público local.
El espectáculo, además de mezclar diferentes estilos musicales, también sirvió para reunir espectadores de diferentes edades, ya que los más nostálgicos, dijeron presente para recordar aquellas letras de una de las míticas bandas del rock nacional argentino como Attaque 77, esta vez con la música y voz de Luciano Scaglione, integrante original de aquella formación.
Pero claro, además del exAttaque, los otros platos fuertes del "Revolución Rock" fueron Kapanga y Los Jóvenes Pordioseros.
La noche arrancó temprano, con la "previa" en inmediaciones de la exestación de trenes, donde los trapos y los grupos no faltaron. Por fortuna, todo se desarrolló con normalidad.
Los primeros acordes que se sintieron sobre el escenario fueron los de la banda jujeña liderada por Wayra Vázquez, Epifanía, quien con su estilo alternativo y de fusión, con temas propios, hizo prever lo que se viviría.
El Momo Demuh se posicionó en el escenario y, como desde hace años, nuevamente dejaron en claro que entre géneros como el rock, el ska, el reggae y el charleston, son una de las grandes bandas locales.
The Chills y Ramona Stress fueron la antesala para uno de los espectáculos más esperados por el público jujeño, que a la medianoche ya se encontraba con casi todo el espacio disponible "copado", agitando las banderas y tarareando lo que se vendría.
Lucho al Attaque, con Luciano Scaglione al frente, rasgó los primeros acordes y comenzó a recordar temas de la banda que, en la década de los 90 y principios de los 2000, marcaron a toda una generación.
Al cabo de casi una hora, fue Tranquilamente quienes se adueñaron del escenario, frente a los seguidores que pasaron de la expectativa lógica de un show de esta envergadura a la confirmación de que vivirían una noche única.
Los liderados por el "Mono", Kapanga, prácticamente pusieron en estado de éxtasis a todos los presentes. Sus clásicas canciones, las que mezclan la fusión del rock con el cuarteto, más una dosis de otros estilos, dejaron a todos disfónicos de tanto cantar y a los de más edad, cansados de bailar. Claro, esto último era lógico frente al ritmo que la banda formada en Quilmes siempre propone.
El telón de la frutilla del postre estuvo con los chicos de El Terco, quienes cedieron el espacio para que una de las bandas más "rollingas" del rock argentino nuevamente se luzca frente a los jujeños: Los Jóvenes Pordioseros, fueron los encargados de bajar el telón, dejando flotando en el aire la sensación de que este festival fue solamente el preludio de muchos más que llegarán.