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Fue lo más rescatable del fondo xeneize, en una noche agridulce, donde el empate sobre la hora de Romarinho (el hijo de Romario) cayó como un baldazo de agua fría. Matías Caruzzo, que jugó en lugar de Juan Insaurralde, pese al empate se mostró optimista de cara a la revancha el próximo miércoles en Brasil.
“Se empató, lo podríamos haber ganado y nos queda un poco de bronca por eso”, sintetizó el defensor de buen rendimiento en el encuentro de ida por el título subcontinental.
Y agregó: “Es una lástima, pero estamos bien. Sabemos que es una final y faltan noventa minutos. Nosotros buscamos siempre el partido. Si analizamos las llegadas de ellos, tuvieron solo la del gol. Nosotros tuvimos las chances más claras”.
Con respecto al encuentro de vuelta que se disputará el próximo miércoles en el estadio Pacaembú, el ex-Argentinos Juniors manifestó que aguarda un encuentro “parecido” al que se jugó anoche.
“Allá trataremos de hacer lo mismo. Lo que importa es que nos vaya bien. Creo que se puede dar un partido parecido al de esta noche. Queremos conseguir lo que tanto esperamos”, subrayó. Y finalmente añadió, con respecto a los brasileños: “Son un gran equipo, se replegaron bien e intentaron salir rápido, pero confiamos en lo nuestro ”.
Jugó gratis
El defensor Facundo Roncaglia, que después de la Libertadores dejará el club, jugó “gratis” el segundo tiempo. A los 18 minutos del primer tiempo fue amonestado por una falta, y venía de hacer otra. Siguió yendo fuerte en todas las pelotas y, en el final del primer tiempo, se mandó una irresponsabilidad que pudo haber dejado con uno menos a su equipo: pegó de atrás cerca del área y, además de generar un tiro libre peligroso, el árbitro chileno Enrique Osses le tenía que haber sacado otra amarilla y la roja. Por suerte para Boca eso no ocurrió y luego puso el 1 a 0 parcial.