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La ex mujer de Juan Zabaleta, secretario administrativo del Senado nacional y hombre de extrema confianza del vicepresidente Amado Boudou, fue secuestrada ayer, junto a sus dos hijos adolescentes, por desconocidos que exigieron un rescate a cambio de su libertad y, al parecer, lo obtuvieron: una versión indicaba anoche que el funcionario habría pagado unos 50.000 dólares para liberar a los cautivos.
Anoche, la justicia federal y la policía bonaerense investigaban el hecho, que tuvo lugar durante la mañana y que habría durado unas cuatro horas. El fiscal Sebastián Basso comanda la pesquisa, que en un primer momento estuvo a cargo de la justicia ordinaria, pero que finalmente pasó al fuero federal al darse por acreditada la existencia de una llamada extorsiva.
Mariana Bagatela, ex esposa de Zabaleta, fue raptada por los secuestradores durante la mañana, cuando salía de su casa, situada en la Laprida y Olavarría, de Ituzaingó.
Acto seguido, secuestraron de la vivienda a dos de sus hijos y a otra persona, aparentemente también integrante del grupo familiar, cuya identidad y relación con las otras víctimas no fueron divulgadas.
Lo que ocurrió luego es materia de investigación. Una versión periodística sostenía que, tras negociar durante varias horas, el propio Zabaleta pagó unos 50.000 dólares a los delincuentes para que liberaran sanos y salvos a los cautivos. Esto no fue confirmado oficialmente.
Sí se sabe, en cambio, que Bagatela y los otros tres secuestrados fueron liberados sanos y salvos.
Uno de los objetivos de la investigación es determinar si los captores eligieron como víctima a la mujer por su relación con Zabaleta, que tiene una estrechísima relación con el vicepresidente de la Nación, a quien acompaña desde los tiempos en que dirigía la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
Del Anses a Economía
Oriundo de Morón, Zabaleta ocupó varios cargos en la Anses y desembarcó con Boudou en el Ministerio de Economía, donde dirigió la estratégica área de Relaciones Institucionales.
Cuando Boudou asumió la vicepresidencia de la Nación, en diciembre pasado, el ex ministro de Economía lo designó secretario administrativo de la Cámara alta.
Más allá de su cargo oficial, Zabaleta es también un colaborador en el armado político de su sector: se encarga de aceitar el despliegue territorial del vicepresidente en la provincia de Buenos Aires.
No obstante, al cierre de esta edición se ignoraba si los captores habían actuado a sabiendas del vínculo entre las víctimas y el importante funcionario nacional, que también fue concejal y candidato a intendente de Morón.
El fiscal Basso y policías de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de ese distrito, a cargo del comisario Aníbal Soria, aún intentaban anoche identificar a los autores del secuestro.
Fuente: lanación.com