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Sin hablar de culpa, pero sí de responsabilidad, se confirmó ayer que se identificó a las menores que encendieron los petardos que lastimaron al perrito Dardo el viernes 20 de abril. Así lo afirmó, en diálogo con El Tribuno, la jueza de Menores 2, Silvia Bustos Rallé, quien inmediatamente aclaró que de acuerdo a las pruebas con las que se trabajó se determinó que lo que ocurrió fue algo absolutamente accidental.
Durante la semana varios testigos prestaron declaración sobre lo ocurrido, pero fue un fotógrafo el que aportó las pruebas clave para identificar a las menores responsables. Bustos Rallé dijo que las fotos son muy nítidas y que capturaron el momento en el que Dardo agarra el petardo, pero que permiten observar que se trató de un accidente.
Las menores declararán la semana que viene. La jueza prefirió no revelar la fecha exacta, por temor a que se continúen propiciando situaciones de violencia. “No queremos que los menores continúen estando tan expuestos por este caso. Preservar su identidad y resguardarlos de los medios de comunicación es, en ese sentido, lo que consideramos más apropiado”, dijo la jueza, y concluyó: “Seguramente ahora se trabajará haciéndoles estudios ambientales y psicológicos a las menores. Es importante brindarles contención y apoyo”, dijo la jueza Silvia Bustos Rallé.
El día que todos lloraron
Ese mediodía de viernes empezó como una fiesta. Decenas de adolescentes, como acostumbran a hacerlo siempre, se reunieron en la plaza 9 de Julio para pasar un buen momento juntos. Estudiantes de diferentes colegios, vistiendo las camperas con las que identifican a cada promoción, vivían un clima de algarabía y festejo, hasta que ocurrió un accidente que dejó como resultado graves lesiones a un perrito callejero: Dardo. Un petardo, encendido por dos menores, estalló adentro de su hocico.
Dardo casi pierde la vida. Debió ser operado de urgencia y, afortunadamente, ya está fuera de peligro.
El triste episodio rápidamente inundó de imágenes y de palabras de agresión y hasta de amenazas a las redes sociales. Hoy, cuando la Justicia ya ha resuelto el caso, nos ocupa ese debate y el de la venta de pirotecnia por el cual las autoridades aún no se han pronunciado.
El perrito continúa mejorando
Más delgado, pero de muy buen ánimo. Así se lo ve a Dardo, que se levanta, camina y hasta sale a pasear.
Dardo continúa internado en el consultorio del médico veterinario Cristian Jack Bee Mill, en villa Las Rosas. Permanecerá allí al menos 10 días más.
Se esperaba que el animal recibiera el alta antes, pero tuvo algunas leves complicaciones en su estado de salud que se lo impidieron. El veterinario contó que se le soltaron algunos puntos y llegó a tener exposición de hueso, pero que afortunadamente se pudo suturar y el perro no corre ningún riesgo.
Continuará alimentándose por sonda. Recién en tres meses podrá comer por sus propios medios, pero solo papilla o comida triturada. De acuerdo a lo que estimó el doctor, sólidos comerá, recién, dentro de un año o un año y medio.
Aún no se definió qué familia lo adoptará. Hay muchas dispuestas.
El temor de padres y estudiantes
Muchos son los que, desde el principio, se atrevieron a juzgar lo que le ocurrió a Dardo y hasta prometieron hacer justicia por mano propia. En las redes sociales circularon las fotos de las menores acusadas de haber provocado las graves lesiones al perro. Circularon también amenazas e insultos que generaron más violencia.
Los padres de los alumnos de la institución y los mismos estudiantes sienten temor.
Lucir las camperas de la promoción ya no es un orgullo. Más bien es un riesgo, pues los chicos sienten que la sola identificación con el colegio puede volvérseles algo en contra suyo.
Hace unos días, un grupo de padres se reunió espontáneamente en la institución para manifestar que ellos y sus hijos temen que otros estudiantes tomen represalias por lo que sucedió.
Gustavo Flores, docente de la institución, contó algunas de las lamentables situaciones que los chicos manifestaron haber vivido en los últimos días. “Mis alumnos me contaron que una señora que cuida autos los insultó, otra alumna dice que apedrearon su casa e, incluso, una chica de séptimo grado dijo que fue golpeada por chicos de otros colegios. Es lamentable lo que está ocurriendo”, dijo.
¿Cómo se sigue? La Justicia ya hizo su parte. Ahora hay que garantizar la seguridad de los chicos.