"A través de esta manifestación, el Señor nos pide volver a ser niños encarnando en esta experiencia, la espiritualidad de la Virgen María, de la Sagrada Familia de Nazaret y nos recuerda que Dios está en las pequeñas cosas", dijo el padre Daniel Alberto Baca durante el desarrollo de la tradicional Feria de Santa Anita y San Joaquín concretada en la parroquia San Pedro de Río Negro.
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"A través de esta manifestación, el Señor nos pide volver a ser niños encarnando en esta experiencia, la espiritualidad de la Virgen María, de la Sagrada Familia de Nazaret y nos recuerda que Dios está en las pequeñas cosas", dijo el padre Daniel Alberto Baca durante el desarrollo de la tradicional Feria de Santa Anita y San Joaquín concretada en la parroquia San Pedro de Río Negro.
El sacerdote se refirió además al proceso de restauración del templo que se está realizando con miras a la celebración del Jubileo por los 250 años de la fe sembrada en este solar. Todo lo recaudado será invertido en la compra de los materiales necesarios para el recambio de todo el piso del templo.
"Resulta muy emotivo encontrarse con las paredes primigenias del templo, muros muy antiguos y que permanecen aún intactos, obra que está plena de historia por cuanto fue construida con el aporte de toda la comunidad, además de los grandes benefactores que fueron parte importante en la construcción. Por eso, esta restauración nos da la posibilidad de reeditar ese gesto de generosidad de nuestros antepasados y sumar un granito de arena en esta obra", señaló el párroco al tiempo de explicar entre otras acciones para recaudar dinero, se propuso la compra simbólica de una baldosa para que todos los ciudadanos puedan dejar su impronta de fe y trabajo en esta tarea y que perdurará en el tiempo.
Recordó que en el año 2027 el templo celebrará los 100 años de su inauguración y seguramente en dicha celebración, se encontrará recreando en parte, sus detalles originales.
También hizo referencia que, como parte de los arreglos, se considerará la parte eléctrica, las molduras de las ventanas, la pintura de todo el interior. En cuanto al majestuoso retablo que forma parte del altar, será otro proyecto a futuro y para lo cual será necesaria la evaluación de personal idóneo en restauración. (Nora Ruiz).