El paro del Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA, por sus siglas en inglés), que inició el pasado 13 de julio, tiene completamente paralizado a Hollywood. Sin embargo, el impacto de esta situación podría extenderse más allá del mundo cinematográfico. La huelga de actores ha puesto la mira, ahora, en la industria de los videojuegos.
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El paro del Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-AFTRA, por sus siglas en inglés), que inició el pasado 13 de julio, tiene completamente paralizado a Hollywood. Sin embargo, el impacto de esta situación podría extenderse más allá del mundo cinematográfico. La huelga de actores ha puesto la mira, ahora, en la industria de los videojuegos.
Con el paso de los años, y conforme los juegos se han hecho más complejos en el terreno narrativo, las compañías desarrolladoras cada vez requieren más actores. Ya sea para plasmar su imagen y actuación completa, o para prestar su voz.
De hecho, parte de los actores que participan en los videojuegos igualmente están asociados al mencionado sindicato.
Así pues, la organización pretende que estos intérpretes también alcen la voz para exigir mejores condiciones laborales. Y es que, desde noviembre de 2022, venció el contrato entre el sindicato y múltiples empresas de videojuegos estadounidenses. Entre ellas se encuentran Activision, Electronic Arts, Epic Games, Insomniac Games, Take-2 Interactive y Warner Bros. Games.
Los actores exigen un aumento salarial a las compañías de videojuegos
Lo más preocupante es que los meses siguen su curso y todavía no llegan a un acuerdo de renovación. ¿Por qué? Las exigencias del gremio, entre las cuales se incluye un aumento salarial del 11%, no son del agrado de los corporativos.
El sindicato de actores, por lo tanto, solicitó que sus afiliados voten a favor de iniciar una huelga en la industria de los videojuegos antes del 25 de septiembre.
"Una vez más, nos enfrentamos a la avaricia y a la falta de respeto de los empleadores", comentó Fran Drescher, presidenta del SAG-AFTRA.
Drescher, que se ha convertido en el megáfono de los actores, menciona que en los videojuegos también existe el riesgo de que la inteligencia artificial les arrebate sus empleos. Especialmente, los de aquellos que prestan su voz.
"De nueva cuenta, la inteligencia artificial pone a nuestros miembros en peligro porque reducen sus oportunidades para trabajar. Todos queremos un contrato justo, que refleje las importantes contribuciones de los artistas representados por SAG-AFTRA en una industria que ofrece entretenimiento a miles de millones de jugadores en todo el mundo", agregó Drescher.
Ahora bien, a diferencia de las empresas cinematográficas, que no están dispuestas a ceder a las peticiones de sus empleados, en la industria de los videojuegos sí hay disposición de resolver las diferencias.
En una entrevista con Axios, Audrey Cooling, representante de la industria de los videojuegos ante el SAG-AFTRA, afirmó que mantienen la conversación con los actores para alcanzar una solución. "Estamos negociando de buena fe y esperamos llegar a un acuerdo mutuamente beneficioso lo antes posible", comentó.
Indudablemente, para la industria de los videojuegos sería catastrófico que los actores comenzaran una huelga. Hay muchos títulos cuyo desarrollo depende, y mucho, de la participación de artistas; principalmente aquellos enfocados en la experiencia narrativa.
Si estallase una huelga de actores en el sector de los videojuegos, múltiples títulos sufrirían retrasos. Considerando que el tiempo de producción de un juego es significativamente más largo que el de una película o serie, las compañías se arriesgan a quedarse sin lanzamientos por periodos prolongados.
De momento, no parece que los gigantes de la industria de los videojuegos quieran arriesgarse a tener pérdidas multimillonarias porque sus desarrollos no están avanzando. Habrá que estar atentos al tema.