Las principales provincias agropecuarias están llevando a cabo un “apriete fiscal” sobre “el agro, el cooperativismo y el consumo de la población en general”, que lleva a los ruralistas a realizar marchas y actos de protesta en diferentes puntos del país. Así lo señaló ayer Jorge Solmi, diputado provincial bonaerense y director de la Federación Agraria, al decir que “si se aumentan las valuaciones fiscales sin adecuar los mínimos no imponibles, el Gobierno nacional pretende que la Legislatura provincial se transforme en el instrumento de expulsión de los chacareros que hoy se encuentran ahorcados por la sequía y expoliados por los monopolios cerealeros”.
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Las principales provincias agropecuarias están llevando a cabo un “apriete fiscal” sobre “el agro, el cooperativismo y el consumo de la población en general”, que lleva a los ruralistas a realizar marchas y actos de protesta en diferentes puntos del país. Así lo señaló ayer Jorge Solmi, diputado provincial bonaerense y director de la Federación Agraria, al decir que “si se aumentan las valuaciones fiscales sin adecuar los mínimos no imponibles, el Gobierno nacional pretende que la Legislatura provincial se transforme en el instrumento de expulsión de los chacareros que hoy se encuentran ahorcados por la sequía y expoliados por los monopolios cerealeros”.
Solmi formuló declaraciones en vistas a las asambleas rurales que se realizarán hoy en Pergamino y el lunes en Dolores, y luego de movilizaciones que en el mismo sentido tuvieron lugar días atrás en Paraná, en protestas por incrementos en el impuesto inmobiliario rural que, de acuerdo con la evaluación de dirigentes agropecuarios, superan el 600 por ciento.
“No es casual que las cuatro provincias que mayor producción agraria tienen, Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos, hoy se encuentran en el mismo brete”, indicó el legislador en un comunicado, en referencia a lo que denominó “apriete fiscal”. Solmi agregó, en referencia a la reforma impositiva bonaerense, que “tampoco es casual que los productores y las entidades intermedias hayan sido expulsadas del debate eliminando las históricas comisiones valuadoras mixtas que se encontraban embebidas del espíritu participativo y plural que enriquecen las apreciaciones”.
Al respecto, aseguró que los autores de la reforma impositiva “esconden un terrible manotazo detrás de una supuesta reforma progresiva, que de eso no tiene nada ya que ni se menciona en la ley a la “Unidad Económica”, que es en cualquier manual de tributos la base de la progresividad en los impuestos agrarios”.
“Nadie se acordó del interior en la sequía y ahora les aumentan los impuestos. Es inadmisible”, sentenció.