Un año más, los jujeños pudieron vivir una de las fiestas más importantes de la ciudad, La Feria de la Comida Regional, conocida popularmente como los tradicionales "Hornitos".
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Un año más, los jujeños pudieron vivir una de las fiestas más importantes de la ciudad, La Feria de la Comida Regional, conocida popularmente como los tradicionales "Hornitos".
El fogón se encendió pasado domingo, al mediodía, cuando los puestos comenzaron con la venta de tamales, empanadas, picantes y otras comidas regionales.
El escenario tuvo una impronta criolla y se lucieron, entre otros, Lautaro Tolaba, Carla Celeste y La Chaqueñada.
Por la noche, el predio del Complejo Cultural Manuel Belgrano se vio colmado.
Jujeñas abrió la noche, con una notable propuesta de música andina, con ribetes tropicales. Una base de vientos bien al frente y destacadas interpretaciones, levantaron la ovación del público.
El Ballet "Portal de mi País" desplegó una brillante coreografía referida a nuestro carnaval, a puro despliegue y talento.
Y cuando el papel picado aún coloreaba el aire, La Pacha surgió en el escenario. Un proyecto familiar, con base de vientos, charango y teclados, resaltó bailecitos, cuecas y taquiraris, marcando la impronta local en su presentación.
La templada noche alentaba al público a bailar y los miles de jujeños y algunos turistas, hicieron gala de la invitación, haciéndose dueños de la pista.
Sampedreños reafirmó su constante crecimiento escénico, ofreciendo un completo menú de ritmos, con la potencia y calidad que los caracteriza, tanto vocal como musicalmente.
La fiesta subió de temperatura cuando Coroico interpretó los clásicos, aquellos que en décadas de carnavales, los ubicaron como el grupo más alegre de la provincia.
Música criolla, de fogón y patio de tierra fue lo que entregó Marca Gaucha, que hizo levantar polvareda, con gatos, chacareras, escondidos y una selección de chamamé.
Con un singular despliegue, de sonidos y baile, Lu Araya reafirmó que está en su mejor momento. Un repertorio especialmente elegido y una entrega total, lograron que el público le devuelva mucho cariño, aplausos y ovación.
Cuando el frío quería adueñarse de la noche, el cierre llegó con Diableros, que continúan mostrando el espectáculo que marca la unión escénica, nuevamente, de Santiago Cucchiaro, Maxi Gil y Emiliano Sierra. Fue una presentación de alto vuelo, con mucho ritmo y las cualidades intactas de cada uno de los integrantes.
El lunes, se repitió el encuentro al mediodía. En el escenario, estuvieron el Dúo Tacta, Elsa Tapia, Rocío Fuenzalida, Esteban Ranzoni, Achalay, Chattel, Norma de América, Ballet Sol y Arte y Ballet Club Pablo Tramontini.
El martes, en el marco del regreso de la Marcha Evocativa al casco céntrico, se duplicó la cantidad de público presente la noche del domingo. La fila para ingresar a la exestación, se extendía hasta el paseo de los artesanos.
Adentro, sonaron el virtuoso piano de Elena Mattos, que abrió la noche. Luego se hizo presente el grupo Jujeños, con una propuesta rítmica y vocal que cautivó al público, logrando que rápidamente se rompa el hielo y den rienda suelta al baile.
Uno de los más ovacionados de la velada fue Tomás Lipán, partícipe esencial de estas evocaciones. Junto a su repertorio, "El canto de Purmamarca" tuvo la responsabilidad de entonar el Himno Nacional Argentino, a las 12 de la noche en punto, marcando el inicio del 23 de agosto, fecha en la que conmemoramos los 211 años de la Gesta Heroica del Éxodo Jujeño.
El Ballet Juventud Prolongada, reafirmó que son implacables al momento de mostrar cuadros argumentales y presentaron "Éxodo Jujeño", puesta que fue ovacionada por miles de almas.
Veintiséis años de canto subieron al escenario con Copleros, que ratificaron por qué son uno de los grupos más queridos del ámbito local.
Fede Pecchia fue el invitado especial de la noche. Vinculado a la música jujeña desde su experiencia en el Bondi Cultural que creara Bruno Arias, siempre cosechó amigos jujeños. Es así que, participó de la conmemoración invitando a José Simón, Pucho González, Becho Riveiro y Noelia Gareca, además de tener a Luis Escalera como músico.
Descollante fue lo de Tati Domínguez, que con coplas, bagualas, cumbias, ritmos criollos y andinos se ganó más de una ovación, a la par de que el público fue su coro en todo momento.
El cierre de esa última noche fue con la característica fiesta de César y el Grupo Felicidad, con un ya consagrado repertorio y, como siempre, algunos agregados nuevos, característica singular del Chupachichi, que de inmediato adapta su estilo aquello que suena a diario.
La Feria de la Comida Regional se despidió ayer al mediodía, con el espectáculo que se desarrolló desde las 13 y en el que actuaron TKP Chango, Monica Pacheco, José Simón y las Hermanas Simón, Orquesta Criolla, Tupac 7, Ballet Ecos de luz, Ballet Herencia Norteña y Los del Pial.
Aspectos para destacar del evento son, la distribución de las mesas, la atención que ofrecieron los puestos de comidas y el despliegue del personal municipal, para estar en todos los detalles.