El suboficial primero Juan Carlos Tolaba, nacido en Jujuy, eligió la carrera naval hace 25 años cuando tenía tan sólo 19, y desde 2006 es buzo salvamentista de la Armada Argentina. Regresó hace poco de la Antártida, atesorando en su carrera varias campañas en el continente blanco y años de experiencia.
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El suboficial primero Juan Carlos Tolaba, nacido en Jujuy, eligió la carrera naval hace 25 años cuando tenía tan sólo 19, y desde 2006 es buzo salvamentista de la Armada Argentina. Regresó hace poco de la Antártida, atesorando en su carrera varias campañas en el continente blanco y años de experiencia.
Juan Carlos tiene 44 años y participó de la Campaña Antártica de Verano (CAV 2022/23) a bordo del rompehielos ARA Almirante Irízar en donde fue encargado de la División "Foxtrot" y suboficial de cargo en Salvamento y Buceo.
El buzo jujeño le contó a La Gaceta Marinera su última vivencia antártica, lo gratificante que es servir a la Patria desde el mar y sus recuerdos de provincia. "Soy del barrio Santa Rosa donde nací y siempre viví en la ciudad de Libertador General San Martín, hasta que ingresé en 1999 a la Armada Argentina", introdujo.
Su carrera naval lo llevó a vivir en Punta Alta, ciudad cercana a la Base Naval Puerto Belgrano; en Mar del Plata; y en Quilmes donde actualmente reside con su señora Tania y sus hijas Isabella de 4 años y Antonella de 10 meses.
Sus afectos y familiares, padres y hermana, viven en Libertador. "Recuerdo momentos de mucha alegría compartidos durante las fiestas con mi familia, y los recuerdos de secundaria en la escuela técnica 'Ingeniero Herminio Arrieta': éramos 15 alumnos, con quienes aún nos encontramos cada vez que viajo y salimos a pescar", apuntó.
También rememoró el último año de secundaria, en el que integrantes de la Delegación Naval fueron a dar una charla informativa. "Tenía 19 años y me llamó la atención todo lo que contaron. Me inscribí y, al año siguiente, cursaba la Escuela de Suboficiales de la Armada, en Buenos Aires".
Juan Carlos egresó con la especialidad Máquinas Motorista y luego hizo el Curso de Buceo, capacitándose como buzo de salvamento: "Me cambié de escalafón, no porque no me gustara ser maquinista sino porque descubrí que el buceo es un trabajo diferente, selectivo desde su ingreso, y muy arriesgado; cumplir con cada desafío me brinda muchas satisfacciones".
"Hoy la Armada Argentina es como mi segunda casa; me enseñó a ser un hombre de mar y, sobre todo, un hombre de bien", enfatizó.
Al egresar, participó del viaje de instrucción por Centroamérica y Sudamérica, a bordo de la corbeta ARA Parker ya que la Fragata Libertad se encontraba en reparaciones generales. Años más tarde cursó en la Escuela de Buceo en Mar del Plata, "algo que quería hacer desde que era aspirante naval".
Su primera comisión como buzo salvamentista fue durante el siniestro que sufrió el rompehielos "Almirante Irízar" en 2007. "Fue un trabajo muy duro, pero se recuperó la unidad y logramos entrar a Puerto Belgrano".
Participó, además, de la búsqueda de pesqueros hundidos en Mar del Plata y del reflotamiento del dique flotante en Ushuaia. Todas ellas "experiencias gratificantes -aseguró- tanto a nivel laboral como personal. La vocación de servicio a la Patria reflejada después de finalizar una tarea en un ámbito tan hostil como es el medio submarino, me llena de orgullo".
No es la primera vez que Juan Carlos trabaja en el continente blanco, ya lo hizo varias veces a bordo del ARA Canal Beagle.
Este año, llegó a la Antártida a bordo del "Almirante Irízar" y, por ser el más antiguo y experimentado de los buzos, fue encargado de la División "Foxtrot" y suboficial de cargo en Salvamento y Buceo. "Durante la campaña, estuve a cargo del grupo humano compuesto por nadadores de rescate y buzos que vienen de comisión al buque; también los introduje en las maniobras náuticas con botes para realizar la carga y descarga de víveres y materiales general, y de personal, en cada base antártica", describió.
Reabastecieron a 13 bases australes
Durante la campaña antártica 2022/23, se reabastecieron 13 bases antárticas en las que se llevó a cabo el relevo de personal, carga y descarga de materiales, víveres y combustible; se avanzó en la construcción de laboratorios y en la recuperación de la Base Antártica Conjunta Petrel. Esta actividad antártica es de carácter conjunto llevada a cabo por las tres fuerzas armadas, bajo el control operativo del Comando Conjunto Antártico dependiente del Estado Mayor Conjunto de las FFAA y el Gobierno nacional que articula la tarea de los ministerios de Defensa; Ciencia, Tecnología e Innovación; Salud y Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto. Como sucede en cada campaña, se destaca la importancia estratégica de la presencia argentina en el continente blanco y su compromiso con el Tratado Antártico.