Los pobladores de Juella están preocupados y molestos por el estado que presenta desde varios meses atrás la ruta provincial 27 que une esa pequeña localidad con la ruta nacional 9, y por la cual transitan cotidianamente. Temen que por las malas condiciones, pueda producirse un accidente y alertaron que los remiseros permanentemente también se quejan por el deterioro. La situación empeora mucho más, en horas de la noche, ya que no hay iluminación y desde un extremo al otro deben desplazarse en medio de la oscuridad. César Quispe, presidente del centro vecinal de Juella -distante a unos 12 kilómetros al norte de Tilcara- afirmó que en la citada ruta no se hicieron mejoras desde marzo pasado "cuando finalizaron las tormentas del Verano. Y hasta la actualidad no se hizo absolutamente nada, por lo que el deterioro es considerable".
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Los pobladores de Juella están preocupados y molestos por el estado que presenta desde varios meses atrás la ruta provincial 27 que une esa pequeña localidad con la ruta nacional 9, y por la cual transitan cotidianamente. Temen que por las malas condiciones, pueda producirse un accidente y alertaron que los remiseros permanentemente también se quejan por el deterioro. La situación empeora mucho más, en horas de la noche, ya que no hay iluminación y desde un extremo al otro deben desplazarse en medio de la oscuridad. César Quispe, presidente del centro vecinal de Juella -distante a unos 12 kilómetros al norte de Tilcara- afirmó que en la citada ruta no se hicieron mejoras desde marzo pasado "cuando finalizaron las tormentas del Verano. Y hasta la actualidad no se hizo absolutamente nada, por lo que el deterioro es considerable".
En varias oportunidades "hemos presentado notas a Vialidad de la Provincia solicitando una moto niveladora para su acondicionamiento y un enripiado, pero no hemos tenido respuestas favorables", lamentó el vecinalista que diariamente se desplaza por ella para cumplir con su obligación laboral en Tilcara.
Aparte de los riesgos a los que se exponen por el estado del camino, "nos perjudica porque los remises no quieren circular por ahí, el transporte de los docentes también deben transitar por ese sector, el agente sanitario también tiene que ir por ahí para brindar atención en el pueblo, o sea, todos los que circulamos por esa ruta nos vemos afectados". Juella, en los últimos años "creció bastante", y en consecuencia el tránsito vehicular "que es permanente durante todo el día. En cambio antes no iban mucho para allá, la ruta está muy deteriorada, hay muchas piedras, baches, 'serrucho' y eso hace que los medios de transporte no quieran ingresar al pueblo, porque en esas condiciones un vehículo 'se jode'".
La exposición a una situación lamentable "es también para quienes se desplazan en motocicleta y los de a pie, porque es muy dificultosa la ruta", prosiguió.
Desde la ruta 9 hasta el ingreso al pueblo son 5 kilómetros de ruta provincial, y en el tramo comprendido entre el cementerio hasta donde empiezan las cabañas, es donde se registra la mayor dificultad para el tránsito. Durante la noche "es todo oscuridad" por la falta de iluminación, "en esas horas hay que tomar mucha precaución, especialmente aquellos que por primera vez van por ahí, porque pueden sufrir algún accidente".
Quispe consideró que con un enripiado y una máquina moto niveladora se daría solución. "Anteriormente pasaba una moto niveladora, le pasaba una raspada como que le fue sacando y sacando, hasta que quedó una capa dura de piedras", graficó. Por los atractivos turísticos que posee esa comunidad y los establecimiento hoteleros construidos, "los emprendedores y turistas que van al pueblo se ven afectados por esto".
Como él, son muchos más los vecinos de ese sector que cotidianamente se trasladan a Tilcara para cumplir con su trabajo, realizar trámites, hacer compras y otras actividades, inclusive los productores circulan por esa ruta transportando su producción y comercializarla en el mercado tilcareño.
La ruta 27 al llegar al pueblo se conecta a la avenida Crucero General Belgrano y en toda su extensión bordea el río Juella, tramo por el cual el municipio se hace cargo de su mantenimiento desmalezando, podando arbustos, recogiendo residuos y acondicionando permanentemente. Anticipó que iban "a volver a enviar otra nota para ver si obtenemos alguna respuesta, los vecinos están muy molestos y ya hemos programado una asamblea para decidir qué hacemos".