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Los depósitos en dólares en bancos argentinos bajaron más del 5% la semana pasada, según datos del Banco Central, divulgados el viernes, y acentúan la tendencia declinante que se inició en noviembre, tras la aplicación de controles cambiarios para frenar la salida de capitales.
La salida de depósitos es un golpe a la liquidez de las entidades que, según analistas, no pone en peligro la estabilidad del sistema, y también una evidencia de la desconfianza de los inversores hacia las políticas intervencionistas de la presidenta Cristina Fernández.
Fuentes bancarias afirman que los retiros de dólares por parte de inversores privados obedecen a temores respecto a que el Gobierno pueda afectar, de alguna manera, las tenencias de divisas.
Un informe de la entidad monetaria mostró que los depósitos bancarios en dólares cayeron un 5,3% en la semana del 4 al 8 de junio a 10.908 millones, con lo que acumularon una baja del 31,7% desde octubre pasado.
“El Gobierno está en una encrucijada, ya que el intento de sostener las reservas del Banco Central se ve compensado por una incesante salida de depósitos en dólares (que restan reservas) y un evidente freno en la actividad económica”, dijo la sociedad de bolsa Allaria Ledesma.