¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

16 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Los beneficios del agua con gas para mejorar la digestión y eliminar el reflujo

Esta presentación de agua es positiva para el organismo, pero hay que escoger la versión correcta de agua con gas mineral.

Sabado, 22 de julio de 2023 10:59

El agua es la mejor bebida para mantenerse hidratado en invierno o verano. El consumo de agua mineral no es muy popular, pero está comprobado que es una excelente fuente de hidratación junto a otros beneficios.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

El agua es la mejor bebida para mantenerse hidratado en invierno o verano. El consumo de agua mineral no es muy popular, pero está comprobado que es una excelente fuente de hidratación junto a otros beneficios.

Los expertos del portal especializado en salud Cuídate Plus indican que el agua con gas es una gran combinación para las comidas o como refresco, en lugar de otras opciones de hidratación poco saludables con exceso de azúcar. Al igual que el agua normal, su forma con gas ofrece beneficios para la salud, especialmente a nivel gastrointestinal, e incluso puede ayudar a perder peso.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el agua carbonatada contiene dióxido de carbono, lo cual provoca las ampollas. Esta presentación se puede dividir en dos grupos: agua carbonatada naturalmente de manantial, y agua mineral con gas, que se elabora con carbonatación posterior. En ese orden de ideas, la recomendada es la versión mineral con gas, en vez de las carbonatadas.

Entre los beneficios de beber agua mineral se destaca su sensación de saciedad. Este tipo de agua hace presión sobre las paredes del estómago para ayudar a controlar la ingesta de alimentos, crear una sensación de saciedad y calmar y controlar el apetito. El agua carbonatada es entonces un poderoso aliado para la pérdida de peso cuando se consume antes o durante las comidas.

De igual manera, el agua con gas favorece la salud intestinal y ayuda a la digestión, al igual que las sales de frutas y el bicarbonato. La razón es que proporciona ácido carbónico, el cual combinado con ácido estomacal estimula la separación de los jugos gástricos, ayudando al proceso digestivo y evitando la digestión extenuante. Por ejemplo, para una dieta pesada (principalmente una dieta rica en proteínas y grasas) este tipo de agua favorece la digestión, facilita el tránsito intestinal y puede prevenir malestar estomacal, acidez estomacal, dolor y reflujo.

En realidad hay muchos tipos de agua mineral. Por eso es importante leer detenidamente la etiqueta de cada producto para saber cuál es mejor en función de sus ingredientes. El agua mineral carbonatada naturalmente que se carbonató de manantiales no es lo igual que el agua carbonatada.

El término gaseoso se refiere a la cantidad de dióxido de carbono disuelto en agua carbonatada. En ese orden de ideas, se encuentra agua carbonatada o gaseosa (para agua con menos aire) y agua con aire ligero, clásico y fuerte. Por lo cual, los expertos indican que estas son las siguientes versiones de agua con gas en aras de tener en cuenta cuáles son positivas en verdad.

Las primeras son las llamadas agua mineral naturalmente gaseosa o carbónica natural. Contiene la misma cantidad de anhídrido de carbono, pero se le añade más para compensar el gas que se perdió durante el proceso de envasado. Luego está el agua natural reforzada con gas del mismo manantial. Para esta versión, el contenido de anhídrido es superior al del origen.

Por otro lado, el agua natural con gas carbónico añadido no proviene del mismo manantial del agua y se le añade en gran medida. Finalmente, la última presentación es el agua mineral totalmente desgasificada, la cual no tiene gas carbónico libre. Entre todas, esta es la más recomendable, aunque si se desea algo con gas, la mejor es la primera.

De igual modo, el agua con gas también está distribuido acorde al contenido mineral predominante. Los expertos señalan que la categorización es la siguiente:

Bicarbonatada: Contiene más de 600 mg/l de bicarbonato.

Cálcicas: Contiene entre 150 mg/l y 377 mg/l de calcio.

Sulfatadas: Superan los 200 mg/l de sulfatos y cuentan con propiedades laxantes.

Sódicas: Tienen entre 551 mg/l a 1.172 mg/l de sodio. No es recomendada para pacientes hipertensos.

Magnésicas: Superan los 50 mg de magnesio por litro de agua. Se destacan por una gran mineralización, siendo la mejor presentación de la lista.

Cloruradas: Tienen más de 200 mg/l en cloruros.